Pol¨¦mica en M¨¦xico sobre la utilidad de aclarar la 'matanza de Tlatelolco'

La creaci¨®n de una Comisi¨®n de la Verdad sobre la sangrienta represi¨®n, el 2 de octubre de 1968, de una manifestaci¨®n estudiantil en la capital mexicana, que pudo haber causado m¨¢s de 300 muertos y que pas¨® a conocerse como la matanza de Tlatelolco, ha levantado una fuerte pol¨¦mica en los sectores pol¨ªticos e intelectuales de M¨¦xico, hoy divididos entre quienes est¨¢n a favor de que se sepa lo que realmente pas¨® y quienes prefieren que contin¨²e el silencio.Entre estos ¨²ltimos acaba de pronunciarse inesperadamente el influyente peri¨®dico El Universal, que, a trav¨¦s de su primer columnista, Francisco C¨¢rdenas, ha advertido que la Comisi¨®n de la Verdad, integrada por 21 prestigiosos intelectuales del pa¨ªs, persigue un Nuremberg mexicano y provocar al Ej¨¦rcito, que, junto a la polic¨ªa, fue el encargado de aplastar aquella protesta estudiantil. "?Para qu¨¦ abrir cicatrices?", se pregunta el peri¨®dico.

Se calcula que entre Tlatelolco y los campamentos militares a los que fueron llevados los estudiantes detenidos murieron m¨¢s de 300 personas. El presidente del pa¨ªs era entonces Gustavo D¨ªaz Ordaz, que asumi¨® la responsabilidad de los hechos un a?o despu¨¦s del, t¨¦rmino de su mandato y nunca ofreci¨® una versi¨®n consecuente de lo sucedido.