El cine hispano avanza en EE UU tras el ¨¦xito de 'El mariachi', filme que cost¨® 800.000 pesetas
Robert Rodr¨ªguez rod¨® su pel¨ªcula, hablada en espa?ol, con una c¨¢mara prestada
Que el sue?o americano hablara espa?ol era algo inconcebible hace tan s¨®lo algunos a?os. Pero las cosas parecen estar cambiando. Al menos en el cine de ra¨ªz hispana, que en este comienzo de temporada protagoniza por sorpresa la cartelera americana. El caso m¨¢s notable es el de la pel¨ªcula El mariachi, dirigida por Robert Rodr¨ªguez, un chicano de 24 a?os, hijo de mexicanos, que con una c¨¢mara prestada y 7.000 d¨®lares (unas 800.000 pesetas) complet¨® esta cinta de acci¨®n y humor en 14 d¨ªas. Premiada en diversos festivales, Columbia compr¨® la pel¨ªcula e invirti¨® s¨®lo en publicidad para estrenarla m¨¢s de 100 millones de pesetas. Otros nombres de cineastas hispanos, como V¨ªctor N¨²?ez y Nick G¨®mez, destacan tambi¨¦n en las carteleras.
En un pa¨ªs como Estados Unidos, que acostumbra a ignorar sus minor¨ªas hasta que ¨¦stas dejan de serlo, la poblaci¨®n de hispanos se multiplica ininterrumpidamente, aunque s¨®lo de forma muy paulatina alcanza una relativa importancia dentro de la miscel¨¢nea cultural norteamericana. El mariachi, hablada en espa?ol, cuenta las aventuras de un m¨²sico que es confundido al cruzar la frontera con un peligroso mafioso. A partir de ah¨ª, con una habilidad extraordinaria dada la penuria de sus medios, Rodr¨ªguez despliega todo el arsenal de su ingenio para lograr un entretenimiento digno, rodado con la c¨¢mara de cine que su padre utilizaba para promocionar las ventas de aparatos de cocina y encarg¨¢ndose ¨¦l mismo de la fotograf¨ªa, el montaje, la sonorizaci¨®n y los efectos especiales, entre los que destaca llenar preservativos con sirope para simular la sangre.Con dinero propio y de su protagonista, Carlos Gallardo, su idea era vender la pel¨ªcula para su promoci¨®n entre el cada vez m¨¢s abundante mercado de v¨ªdeo hispano. Sin embargo, decidi¨® enviar una muestra de su trabajo a la poderosa agencia art¨ªstica de Hollywood ICM. Para su sorpresa, la agencia decidi¨® firmar a Rodr¨ªguez como cliente.
En este instante comienza el recorrido de El mariachi por los distintos festivales americanos. Telluride, Toronto, Sundance y finalmente Miami, donde esta cinta de 16 mil¨ªmetros, subtitulada en ingl¨¦s y rodada muy por debajo de lo considerado marginal, cosech¨® una formidable recepci¨®n por parte del p¨²blico y la cr¨ªtica.
Volver a rodar
Los estudios de Hollywood hacen su entrada y Columbia firma con Robert Rodr¨ªguez un cortrato por dos pel¨ªculas, que incluye volver a rodar con mayores medios El mariachi y archivar el original sin estrenarlo comercialmente. Sin embargo, sorprendidos por la relevancia p¨²blica. de la pel¨ªcula, Columbia decide tirar copias en 35 mil¨ªmetros y estrenar la pel¨ªcula en m¨¢s de 60 cines por todo Estados Unidas.Parad¨®jicamente, una pel¨ªcula rodada con menos dinero que cualquier corto espa?ol, o incluso que la factura de un par de comidas de ejecutivos de Hollywood, se estrena ahora con m¨¢s de 100 millones de pesetas invertidos en su publicidad. El argumento entronca con la est¨¦tica del cine de acci¨®n m¨¢s popular en el pa¨ªs, el sangriento gore, y coincide adem¨¢s con la tendencia esnob de considerar de moda lo pobre. Con todo ello, el efecto no se hace esperar. Rodr¨ªguez est¨¢ presente en la prensa y la. televisi¨®n nacionales, las cr¨ªticas eluden cualquier comentario negativo, rendidas ante el coste de la cinta, y el p¨²blico la convierte en una de sus favoritas, con una recaudaci¨®n, en el primer fin de semana, de m¨¢s de 31 millones de pesetas.
Rodr¨ªguez ya prepara la segunda parte de El mariachi, esta vez, claro est¨¢, rodada en ingl¨¦s (aunque se anuncia que habr¨¢ una doble versi¨®n en espa?ol), para Columbia, y con un presupuesto de cinco millones de d¨®lares (unos 590 millones de pesetas).
Nueve hermanos
Aunque el salto a la fama no parece preocuparle demasiado: "Alg¨²n cr¨ªtico me ha advertido que tenga cuidado, que mis pr¨®ximas pel¨ªculas no correr¨¢n la misma suerte. Por eso he abierto una cuenta en un banco y he ingresado 7.000 d¨®lares, por si todo va mal y tengo que volver a rodar otra pel¨ªcula como El mariachi. Por el momento, quiero acabar mi carrera y ayudar a que tambi¨¦n estudien mis otros nueve hermanos".El caso de Robert Rodr¨ªguez, rodando cine desde los 12 a?os, dibujante de comics, rechazado por innumerables escuelas e ignorado por Hollywood, ha ganado el coraz¨®n de los americanos, siempre dispuestos a recompensar y mitificar el esfuerzo personal. Es, adem¨¢s, un paso gigante a la hora de alumbrar el camino de los cineastas hispanos en Hollywood.
En Los ?ngeles, una ciudad con m¨¢s de la mitad de la poblaci¨®n de origen hispano (mucha de ella ilegal), donde el espa?ol es idioma oficial, con varios canales de televisi¨®n y redes de salas de cine hispanas, y donde la cadena de radio l¨ªder en audiencia es, desde hace dos meses, una emisora de habla en castellano, parece imposible seguir dando la espalda a la cada vez menos minoritaria hispanidad.
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