Venecia exhibe el torrente de ideas revolucionarias que Duchamp dio al arte
El Palazzo Grassi re¨²ne 300 obras y documentos del mayor provocador del siglo
La mayor exposici¨®n de] artista franc¨¦s Marcel Duchamp (1887-1968), con 300 obras y documentos, se present¨® ayer en el Palazzo Grassi, instituci¨®n cultural de Fiat en Venecia. Italia recibi¨® la primera antol¨®gica de Marcel Duchamp con dos horas de paro en todos sus servicios, pero ello no impidi¨® que el artista m¨¢s innovador de este siglo junto con el espa?ol Pablo Picasso desbordara con sus ideas art¨ªsticas el Palazzo Grassi. La muestra permanecer¨¢ abierta al p¨²blico hasta el 18 de julio, con tiempo suficiente para medirse con la Bienal de Venecia, que dar¨¢ comienzo el 13 de junio.
"Duchamp es un artista absolutamente contempor¨¢neo; se le puede odiar o amar pero nunca ignorarlo" -declar¨® ayer Pontus Hulten, comisario general de la antol¨®gica, mientras atend¨ªa en varios idiomas a la prensa internacional. Destacaba la fuerza del pensamiento y de las ideas sobre el gusto y el arte procedentes de una persona que se consideraba no artista. Tambi¨¦n manten¨ªa intacto el poder de provocaci¨®n, que ya caus¨® disgustos a los cubistas y a los surrealistas.Pontus Hulten sosten¨ªa que el montaje se presentaba de una forma c¨®moda para que el espectador pudiera entrar con facilidad en el mundo de Duchamp. La arquitecta Gae Aulenti, autora de las reformas del Palau Nacional de Barcelona y del propio Palazzo Grassi, insist¨ªa ayer en que el montaje que ha realizado se basa en las mismas obras del artista. "Este edificio lo conozco como mi casa y se adapta muy bien a las piezas expuestas". Su idea es presentar al artista a trav¨¦s de su pensamiento, unir a las piezas los conceptos y teor¨ªas en que se basa. Para ello ha dise?ado unas m¨ªnimas estructuras blancas para presentar con limpieza tanto las pinturas como los numerosos documentos. Incluso ha cerrado con lienzos blancos las aberturas al gran patio central del palacio para evitar distracciones de los visitantes.
La propuesta de Gae Aulenti es desarrollar un "texto po¨¦tico" con secuencias a lo largo de 35 espacios donde se van situando las pinturas, los dibujos, las notas personales, los ready mades, las cajas y las fotograf¨ªas. Tambi¨¦n se puede acudir a su filmograf¨ªa, con una veintena de t¨ªtulos, en donde figuran directores como Ren¨¦ Clair o Andy Warhol, o el pase en v¨ªdeo de su c¨¦lebre An¨¦mic cin¨¦ma, de 1926, realizada por Duchamp junto con Man Ray.
Objetos manufacturados
El visitante se puede tropezar con una gran sala del primer piso en donde se han instalado gran parte de sus ready mades, los objetos manufacturados que Duchamp convirti¨® en obra de arte por su voluntad de artista,, su mayor aportaci¨®n al arte contempor¨¢neo seg¨²n los expertos, o empezar por la segunda parte, en donde se descubre por qu¨¦ el artista pensaba que "el lenguaje es un error de la humanidad".En este segundo piso, que empieza con el movimiento de sus discos ¨®pticos de los a?os treinta, se presentan materiales destinados a su otra gran obra, la titulada ?tant donn¨¦s, que tras trabajar en silencio durante 20 a?os se pudo instalar al a?o siguiente de su muerte en el Museo de Arte de Filadelfia. Se exponen varios ejemplares de su pieza m¨¢s divulgada, la Caja-maleta, un museo port¨¢til que reproduce obras y objetos. A su lado se sit¨²an sus primeras pinturas de principios de siglo, como Mujer desnuda que desciende una escalera, Dulcinea, Joven triste en un tren y otros retratos de familiares en donde aparece la influencia impresionista y fauvista, su culto por C¨¦zanne y los primeros rasgos que no pudieron soportar los cubistas.
Un gr¨¢fico pintado sobre la pared, que parece un balance econ¨®mico o una composici¨®n de John Cage, recorre las peripecias de su vida entre las dos guerras mundiales, los movimientos art¨ªsticos que atraviesa -desde el simbolismo, el dada¨ªsmo y el surrealismo hasta el nuevo realismo y el pop, sin que figure el erotismo, otro ismo para el artista-, los torneos de ajedrez, sus amigos (Picabia, Brancusi, Man Ray, Breton), sus residencias y viajes -se han olvidado de sus veranos en Cadaqu¨¦s durante los ¨²ltimos 20 a?os de su vida- y la historia de la familia, en donde est¨¢ la boda en 1954 con Alexina Duchamp (con anterioridad estuvo casada con Pierre Matisse), que hoy es esperada para la inauguraci¨®n oficial. Entre las numerosas- fotograf¨ªas aparece un Duchamp sonriente y jugador deajedrez en Cadaqu¨¦s y con Salvador Dal¨ª.
En el primer piso del Palazzo Grassi, por donde han pasado en a?os anteriores las muestras dedicadas a los fenicios, los celtas, Leonardo y Andy Warhol, todo conduce hacia El Gran Vidrio.
Trituradora de chocolate
Antes de llegar a la copia a tama?o natural que ha realizado Ulf Linde -el original tambi¨¦n se encuentra en el Museo- de Filadelfia- se presentan los dise?os constructivos y los numerosos apuntes sobre la esposa, los solteros, el molino de agua, las figuras masculinas, la trituradora de chocolate, hasta completar los 13 elementos que componen El Gran Vidrio, que adem¨¢s de los libros dedicados (entre ellos uno de Octavio Paz) recibe todo tipo de interpretaciones filos¨®ficas, antropol¨®gicas y m¨ªsticas, pasadas por el humor, la iron¨ªa y el erotismo. La mejor forma es acercarse a las 93 notas que contiene la Caja verde, reproducidas en 1934. Junto a las notas de la Caja verde, se muestra tambi¨¦n la Caja blanca, de 1967, con 79 notas y la caja de 1914, con 16 notas manuscritas.La rueda de bicicleta, la fuente (urinario), la pala de nieve, los percheros, las botellas de perfume, las Giocondas con barba -sus piezas m¨¢s conocidas-, el botellero y la jaula con terrones de m¨¢rmol son los ready mades m¨¢s populares, los que hacen recordar al artista que en 1915 decidi¨® convertir en arte las "esculturas ya hechas" y poner patas arriba todo el sistema art¨ªstico convencional.
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