Gil-Robles pide "m¨¢ximo respeto" para los extranjeros

Durante 1992 lleg¨® a Espa?a una avalancha de miles de ciudadanos que en su pa¨ªs sufren hambre o persecuci¨®n pol¨ªtica. Frente a esta invasi¨®n, parte de la sociedad ha pretendido levantar una muralla que se ha traducido en brotes xen¨®fobos, a los que no son ajenos los propios funcionarios de la Administraci¨®n, seg¨²n denuncia en su ¨²ltima memoria anual el defensor del Pueblo, ?lvaro Gil-Robles. Ante tal situaci¨®n, ¨¦ste no ha dudado en alzar su voz: "Deben respetarse por encima de todo las garant¨ªas legales vigentes, m¨¢xime si con ello llega a evitarse un error de consecuencias incalculables" para los extranjeros que demandan la hospitalidad espa?ola.El Defensor del Pueblo "llama la atenci¨®n" sobre el hecho de que el racismo no es un fen¨®meno nuevo en Espa?a y cita expresamente la marginaci¨®n de los gitanos.

El informe de Gril-Robles recoge el caso de un estudiante norteamericano, de raza negra, que perdi¨® el conocimiento tras ser golpeado brutalmente por un grupo de cinco cabezas rapadas cuando estaba escribiendo una carta en un banco p¨²blico de Alcal¨¢ de Henares (Madrid). Seg¨²n la v¨ªctima, el incidente se produjo sin que mediara palabra entre ¨¦l y sus atacantes. Por puro racismo. Otro universitario de la misma localidad, tambi¨¦n norteamericano y de raza negra, denunci¨® que el due?o de un bar se neg¨® a atenderle "porque ten¨ªa ¨®rdenes de no servir a gente de color". El joven explic¨® tambi¨¦n que "en alguna ocasi¨®n le han preguntado en la calle si vend¨ªa droga, en una clara relaci¨®n entre el color de su piel y el tr¨¢fico de estupefacientes".

El Defensor del Pueblo investiga lo ocurrido recientemente en un hospital de Santa Cruz de Tenerife, donde un cirujano expuls¨® del quir¨®fano a una enfermera porque "no le gustaba trabajar con negros", seg¨²n consta en el informe entregado hace unos d¨ªas por Gil-Robles al presidente del Congreso, F¨¦lix Pons. Algunos de los m¨¢s f¨¦rreos defensores de la muralla espa?ola son los polic¨ªas de los puestos fronterizos. El Defensor del Pueblo reconoce que las quejas motivadas por la actuaci¨®n de tales agentes han sido "numerosas". El an¨¢lisis de las denuncias revela que muchos polic¨ªas creen que los ciudadanos de pa¨ªses pobres que pretenden entrar en Espa?a lo hacen "con el ¨²nico objetivo de buscar trabajo", sin aceptar que puedan hacerlo por turismo o para visitar a alg¨²n pariente. La ley ha sido vulnerada incluso por los jueces. Uno orden¨® que dos marroqu¨ªes y un alban¨¦s fueran encarcelados en C¨¢diz, mientras se tramitaba el expediente de expulsi¨®n por estar ilegalmente en Espa?a.