Todos contra Faldo en el Open Brit¨¢nico
El Open Brit¨¢nico, se apresta a vivir hoy (Canal +) en el club Royal Saint George's, de Sandwich, una de las vueltas finales m¨¢s apasionantes de sus 122 ediciones. Los cin co mejores golfistas en la clasificaci¨®n mundial se encuentran en el abanico de los cuatro golpes de diferencia con otros cuatro m¨¢s. De momento, Nick Faldo (el n¨²mero l), contra el que de alguna manera van todos, y Corey Pavin (el 15) aventajan por un golpe (202 por 203) a Bernhard Langer (el 2) y Greg Norman (el 4) por tres, a Nick Price (el 3) y Peter Senior (el 30), con 205, y por cuatro, a Fred Couples (el 5), Emie Els (el 31) y Wayne Grady (el 82), con 206. Tila, por favor.
ENVIADO ESPECIALNo es cierto que Faldo sea perfecto. Miente quien lo afirma. Por ejemplo, las predicciones del ingl¨¦s no siempre se cumplen. Hab¨ªa advertido como probable que el Open se decidiera por encima del par del campo como en 1985, cuando el escoc¨¦s Sandy Lyle se impuso con 282 golpes (+2), y no ha de ser as¨ª. Los partes meteorol¨®gicos prev¨¦n que hoy llover¨¢, pero despu¨¦s de que el torneo se despida. Ayer casi ni sopl¨® ese viento del que ¨¦l recelaba. Jugando al golf, eso s¨ª, es otra cosa. Tanto, que estuvo a punto de agotar el viernes los adjetivos elogiosos de los periodistas isle?os cuando estableci¨® el r¨¦cord del recorrido en 63 (-7). El menos original le llam¨® "Superman". El que m¨¢s, "Faldorain [por Indurain]".En cualquier caso, Faldo no es un prototipo de la naturaleza como el ciclista espa?ol. Tambi¨¦n tiene unas condiciones innatas, pero, salvando las distancias entre un deporte y otro, no son equiparables a las de Miguel. Por eso su trabajo debe ser a¨²n m¨¢s concienzudo. Con el zimbabuense Price, su seguidor en las apuestas previas, no s¨®lo comparte, por se?alar, el nombre: Nick. David Leadbetter, el entrenador de entrenadores, el gur¨², se cuida de ambos. El matiz estriba en que Faldo le exige una dedicaci¨®n intensiva (ayer volvi¨® a pedirle sus selectos consejos durante las pr¨¢cticas) y Price s¨®lo le requiere a ratos. "Es que Faldo es muy anal¨ªtico", explica Price; "siempre quiere llegar al fondo de la cuesti¨®n". Ese es su poder.
Competencia terrible
Ocurre, no obstante, que la competencia es terrible. Faldo desea ganar por m¨²ltiples razones y tiene muchas bazas para hacerlo, pero los dem¨¢s se han conjurado frente a ¨¦l, ya que es el rival a batir. Esta vez iba emparejado con Langer. Ah¨ª es nada. Su marcador directo encarna la rebeld¨ªa contra las debilidades f¨ªsicas. Por a?adidura, el alem¨¢n se mueve con una aparente frialdad como el depredador que se dispone a cobrar su pieza m¨¢s ansiada. Se ha anotado en dos ocasiones el Masters de Augusta (1985 y 1993), pero todav¨ªa no ha logrado vencer en la muestra europea del Grand Slam, el Open. Los aficionados eran conscientes de que el duelo ser¨ªa espectacular y se volcaron tras las cuerdas de las calles para ser sus testigos directos.Sin embargo, el desaf¨ªo no era exclusivo de Faldo y Langer. Por delante, presion¨¢ndoles, caminaban otros cualificados opositores a la brillante c¨¢tedra de Sandwich. No fue de extra?ar, por concretar, que Faldo, con un birdie (-1) por un bogey (+1), no anduviese tan acertado con el putter como acostumbra y evidenciara su condici¨®n humana. El que s¨ª lo estuvo fue Pavin. El estadounidense (tres por uno) desbanc¨® a Langer y se coloc¨® a la altura de Faldo.
El australiano Norman (dos por uno) se: qued¨®, junto a Langer (tres por tres y un doble bogey), a un golpe de aqu¨¦llos, lo que, por parad¨®jico que parezca, puede haberle beneficiado: no compartir¨¢ hoy la andadura con Faldo, que le causa terror y en 1990, en Saint Andrews, le destroz¨®: 67 por 76. A tres se situaron Price (cinco por dos) y Senior, otro australiano, y a cuatro el norteamericano Couples, el surafricano Els y el igualmente australiano Grady, que firm¨® la tarjeta del d¨ªa: 64.
Mientras tanto, Rivero deshizo su igualada con Ballesteros. Le gustan estos links. En ellos estuvo en 1985, cuando concluy¨®, el tercero, en un tris de potenciar su carrera golfistica al llegar a ser el l¨ªder. Recordando su actuaci¨®n de entonces, con una actitud "firme", se aup¨® con 67 gracias a sus cuatro birdies por un bogey. Duod¨¦cimo, con 208, su idea es acabar entre los 15 primeros, lo que le asegurar¨ªa su presencia en Turnberry en 1994. A Ballesteros, en cambio, no le satisfizo demasiado su juego de ayer "por culpa de los drives", pero su resultado fue mucho mejor que el del viernes: 69 (dos por uno). As¨ª, con 210, puede aspirar a unos lugares dignos que, unidos a sus espl¨¦ndidas sensaciones del jueves, reforzar¨ªan su estado an¨ªmico.
CLASIFICACI?N: 1?. Faldo (Inglaterra) (69, 63 y 70) y Pavin (EE UU) (68, 66 y 68), 202 golpes. 3?. Langer (Alemania) (67, 66 y 70) y Norman (Australia) (66, 68 y 69), 203. 5?. Price (Zimbabue) (68, 70 y 67) y Senior (Aus.) (66, 69 y 70), 205. 7?. Couples (EE UU) (68, 66 y 72), Grady (Aus.) (74, 68 y 64) y Els (Sur¨¢frica) (68, 69 y 69), 206. 10?. Zoeller (EE U U) y Daly (EE U U), 207.12?. Rivero (68, 73 y 67) y Morgan (EE UU), 208. 14?. Floyd (EE UU), Simpson (EE UU), Baker-Finch (Aus.), MeNulty (Zim.), Lane (Ing.), Clark (ing.), O'Connor (Irlanda), Twitty (EE UU), Lawrie (Escocia) y Clarke (Irl. del N.), 209. 24?. Ballesteros (68, 73 y 69), Mize (EE UU), Calcavecchia (EE UU), Kite (EE UU), Parnevik (Suecia) y Pyman (Ing.), 210. 42?. Pi?ero, 213. 62? Jim¨¦nez, 215.
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