Raimon aviva en el Palau Sant Jordi de Barcelona la memoria de una generaci¨®n

Pocos minutos despu¨¦s de las diez de la noche las luces del Palau Sant Jordi se apagaron totalmente, sonaron por los altavoces las prime. ras notas de Al vent y hasta la segunda estrofa la luz no demostr¨® que era el mismo Raimon en persona el que entonaba el emblem¨¢tico tema. Varios focos iluminaban al cantante, que apareci¨® con la pierna derecha apoyada en su emblem¨¢tica silla de tijera y vistiendo camisa roja y pantal¨®n oscuro. La ovaci¨®n retumb¨® en la alta b¨®veda del recinto ol¨ªmpico, con el p¨²blico puesto en pie. Luego pasaron por el escenario Daniel Viglietti, Paco Ib¨¢?ez, Joan Manuel Serrat y el legendario Pete Seeger, entre otros.

Tras esa primera canci¨®n Raimon salud¨® con un escueto "bona nit a tots" y pas¨® sin mediar otras palabras al siguiente tema: Molt lluny.

El escenario del Palau Sant Jordi era de una gran discreci¨®n, pero sumamente efectista, con una gran escalinata de color azul de la que pod¨ªan disponer los m¨²sicos fuese cual fuese su n¨²mero. Como ¨²nica decoraci¨®n, un gran tel¨®n de fondo reproduciendo el cuadro que Mir¨® pint¨® para la portada del ya cl¨¢sico disco Can?ons de la roda del temps. Dos pantallas de v¨ªdeo a ambos lados retransmit¨ªan la realizaci¨®n televisiva de TV-3.

Raimon prosigui¨® con su grupo recordando el centenario del pintor y entonando, en recuerdo de una vieja amistad, la canci¨®n D'un roig enc¨¨s.

Es posible cambiar

Tras estos primeros temas y mientras una parte del p¨²blico a¨²n estaba entrando en el Palau Sant Jordi, Raimon present¨® a Daniel Viglietti. El trovador uruguayo explic¨®: "Desde nuestro peque?o Uruguay y desde nuestra Am¨¦rica Latina venimos a deciros que seguimos creyendo en la posibilidad de cambiar". A esta breve declaraci¨®n sigui¨® uno de sus temas m¨¢s recientes, Mucho, poquito, nada. Pero no fue hasta que atac¨® la m¨ªtica canci¨®n A desalambrar cuando logr¨® caldear el ambiente.

Tras concluir el tema, Viglietti present¨® al siguiente invitado de la noche: Joan Manuel Serrat. El cantante enton¨® ?s quan dormo que hi veig clar, Pare y Can?¨® de matinada. Serrat dio paso al cantautor portugu¨¦s Luis C¨ªlia.

Serrat consigui¨® con su sola presencia uno de los momentos m¨¢s calidos de la noche. Can?¨® de matinada volvi¨® a estremecer muchos corazones. Tras Serrat, desfilaron el portugu¨¦s Luis Cilia y el vasco Mike1 Laboa.

Tras un corto descanso, la Coral Sant Jordi, dirigida por el hist¨®rico Oriol Martorell, interpret¨® sus versiones de C¨¢n?¨® de les mans y Dun temps, D'un pa¨ªs, entre nuevas muestras del clamor de un p¨²blico que hasta este momento se hab¨ªa caracterizado por su tranquilidad, su silencio, sus ganas de escuchar y la ausencia de consignas o banderas.

Continu¨® la velada con la presencia de Ovidi Monfilor, acompo?ado de Toti Soler, y Paco Ib¨¢?ez en solitario. Homenatge a Teresa, en la voz del primero, y Palabras para Julia, en la del segundo, marcaron nuevas muestras de entusiasmo que ya se desbordaron cuando Ib¨¢?ez dedic¨® su A galopar a los pol¨ªticos.

Tras Paco Ib¨¢?ez fue el turno de Pete Seeger y su nieto Tao Rodr¨ªguez Seeger. El tema Where had all the flowers gone? y Viva la quince brigada fueron en la voz del m¨ªtico trovador un viaje al pasado. A la hora de cerrar la edici¨®n, faltaban todav¨ªa un par de actuaciones y la esperada reaparici¨®n del homenajeado Raimon.