La abdicaci¨®n del "avvocato"
La crisis puede empa?ar el relevo de Giovanni Agnelli por su hermano Umberto al frentre de Fiat en 1994
Giovanni Agnelli dejar¨¢ la presidencia de Fiat dentro de 12 meses. As¨ª estaba previsto desde hace tiempo y as¨ª lo confirm¨® el propio avvocato en la reciente junta de accionistas de la compa?¨ªa, celebrada en Tur¨ªn el pasado 30 de junio. Todo indica que el rey de Fiat abdicar¨¢ en su hermano Umberto. Pero lo que ten¨ªa que haber sido un acontecimiento casi m¨¢s social que empresarial amenaza con verse empa?ado por los problemas que acosan al grupo: la crisis del autom¨®vil, la recesi¨®n mundial y el clima de descomposici¨®n institucional en Italia, que ha llevado a los tribunales a casi una decena de ejecutivos de Fiat."He entrado en los ¨²ltimos 12 meses de mi permanencia en la casa y quiero que el cambio de guardia se lleve a cabo de la manera m¨¢s sencilla posible, con las mayores facilidades para todos. Quiero dejar la casa en manos seguras". Con estas palabras confirm¨® Giovanni Agnelli ante la prensa, al t¨¦rmino de la junta de accionistas, su determinaci¨®n de cumplir el compromiso de dejar Fiat despu¨¦s de 50 a?os de presencia suya en el consejo y 28 de presidencia. El avvocato utiliz¨® incluso un s¨ªmil automovil¨ªstico para explicar el proceso gradual de alejamiento del poder que ¨¦l mismo se ha impuesto: "En los pr¨®ximos seis meses comunicar¨¦ algunas decisiones. En el siguiente semestre ir¨¦ levantando gradualmente el pie del acelerador".
El futuro de Romiti
No ser¨¢ la suya la ¨²nica marcha importante. Tambi¨¦n su lugarteniente, el consejero delegado Cesare Romiti, dejar¨¢ Fiat en un futuro pr¨®ximo. Romiti, que, aunque parezca incre¨ªble por su aspecto, ha cumplido ya los 70 a?os que los estatutos de Fiat marcan para decidir la fecha de jubilaci¨®n del consejo, hizo una sentimental referencia a su pr¨®ximo cambio de actividad: "Llevo cerca de 20 afios en Fiat y casi 60 trabajando. Pero soy tambi¨¦n un ser pasional, no s¨®lo racional, y mi pasi¨®n por Fiat me perseguir¨¢ incluso cuando deje la casa". ?Aceptar¨¢ Romiti conducir una empresa conjunta que preparan Himont y Snia? "En lo que a mi respecta pienso m¨¢s en la jardiner¨ªa que en Himont", brome¨®. "No le crean. La jardiner¨ªa no va con su naturaleza", le corrigi¨® Agnelli.Pero, al margen de las flores que se intercambian los m¨¢ximos dirigentes de Fiat, su desaparaci¨®n de la l¨ªnea ejecutiva coincide en el tiempo con una de las situaciones m¨¢s delicadas del grupo. Mientras casi una decena de directivos se han visto salpicados por las tangentes -pagos de comisiones a partidos pol¨ªticos-, la recesi¨®n europea, que ha afectado sobremanera al sector del autom¨®vil, amenaza con provocar unas p¨¦rdidas operativas de un bill¨®n de liras (85.000 millones de pesetas). Es decir, la actividad industrial propiamente dicha entrar¨¢ bruscamente en n¨²meros rojos. Para hacerse una idea de la gravedad baste decir que Fiat obtuvo en 1992 unos beneficios operativos de 24.000 millones de pesetas y que en 1991 hab¨ªan superado los 75.000 millones.
Desinversiones
Para compensar estas p¨¦rdidas, Giovanni Angelli ya adelant¨® a los accionistas que pondr¨¢ en venta participaciones de Fiat en sectores no estrat¨¦gicos. Estas ventas afectar¨¢n, probablemente, a la aseguradora Toro y 4 la distribuidora agroalimentaria Rinascente. En total las desinversiones podr¨ªan aportar entre dos y tres billones de liras (de 170.000 a 255.000 millones de pesetas).La crisis ha empezado a generar problemas entre las distintas factor¨ªas. Las ventas han ca¨ªdo un 20% precisamente pocos meses antes de que se inaugure la planta ultramoderna de Melfi, en el sur de Italia. La apertura de una factor¨ªa mucho m¨¢s productiva en un momento de crisis ha despertado el recelo entre los trabajadores del norte, hasta el punto de provocar el compromiso del avvocato con la vieja cuna de Fiat: "Por razones hist¨®ricas y afectivas debo decir que las f¨¢bricas turinesas de Mirafiori y Rivalta son las que recibir¨¢n mayor atenci¨®n". Sin embargo, Agnelli advirti¨® que la ca¨ªda de ventas comporta una reducci¨®n de plantilla y que el sistema m¨¢s econ¨®mico es "concentrando los sacrificios antes que distribuyendo los recortes entre todos".
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