Cautivos en el mar

El Herm Schepers parti¨® el 3 de agosto del puerto de Duala, en Camer¨²n, uno de los destinos m¨¢s frecuentados por los buques negreros que cargaban esclavos hace un siglo. El cargamento fue en esta ocasi¨®n madera con destino al puerto valenciano de Sagunto. En la bodega se escond¨ªan tambi¨¦n seis polizones africano: un camerun¨¦s, un liberiano, un keniata y tres zaire?os. Los viajeros clandestinos, que fueron hacinados en un pa?ol del buque para que no escapasen a territorio espa?ol, fueron dados por desaparecidos en Gibraltar, donde el barco hizo una escala t¨¦cnica el pasado 27 de agosto.

El capit¨¢n, Klaus Lench, neg¨® entonces que llevara los polizones a bordo. Tampoco permiti¨® a nadie subir a comprobarlo. El sindicato gibraltare?o Transport and General Workers (TGWU) denunci¨® la desaparici¨®n de los africanos.

Los polizones se encuentran, sin embargo, sanos y salvos. El pasado jueves fueron vistos en Rotterdam (Holanda), donde el barco carg¨® semillas de soja.

Un d¨ªa despu¨¦s puso rumbo a Oporto (Portugal) a cuyo puerto llegar¨¢ ma?ana lunes, con los seis africanos a bordo. En la actualidad surca, por segunda vez, aguas espa?olas con los polizones en la bodega del barco.

La primera vez que el Herm Schepers visit¨® las aguas espa?olas con los polizones, el barco no iba de paso. Se dirig¨ªa al puerto de Sagunto para descargar la madera recogida en Camer¨²n.

Fuentes de la Embajada de Espa?a en ese pa¨ªs africano aseguran que el mercante alem¨¢n es bastante conocido en el puerto de Duala. "Suele cargar en Camer¨²n una vez cada dos meses", afirman.

Trabajo y encierro

Durante los 19 d¨ªas que dur¨® la traves¨ªa hasta Sagunto, en su primer periplo por aguas espa?olas, los pasajeros clandestinos trabajaron de d¨ªa y fueron encerrados de noche. A cambio, seg¨²n declar¨® el capit¨¢n, recibieron alimentos. "En su pa¨ªs no comen, nosotros les hemos dado comida", coment¨®. Al llegar al puerto del levante espa?ol, los polizones ya no sal¨ªan ni de d¨ªa. Tampoco recibieron mucha comida. Al menos ¨¦se fue el testimonio de los trabajadores del puerto valenciano.Los estibadores del puerto de Sagunto fueron los primeros en ver unos manos humanas, que se columpiaban entre las rejillas de un pa?ol del Herm Schepers en petici¨®n de ayuda. "Estaban deshidratados", dijeron. Los trabajadores no dudaron en alimentarles, darles de beber y llamar a la Cruz Roja para intentar buscar una soluci¨®n a su encierro.

Quien s¨ª albergaba dudas fue el delegado del Gobierno en Valencia, Francisco Granados. Representantes de UGT, despu¨¦s de reunirse con Granados el 25 de agosto, afirmaban satisfechos: "Esperamos que el delegado del Gobierno apruebe el informe para llevarlos al Centro de Inmigraci¨®n para poder repatriarlos".

No fue as¨ª. A los pasajeros ilegales se les permiti¨® tomar el aire antes de ser encerrados de nuevo. El representante de UGT afirm¨®, visiblemente irritado: "El delegado del Gobierno nos ha enga?ado". Granados no quiso hacer despu¨¦s ning¨²n tipo de declaraciones sobre el particular.

El regreso a ?frica era, con toda probabilidad, el ¨²nico destino posible para los seis polizones. Ninguno de ellos llevaba documentaci¨®n y su entrada en Espa?a hubiese sido ilegal. Con estos antecendentes hubiese sido pr¨¢cticamente imposible comprobar si los africanos sufr¨ªan persecuci¨®n por sus ideas pol¨ªticas.

Juan Jos¨¦ Rodr¨ªguez Ugarte, secretario general de la Comisi¨®n Espa?ola de Ayuda al Refugiado, denunci¨®, en un comunicado difundido el pasado 31 de agosto, la forma en la que los polizones hab¨ªan sido tratatados en Espa?a. "El buque llevaba bandera alemana, pero hay una resoluci¨®n de Naciones Unidas que permite actuar en estos casos a las autoridades de las aguas en las que un barco est¨¢ atracado", coment¨®.

El responsable de Extranjer¨ªa de UGT en Valencia, Mohamed Am¨ªn, que visit¨® a los polizones durante su estancia en Sagunto, se?al¨®: "Los hubiesen repatriado, pero al menos con garant¨ªas. Entre los polizones, hab¨ªa un menor". Este dato ha sido confirmado por Rodr¨ªguez Ugarte y por la asistente social de Sagunto, Victoria Belis.

Desde que el 27 de agosto el mercante partiera de Gibraltar, este peri¨®dico ha realizado m¨²ltiples gestiones para localizarlo y conocer la suerte de los seis polizones, que supuestamente hab¨ªan desaparecido.

El c¨®nsul honorario de Alemania en Valencia, Wolfang Buch, que hab¨ªa mantenido una conversaci¨®n con el capit¨¢n del Herm Schepers el 25 de agosto, afirm¨® el pasado mi¨¦rcoles que este ¨²ltimo le hab¨ªa dado "garant¨ªas de repatriar a los polizones a sus pa¨ªses de origen".

De nuevo en Espa?a

Mientras, el barco segu¨ªa sin dar se?ales de vida, pese a que servicios radiof¨®nicos de las costeras de Francia y el norte de Espa?a intentaban, a instancias de este peri¨®dico, contactar con ¨¦l.La primera pista lleg¨® el 2 de septiembre a trav¨¦s de la compa?¨ªa belga MCL, que flet¨® el Herm Schepers. Un portavoz de esta empresa neg¨® rotundamente que el mercante hubiese albergado nunca a los seis viajeros clandestinos. Confirm¨®, sin embargo, que el barco atracar¨ªa anteayer en el puerto holand¨¦s de Dordrecht. Finalmente no fue Dordrecht, sino Rotterdam. Los polizones tampoco hab¨ªan desaparecido. Estaban todav¨ªa a bordo del barco. Las autoridades holandesas, que estuvieron interrongando a los africanos, aseguraron que no pudieron acoger a los polizones porque ¨¦stos "ni siquiera lo solicitaron".