"Duermo como un beb¨¦"
No hay pre¨¢mbulo.Pregunta. ?La defensora sabe cocinar?
Respuesta. Soy una magn¨ªfica cocinera tradicional.
P. ?Cu¨¢l es la receta de los chorizos a la sidra?
R. No s¨¦, pero le doy la de una sopa mallorquina.
P. ?Qu¨¦ es el pueblo?
R. Por primera vez me siento integrada en el pueblo.
P. ?Qu¨¦ es el individuo?
R. El actor de los derechos humanos.
P. ?Hace falta un defensor del pueblo?
R. ?Hace falta la Constituci¨®n?
P. ?Por qu¨¦ el pueblo necesita tanto defensor?
R. Nunca ser¨¢n suficientes.
P. ?Pobre pueblo!
R. No tan pobre, sabe muy bien lo que quiere.
P. Si la que defiende es mujer, ?qu¨¦ cambia?
R. Las sensibilidades.
P. ?Qu¨¦ es el amor loco?
R. Un toque de distinci¨®n.
P. ?Lo defender¨ªa?
R. Claro.
R. ?C¨®mo?
R. Con flores, con versos y con los tribunales.
P. ?Cu¨¢l es su noci¨®n del pecado?
R. Creo m¨¢s en los principios que en los preceptos.
P. ?Qui¨¦n es el m¨¢s genuino defensor del pueblo?
R. El mejor alcalde, el Rey.
P. ?Qu¨¦ le ense?¨® El Rey, de Vilallonga?
. R. Confieso, no lo he le¨ªdo. Del Rey admiro su inmenso amor a Espa?a.
P. ?Lee algo especial desde que es defensora?
R. Las Cartas a Meneceo, de Epicuro.
P. ?Ganar¨¢ las elecciones generales el pueblo?
R. S¨ª, si le prometen menos y le escuchan m¨¢s.
P. La gente cada d¨ªa es menos tonta, ?no?
R. Yo digo que cada d¨ªa est¨¢ m¨¢s informada.
P. Si se le demuestra que Dios no existe, ?qu¨¦ hace?
R. Irme a la naturaleza.
P. ?Para encontrar a los ecologistas?
R. Para impregnarme de verde.
P. ?Es mejor fabulador Felipe Gonz¨¢lez o Garc¨ªa M¨¢rquez?
R. ?Ufffffl
P. ?Qu¨¦ clase de literato es Aznar?
R. Me regal¨® a S¨¦neca-
P. La defensora, ?de qu¨¦ puede ser ministra?
R. De nada. Mi misi¨®n es controlarlos.
P. ?C¨®mo es su alma?
R. Insondable y tridimensional.
P. Alguien olvida su n¨²mero de tel¨¦fono: ?qu¨¦ pierde?
R. Su punto de referencia.
P. ?Qu¨¦ le quita el sue?o?
R. Duermo como un beb¨¦.
P. ?Desea una siestecita ahora, en mi regazo? ,
R. A su lado siempre estar¨ªa tranquila.
P. ?Qu¨¦ dice de Cantinflas?
R. ?C¨®mo se llamaba aquella canci¨®n de los clowns, de Barbra Streisand...?
P. ?Cu¨¢ntos ramos de rosas rojas le regalaron?
R. Muchos, tengo 48 a?os.
P. ?Qu¨¦ es la corrupci¨®n?
IR. El culto al vellocino de oro.
P. La declaraci¨®n de patrimonio de los pol¨ªticos, ?le huele a mens sana in corpore sano?
R. Yo la estoy haciendo.
P. ?Carlos y Diana volver¨¢n a comer perdices?
R. Eso pasa en los cuentos de hadas.
P. ?Camilla Parker es humana o divina?
R. Se me agot¨® el ingenio.
P. ?Sabe que Ortega Cano llora viendo cantar a su Roc¨ªo?
R. ?Por qu¨¦ no la ternura?
P. ?Patrocinar¨ªa una televisi¨®n porno, nocturna, para aliviar sufrimientos del pueblo?
R. ?Qu¨¦ perverso es usted!
P. ?Qu¨¦ nombrar¨ªa a I?aki Gabilondo para defender m¨¢s?
R. Si pudiera, adjunto.
P. ?Qu¨¦ es la mentira en pol¨ªtica?
R. Lo que el pueblo no perdona.
P. ?Conoce un pol¨ªtico que no exagere?
R. La pol¨ªtica es teatro.
P. ?Le recomienda algo al pueblo?
R. Que le lea a usted.
P. ?Por favor!
R. Pues espere que le leo algo de Jim Morrison: "?ste es el fin, hermoso amigo, / ¨¦ste es el fin, mi ¨²nico amigo, / el fin de nuestros elaborados planes; / el fin de todo lo que tiene sentido, el fin, / sin seguridad ni sorpresa, el fin".
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.