Siria disocia el proceso de paz y, la deportaci¨®n de los palestinos

El secretario de Estado norteamericano, Warren Christopher, lleg¨® anoche a Riad, la capital saud¨ª, despu¨¦s de entrevistarse en Damasco durante cuatro horas con el presidente de Siria, Hafez el Asad. Fuentes de su entorno confirmaron en la capital saud¨ª que el secretario de Estado, que visit¨® anteriormente El Cairo y Anirn¨¢n y tiene previsto ir a Kuwait e Israel, incluir¨¢ tambi¨¦n L¨ªbano en el marco de su actual gira por Oriente Pr¨®ximo. La visita a Beirut se efectuar¨¢, por 11 razones de seguridad" en una fecha no determinada.Christopher se mostr¨® optimista despu¨¦s de su encuentro de Damasco y afirm¨® que se sent¨ªa 11 alentado" por la postura del jefe de Estado sirio de proseguir lasnegociaciones de paz. "Estoy de acuerdo con el presidente Asad de que el proceso de paz es m¨¢s importante que las dem¨¢s cuestiones", asegur¨® Christoplier, que dio as¨ª a entender que su interlocutor hab¨ªa aceptado disociar el tema de los palestinos deportados por Israel del de la reanudaci¨®n (le las conversaciones de Washington. El ministro sirio de Asuntos Exteriores, Faruk al Chareh, asegur¨® por su parte que no ve¨ªa "ninguna contradicci¨®n" entre el tema de los expulsados y lass negociaciones de paz.

En Israel sin embargo, informa V¨ªctor Cygielman, las fuentes oficiales se muestran m¨¢s pesimistas, y aseguran incluso que Damasco ha endurecido su postura y condiciona la reanudaci¨®n del di¨¢logo de paz al establecimiento de un calendario precisoy detallado para el retorno de los palestinos desterrados por Israel al sur de L¨ªbano.

El proceso de paz correr¨ªa en este caso, seg¨²n fuentes israel¨ªes, el riesgo de verse paralizado, mientras los cerca de 400 palestinos desterrados por Tel Aviv piden, adem¨¢s, el compromiso de que Israel renuncie a futuras medidas de expulsi¨®n, lo cual no est¨¢ dispuesto a aceptar el gobierno, por considerarlas como el arma m¨¢s poderosa contra la rebeli¨®n palestina en los territorios ocupados.

Warren Christopher espera obtener del primer ministro israel¨ª, Isaac Rabin, durante su etapa de Jerusal¨¦n, la anulaci¨®n de un n¨²mero suplementario de decretos de expulsi¨®n. Sin embargo, Rabin no har¨¢ ning¨²n regalo al responsable de la diplomacia norteamericana, ya que preferir¨¢ anunciar una eventual flexibilizaci¨®n de la postura israel¨ª directamente al presidente Bill Clinton durante su pr¨®ximo encuentro en Washington.

A Rabin le preocupa adem¨¢s que EE UU abandone su labor de buenos oficios para pasar a desempe?ar un papel m¨¢s activo y de mayor implicaci¨®n en el proceso de paz, como han venido reclamando ¨¢rabes y palestinos.

Tampoco convence al primer ministro israel¨ª la sugerencia de Christopher de elevar el nivel de las negociaciones, coloc¨¢ndolas bajo la presidencia de los ministros de Exteriores. El motivo es mantener a Sim¨®n Peres, el responsable de la diplomacia israel¨ª, lo m¨¢s lejos posible de las conversaciones en la capital norteamericana.