La jugada maestra
Gonz¨¢lez ofreci¨® a Garz¨®n participar en las listas del PSOE una semana antes de convocar las elecciones
La ma?ana del martes 27 de abril, el presidente del Gobierno, Felipe Gonz¨¢lez, daba el golpe m¨¢s espectacular de la precampa?a al cerrar en La Moncloa con los magistrados Baltasar Garz¨®n y Ventura P¨¦rez Mari?o su compromiso de concurrir en las listas electorales socialistas. Era la segunda vez que Gonz¨¢lez y Garz¨®n se ve¨ªan en su vida. La anterior hab¨ªa sido el s¨¢bado 27 de febrero, en Quintos de la Mora (Toledo). La clave que permite descifrar el enigma de c¨®mo es posible que con s¨®lo dos entrevistas el juez m¨¢s popular de Espa?a acepte saltar a la pol¨ªtica de la mano de Felipe Gonz¨¢lez estaba en el cuarto testigo del encuentro en La Moncloa, el presidente de Castilla-La Mancha, Jos¨¦ Bono.
Una manifestaci¨®n de familiares de presos de ETA ante la c¨¢rcel castellano-manchega de Herrera de la Mancha, poco antes de las pasadas Navidades, est¨¢ en el origen remoto de la historia. Algunos familiares de presos insultaron a los guardias civiles que vigilaban el recinto penitenciario, y el presidente de la comunidad, Jos¨¦ Bono, hizo una cr¨ªtica gen¨¦rica contra los "amigos de ETA".Cuando Bono vio transcritas sus declaraciones, temi¨® que pudieran interpretarse como un ataque a determinados magistrados, como el juez Baltasar Garz¨®n, y decidi¨® llamar a su amigo, el magistrado Ventura P¨¦rez Mari?o, para que le pusiera en contacto con el juez para darle explicaciones. Bono y P¨¦rez Mari?o son viejos amigos. Se conoc¨ªan desde sus tiempos de estudiantes, hab¨ªan trabajado juntos y hab¨ªan militado ambos en el Partido Socialista Popular (PSP).
Bono llam¨® a Garz¨®n, y quedaron citados a los pocos d¨ªas en un restaurante madrile?o para almorzar. Fue el inicio de su amistad. Se vieron numerosas veces "quiz¨¢s hasta una decena"- antes de la fecha crucial del 27 de abril. Cuentan que Bono confirm¨® inmediatamente que su interlocutor era un hombre de ideolog¨ªa progresista y que sent¨ªa un profundo respeto por Felipe Gonz¨¢lez. En una de las conversaciones que Bono mantuvo con Garz¨®n, a mediados de febrero, le pregunt¨® al juez si quer¨ªa conocer a Felipe Gonz¨¢lez. Garz¨®n acept¨®.
Jos¨¦ Bono hab¨ªa invitado al presidente del Gobierno a asistir en Toledo, en la noche del viernes 26 de febrero, a la clausura de una jornada municipal del PSOE y aprovech¨® la ocasi¨®n. Plante¨® al jefe de Gobierno la posibilidad de que prolongara un d¨ªa m¨¢s su estancia en la comunidad para celebrar un encuentro con Garz¨®n y otras personalidades representativas de diversos sectores sociales.
Romper el aislamiento
El presidente de la comunidad castellano-manchega era receptivo al discurso reiterativo de Gonz¨¢lez de romper el aislamiento del PSOE y abrirse a sectores m¨¢s amplios de la sociedad, y le plante¨® el encuentro en esos t¨¦rminos. A Gonz¨¢lez le gust¨® la idea y acordaron reunirse el mediod¨ªa del s¨¢bado, 27 de febrero. Se celebrar¨ªa en la localidad toledana de Quintos de la Mora, un coto propiedad del Estado.
Bono lo organiz¨®. Cit¨® con unos 10 d¨ªas de antelaci¨®n a los magistrados Baltasar Garz¨®n y Ventura P¨¦rez Mari?o; al abogado Gregorio Mara?¨®n; al pintor Antonio L¨®pez; al presidente de Greenpeace, Xavier Pastor; al presidente del Proyecto Hombre, al m¨¢ximo representante de Sacerdotes contra la Droga, Modesto Salgado; a la vicerrectora de la Universidad de Castilla-La Mancha, Clementina D¨ªez Valde¨®n; al presidente de la cooperativa La Solana, Rafael L¨®pez; al presidente del Consejo de la Juventud, Josele S¨¢nchez, y al representante de los Boy Scouts espa?oles. Tambi¨¦n fueron invitados la alcaldesa de El Ballestero (Toledo), Concha V¨¢zquez; el consejero de Agricultura de la Junta de Castilla-La Mancha, Fernando L¨®pez Carrasco, y la esposa de Jos¨¦ Bono, Ana, Rodr¨ªguez. .
Los convocados no se conoc¨ªan entre s¨ª con la excepci¨®n de Garz¨®n y P¨¦rez Mari?o, por un lado, y Gregorio Mara?¨®n y Antonio L¨®pez, por otro. Bono era el hilo conductor, y lo ¨²nico que sab¨ªan los invitados era que iban a encontrarse con Felipe Gonz¨¢lez, pero desconoc¨ªan quienes iban a ser sus compa?eros en la jornada. Estas medidas tan f¨¦rreas se adoptaron por asegurar la discreci¨®n del encuentro, manifest¨® uno de los asistentes.
La cita inicial fue a las doce del mediod¨ªa en el Hotel Montes de Toledo, en la localidad de Los Y¨¦benes. "Hac¨ªa un d¨ªa criminal, de lluvia y fr¨ªo", recuerda uno de los asistentes. Los convocados se dirigieron en varios autom¨®viles a la finca, a un cuarto de hora del hotel. En la entrada de la casa les esperaba Felipe Gonz¨¢lez, en solitario.
El presidente conoc¨ªa ¨²nicamente a dos de sus invitados, el abogado Gregorio Mara?¨®n y el pintor Antonio L¨®pez. Tras saludarles, les mostr¨® un trabajo que estaba realizando sobre trasplante de encinas. A continuaci¨®n pasaron al interior de la casa. "Era sorprendentemente modesta en espacio y mobiliario", dice uno de los asistentes.
Gonz¨¢lez pidi¨® a sus convidados que se sentaran en torno al fuego y empez¨® su charla contando el viaje que acababa de realizar a China e India. "Estaba bastante impresionado por la capacidad de crecimiento de China", dijo uno de los asistentes. Mientras hablaban degustaron queso manchego, acompa?ado de vino de la tierra.
Alrededor de las dos de la tarde se sentaron en la mesa para almorzar. Gonz¨¢lez se situ¨® entre Garz¨®n, a su izquierda, y el religioso Modesto Salgado, a su derecha. Enfrente se colocaron Gregorio Mara?¨®n y Ventura P¨¦rez Mari?o. Felipe Gonz¨¢lez y sus invitados empezaron a discutir sobre pol¨ªtica nacional mientras despachaban unas jud¨ªas blancas, un filete y naranjas, que deposit¨® sobre la mesa una se?ora que desapareci¨® tan discretamente como lleg¨®.
Cr¨ªticas al Gobierno
El protagonismo de la reuni¨®n lo tuvieron Baltasar Garz¨®n, Ventura Perez Mari?o y Gregorio Mara?¨®n. Fueron muy cr¨ªticos con la actitud del Gobierno hacia la sociedad. No eludieron descalificativos para la pol¨ªtica econ¨®mica, al caso Filesa, al aislamiento del Ejecutivo y del PSOE, y coincidieron en la importancia del liderazgo de Felipe Gonz¨¢lez para remontar la situaci¨®n. "Se le hizo un diagn¨®stico de la situaci¨®n muy sincero. Al hilo de las encuestas se le habl¨® del clima de depresi¨®n", dice uno de los asistentes.
El juez Baltasar Garz¨®n fue muy insistente en la necesidad de transparencia del Gobierno y las instituciones, del funcionamiento de la Justicia, cr¨ªtico con el Ministerio Fiscal, y coincidi¨® con sus compa?eros en la necesidad del liderazgo de Gonz¨¢lez.
"Las cr¨ªticas fueron muy directas y sinceras, pero estaba claro, a la vez, que se hac¨ªan desde dentro del proyecto que representa Gonz¨¢lez. Aqu¨¦lla no era una reuni¨®n con el secretario general del PSOE, sino con el presidente del Gobierno", dice uno de los asistentes.
?sa fue tambi¨¦n la t¨®nica del resto de los asistentes, que intervinieron menos. Modesto Salgado plante¨® los problemas de la droga. El pintor Antonio L¨®pez tuvo una apasionada intervenci¨®n, de car¨¢cter humanista, en defensa de la superaci¨®n de las fronteras y del acercamiento del hombre a la naturaleza.
Tambi¨¦n tuvo un protagonismo el presidente de Greenpeace en la ¨²ltima hora de la sesi¨®n. Pastor reproch¨® a la administraci¨®n socialista la falta de sensibilidad hacia el medio ambiente, aunque concedi¨® a Gonz¨¢lez que tanto ¨¦l como el ministro de Obras P¨²blicas y Transportes, Jos¨¦ Borrell, estaban en una onda m¨¢s receptiva.
"Gonz¨¢lez entr¨® al trapo y no rehuy¨® una sola de las cr¨ªticas. No puso mala cara, y tambi¨¦n fue muy sincero en sus respuestas. Estuvo autocr¨ªtico, reconoci¨® errores e insisti¨® en su preocupaci¨®n por la gobernabilidad del pa¨ªs ante el horizonte que se planteaba, aunque hablaba a¨²n de agotar la legislatura hasta el oto?o", se?ala un asistente.
En el tramo final del encuentro, el jefe del Gobierno se explay¨® hablando de agricultura y medio ambiente en respuesta a las cr¨ªticas del presidente de Greenpeace. Gonz¨¢lez, que sorprendi¨® a algunos de los asistentes por sus conocimientos en materia agr¨ªcola, se extendi¨® en distinguir entre las "cr¨ªticas serias y la demagogia" en materia ecol¨®gica.
Se?al¨® en su discurso que "no se pueden transplantar mec¨¢nicamente los problemas de medio ambiente de Alemania a Espa?a" y puso como ejemplo que "en Extremadura, por ejemplo, el problema, no es la lluvia ¨¢cida, sino la escasez de agua y la desertizaci¨®n".
Felipe Gonz¨¢lez tambi¨¦n se extendi¨® en su primera intervenci¨®n de precampa?a en Madrid, anteayer, viernes, en esta cuesti¨®n, por lo que uno de los asistentes afirma tener la sensaci¨®n de que "aquel encuentro le sirvi¨® a Felipe Gonz¨¢lez como uno de sus ensayos del discurso que ahora est¨¢ haciendo".
Un poco antes de las siete de la tarde se levant¨® la sobremesa. Jos¨¦ Bono tuvo, como intermediario, un papel muy discreto. "S¨®lo interven¨ªa el alg¨²n momento aislado para introducir alguna cuesti¨®n", se?ala un asistente. Una hora antes, el presidente de Castilla-La Mancha empez¨® a recordar a Gonz¨¢lez que ten¨ªa que terminar porque ten¨ªa una cita pendiente en La Moncloa, pero el jefe del Gobierno se alarg¨® una hora m¨¢s. "Seguro que lleg¨® tarde a la cita", dice un asistente. Sobre la mesa queda,ron vac¨ªas todas las existencias de la casa de pachar¨¢n y an¨ªs de Chinch¨®n.
Autocr¨ªtica
Felipe Gonz¨¢lez sali¨® satisfecho. Sus convidados, tambi¨¦n, seg¨²n manifiestan algunos de los asistentes "por la sinceridad y esp¨ªritu autocr¨ªtico, del presidente del Gobierno". No volvi¨® a ver a ninguno de sus interlocutores, con lit excepci¨®n del presidente de Castilla-La Mancha, quien mantuvo el hilo conductor con Garz¨®n y P¨¦rez Mari?o.
La reuni¨®n fue decisiva. Bono sigui¨® viendo a Garz¨®n, y le transmiti¨®, con la autorizaci¨®n de Felipe Gonz¨¢lez, la pretensi¨®n del jefe de Gobierno de contar coja ¨¦l en su proyecto pol¨ªtico. Garz¨®n mostraba, por su parte, un inter¨¦s creciente por los planteamientos autocr¨ªticos y reformistas de Gonz¨¢lez que le transmit¨ªa Bono. Lo mismo sucedi¨® con Perez Mari?o.
Por fin, lleg¨® la oferta. Fue a comienzos de abril, un semana antesde que Gonz¨¢lez disolviera las Cortes. Bono plante¨® a Garz¨®n si estar¨ªa dispuesto a participar en las candidaturas del PSOE. El juez mostr¨® un cierto asombro, pero respondi¨® que estaba dispuesto a estudiar la oferta. Paralelamente, recibieron ofertas otros dos de los asistentes al almuerzo de Quintos de la Mora, P¨¦rez Mari?o, y, al parecer, Gregorio Mara?¨®n. Este ¨²ltimo declin¨® por sus compromisos profesionales.
El encuentro final se produjo la ma?ana del martes 27 en La Moncloa. Gonz¨¢lez se entrevist¨® con Garz¨®n y P¨¦rez Mari?o en presencia de Bono. El acuerdo se acab¨® de cerrar en hora y media de conversaci¨®n con Felipe Gonz¨¢lez. Ambos ya iban dispuestos a aceptar, tras las conversacionesque hab¨ªan mantenido previamente con Bono.
Todas las fuentes consultadas aseguran que "no hubo un mercadeo" sobre compromisos de gobierno, aunque nadie del entomo de Felipe Gonz¨¢lez y de los magistrados pone en duda que tendr¨¢n responsabilidades en el ¨¢rea de Interior o Justicia en el caso de que el PSOE revalide su victoria en las urnas. Tambi¨¦n parece existir el compromiso por ambas partes de asumir la sentencia del Tribunal Constitucional sobre la Ley de SeguridadCiudadana, tan combatida por Baltasar Garz¨®n.
El impacto de la noticia ha afectado a la precampa?a electoral de forma notoria. El viernes por la noche son¨® una atronadora ovaci¨®n de los militantes y altos cargos socialistas que abarrotaban el Palacio de Exposiciones y Congresos de Madrid cuando Felipe Gonz¨¢lez cit¨® a Garz¨®n y P¨¦rez Mari?o, y denunci¨® los ataques que estaban recibiendo por su participaci¨®n.
Bono, el intermediario en la operaci¨®n, afirma que "para algunos, s¨®lo son jueces justos los que son antisocialistas y de dere chas". El presidente de Castilla-La Mancha se da por satisfecho. "El verdadero protagonista es Felipe Gonz¨¢lez, y estoy muy satisfecho de haber servido de instrumento", dijo ayer a este diario.
La discreci¨®n ha sido clave en el triunfo de la gesti¨®n. S¨®lo estaban al tanto de la operaci¨®n Gonz¨¢lez, Bono y el vicepresidente del Gobierno, Narc¨ªs Se rra, adem¨¢s de Garz¨®n y P¨¦rez Mari?o. Ha sido el secreto pol¨ªtico mejor guardado del a?o.
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