Peligro de extinci¨®n
?lvaro Mej¨ªa y tres colombianos m¨¢s ¨²nicos escarabajos en Francia
Cuatro corredores y un puesto en el que se sirve caf¨¦ cada ma?ana es toda la representaci¨®n colombiana en el presente Tour. Por primera vez desde 1983, ning¨²n equipo de escarabajos anima la ronda francesa. Cuatro -Alvaro Mej¨ªa (Motorola), Oliverio Rinc¨®n (Amaya), Nelson Rodr¨ªguez (ZG) y Abelardo Rond¨®n (Gatorade)- son el recuerdo de aquel tiempo en que el Tour lleg¨® a poseer- dos equipos de escaladores morenos, flacuchos y bajitos (Postob¨®n y Caf¨¦ de Colombia), gobernados por capataces de la talla de Lucho Herrera o Fabio Parra. Todo eso es historia. La crisis econ¨®mica del ciclismo mundial amenaza con fumigar en Europa una raza particular de corredores. Los escarabajos son una especie en peligro de extinci¨®n.Hubo un tiempo no muy lejano en que por las carreteras del Tour, en las llegadas y en las salidas, una banda de tipos vestidos de amarillo y micr¨®fono en mano berreaban a los cuatro vientos las haza?as, un tanto exageradas, de sus corredores. Ahora, la voz de Radio Nacional de Colombia y Radio Caracol apenas si puede oirse en la meta. Ya no son 30 los locutores, sino cuatro, y apenas tienen algo que contar. El segundo puesto de Alvaro Mej¨ªa en la general es un regalo inesperado.
Rodrigo V¨¢zquez, locutor de Radio Nacional de Colombia, lo explica as¨ª: "La retirada de Postob¨®n como patrocinador del ciclismo profesional colombiano ha sido la culminaci¨®n de un proceso de crisis econ¨®mica que en nuestro pa¨ªs ha tenido el mismo efecto devastador que en otras naciones europeas como Holanda, Francia o B¨¦lgica". Colombia s¨®lo posee dos equipos profesionales en la actualidad: Gaseosas Glacial y Aguardiente Antioque?a.
El sueldo medio de un corredor profesional en Colombia es de 24 millones de pesos, unos 4 millones de pesetas. "Con una oferta de seis millones de pesetas, cualquier ciclista colombiano vendr¨ªa a nado a Europa", afirma H¨¦ctor Urrego, locutor radiof¨®nico de la cadena estatal colombiana. "Oliverio Rinc¨®n, por ejemplo, jam¨¢s podr¨¢ volver a Colombia. Nadie podr¨ªa pagarle. Aqu¨ª cobra entre 15 y 20 millones de pesetas, lo que traducido en pesos supone m¨¢s de 80 millones, casi la tercera parte del presupuesto total de uno de nuestros dos equipos profesionales".
1992 marc¨® el inicio del fin del ciclismo colombiano en Europa. Lucho Herrera y Fabio Parra se bajaron de la bici. Ra¨²l Meza, el director del Postob¨®n, vislumbr¨® los nubarrones que se avecinaban y decidi¨® dedicarse a negocios particulares. Un a?o antes, en 1991, la armada colombiana hab¨ªa dado una agradable sorpresa en la contrarreloj de Alengon, la primera que gan¨® Miguel Indur¨¢in: cinco de ellos se clasificaron entre los 50 mejores. Para un pa¨ªs especializado en la fabricaci¨®n de escaladores, aquel fue un d¨ªa hist¨®rico.
La bonanza se mantiene en el ciclismo de base, en las pruebas por aficionados. En el ¨¢mbito profesional la degradaci¨®n es evidente. Meza lo advirti¨® en la pasada edici¨®n del Tour: "Est¨¢ costando encontrar corredores de la categor¨ªa de Herrera o Parra". Nelson Rodr¨ªguez, gregario del ZG Mobili, apenas conoce el ciclismo de su pa¨ªs, ya que todos sus a?os como profesional los ha vivido en Europa. Sin embargo, opina que la crisis de los escarabajos es el fin de un ciclo: desde que el Tour adopt¨® la f¨®rmula abierta y acept¨® a los aficionados colombianos en 1983 hasta la actualidad los escarabajos han trazado un curva. "Habr¨¢ que esperar tres a?o o m¨¢s para volver a empezar el trabajo", opina el periodista Rodrigo V¨¢zquez.
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