El accidente nuclear de Siberia descubre la inseguridad de las instalaciones militares rusas
Esta vez no ha hecho falta esperar a que los t¨¦cnicos extranjeros criticaran la seguridad de las instalaciones nucleares rusas. El vicedirector del Instituto Kurch¨¢tov de Mosc¨², la m¨¢xima instituci¨®n cient¨ªfica rusa en f¨ªsica nuclear, asegur¨® el pasado jueves que la contaminaci¨®n radiactiva de 200 kil¨®metros cuadrados de tierra siberiana, tras la explosi¨®n que se produjo) el martes en la ciudad militar secreta de Tomsk-7, "se debi¨® a que las medidas de seguridad del sistema militar son peores que en las instalaciones civiles". El accidente nuclear de Siberia es considerado el peor desde el de Chern¨®bil (Ucrania) en 1986.
Seg¨²n este directivo del instituto, Nikol¨¢i Ponomariov-Stepnoi, es necesario "construir barreras de seguridad" en instalaciones como la planta radioqu¨ªmica de Tomsk-7 para "impedir que la radiactividad se disperse por el medio ambiente" despu¨¦s de un accidente.La principal cr¨ªtica que los t¨¦cnicos occidentales han hecho a las primeras generaciones de las centrales nucleares rusas de producci¨®n de electricidad ha sido la falta de barreras que impidan la contaminaci¨®n masiva del medio ambiente en caso de producirse un accidente grave. Esta cr¨ªtica se demostr¨® acertada cuando hace siete a?os se produjo la cat¨¢strofe de Chern¨®bil. La falta de barreras se corrigi¨® en las ¨²ltimas generaciones de centrales civiles pero tanto las centrales de tipo Chern¨®bil -dise?adas precisamente en el Instituto Kurch¨¢tov- como la mayor parte de las instalaciones militares siguen sin acercarse a los actuales requerimientos de la seguridad nuclear.
Preocupaci¨®n internacional
Ponomariov-Stepn¨®i consider¨® que ser¨ªa muy adecuado que la investigaci¨®n sobre las causas del accidente la llevara a cabo una comisi¨®n internacional. Tanto en Estados Unidos como en Jap¨®n se han o¨ªdo ya algunas voces interesada en participar en una comisi¨®n de ese tipo.
Sobre el origen de la explosi¨®n, el Ministerio de Energ¨ªa At¨®mica aseguraba el jueves que la explosi¨®n se produjo despu¨¦s de que se vertiera ¨¢cido n¨ªtrico en un contenedor de 34 metros c¨²bicos que conten¨ªa 20 metros c¨²bicos de una soluci¨®n de sales de uranio 238 (poco radiactivo) y otros radiois¨®topos. La presi¨®n aument¨® r¨¢pidamente y en seis minutos se produjo el estallido.
El asesor del presidente para la salud y el medio ambiente, Alex¨¦i Y¨¢blokov, un antiguo dirigente de Greenpeace, contradijo ayer a las autoridades nucleares al asegurar que en esa disoluci¨®n hab¨ªa tambi¨¦n sales de uranio 235 y de plutonio 239, ¨¦ste ¨²ltimo muy peligroso por su gran toxicidad. Valeri Bogdam, viceministro de Energ¨ªa At¨®mica, insisti¨® a este diario en que s¨®lo hab¨ªa uranio 238 y algunos is¨®topos radiactivos de vida corta: niobio, circonio y rutenio. Los servicios de control radiol¨®gico de Tomsk han detectado precisamente esos tres radiois¨®topos sobre la nieve y la tierra contaminadas, seg¨²n inform¨® anoche Step¨¢n Sulashkin, gobernador de la regi¨®n. "Plutonio no hemos encontrado", agreg¨®.
Nube t¨®xica
En una conversaci¨®n telef¨®nica, Sulakshin se?al¨® que la zona afectada por la contaminaci¨®n era mayor que la calculada el d¨ªa anterior: unos 100 kil¨®metros cuadrados dentro del per¨ªmetro de la ciudad cerrada y 100 kil¨®metros cuadrados m¨¢s fuera. En las zonas m¨¢s sucias se alcanzaba ayer una actividad de 400 microroentgen por hora, unas 20 o 30 veces la radiactividad normal de fondo. El ¨¢rea habitada m¨¢s castigada ha sido la aldea de Ge¨®rguievka, poblada por 20 personas y a 22 kil¨®metros de la planta siniestrada, con 35 microroentgen por hora.
Un segundo motivo de pol¨¦mica lo constituy¨® ayer la nube radiactiva te¨®ricamente generada por una parte de los is¨®topos que se escaparon de la planta siniestrada por el sistema de ventilaci¨®n. El viceministro Bogdam se?al¨® que ¨¦l no ten¨ªa constancia de su existencia y que no sab¨ªa que en Rusia hubiera instrumentos que permitieran su detecci¨®n desde tierra, tal y como el d¨ªa anterior hab¨ªa anunciado el Sistema de Defensa Antia¨¦rea.
40 a?os de contaminaci¨®n radiactiva
Los complejos industriales secretos destinados a la producci¨®n de plutonio para las bombas at¨®micas han sido durante m¨¢s de 40 a?os focos principales de contaminaci¨®n radiactiva en vastos territorios de Rusia.De los tres complejos dedicados a este menester -Mayak en Cheliabinsk 65, Tomsk 7 y Krasnoyarsk 26-, el m¨¢s estudiado por la comit¨¦ estatal sobre consecuencias de accidentes nucleares es el de Mayak (faro, en ruso), que en diferentes episodios de contaminaci¨®n radiactiva ha afectado en mayor o menor medida a medio mill¨®n de personas.
Un informe hecho p¨²blico en enero pasado por el citado comit¨¦ y, presentado a la prensa por su coordinador, Vasili Vozniak, se?ala que Mayak empez¨® a construirse en 1948 cerca de Cheliabinsk, en el sur de los Urales. Durante los siete primeros a?os de trabajo, agrega el informe, el complejo nuclear verti¨® grandes cantidades de residuos radiactivos al r¨ªo que pasa junto a ¨¦l. "Como consecuencia de ello, a lo largo de las d¨¦cadas posteriores, m¨¢s de 450.000 personas se han visto afectadas por la radiaci¨®n", precis¨® Vasili Vozniak.
El mayor accidente nuclear se produjo en 1957, precisamente al hacer explosi¨®n un dep¨®sito lleno de residuos radiactivos. Unas 10.000 personas, seg¨²n Vozniak, fueron evacuadas del territorio que se vio seriamente contaminado, pero nunca supieron por qu¨¦.
La gente deb¨ªa sospechar que algo hab¨ªa pasado. Muchos sufrieron incluso enfermedades graves. Pero nadie les inform¨® oficialmente del origen de sus problemas. El manto de secreto que cubri¨® este accidente fue tan espeso que tuvieron que pasar 30 a?os hasta que la prensa public¨® algo de ¨¦l.
Dosis significativas
A partir de los estudios hechos en archivos, se ha llegado a la conclusi¨®n de que "al menos 1.000,personas desarrollaron enfermedades cr¨®nicas a causa de la irradicaci¨®n", inform¨® Vozniak. Las mismas fuentes permiten deducir que "al menos 50.000 personas recibieron dosis significativas de radiaci¨®n", agreg¨®.
Un segundo accidente de importancia, seg¨²n el, informe, se produjo en 1967, cuando los vientos huracanados dispersaron a grandes distancias nubes de polvo radiactivo procedente de un lago totalmente contaminado al que se hab¨ªan echado desechos radiactivos.
Los vertederos nucleares situados en el entorno de Mayak "podr¨ªan producir 20 veces m¨¢s contaminaci¨®n" que la explosi¨®n de Chern¨®bil, seg¨²n el resumen del informe. La principal tarea de Mayak en el futuro podr¨ªa ser precisamente el reprocesamiento de sus residuos m¨¢s peligrosos.
Sobre la contaminaci¨®n provocada por los otros dos complejos productores de plutonio para las bombas nucleares a¨²n no existen informes oficiales tan detallados.
No obstante, s¨ª se han efectuado unos primeros estudios que muestran que muchos puntos de las orillas de los r¨ªos Obi y Yenis¨¦i, que atraviesan toda Siberia de Sur a Norte, presentan niveles de radiactividad muy por encima del natural, a causa de la acumulaci¨®n de desechos radiactivos provenientes precisamente de Tomsk 7 -el r¨ªo Tom, que pasa junto a esta ciudad secreta, desemboca inmediatamente en el Obi- y Krasnoyarsk 26, situada a las orillas del Yenis¨¦i.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.