Mart¨ªn Pall¨ªn, candidato a defensor del pueblo aceptado por PSOE y PP

El desencuentro entre las dos primeras fuerzas pol¨ªticas en la negociaci¨®n para elegir al defensor del pueblo -comisionado de las Cortes Generales para la defensa de los derechos humanos, incluida la supervisi¨®n de la Administraci¨®n- empieza a dejar paso a un principio de consenso en tomo al magistrado Jos¨¦ Antonio Mart¨ªn Pall¨ªn, tras el rechazo del PP a Juan Mar¨ªa Bandr¨¦s por su militancia. Igual ha ocurrido con la candidata de IU, Cristina Almeida, mientras que el abogado Gonzalo Casado, "aceptable" para el PP, ha sido descartado por el Gobierno.

Por el momento, el candidato con mayores expectativas para ser elegido es el magistrado del Tribunal Supremo Jos¨¦ Antonio Mart¨ªn Pall¨ªn, propuesto por la Federaci¨®n de Asociaciones de Derechos Humanos, que integra a la Asociaci¨®n Pro Derechos Humanos de Espa?a (APDHE), C¨¢ritas, Justicia y Paz, Liga de los Derechos Humanos, Paz y Cooperaci¨®n e Instituto Espa?ol para el Desarrollo en Am¨¦rica Latina. Mart¨ªn Pall¨ªn, fiscal de profesi¨®n, fue miembro de Justicia Democr¨¢tica, presidi¨® la APDHE y ofrece una inequ¨ªvoca "trayectoria de compromiso c¨ªvico", recuerdan sus proponentes.La candidatura de Mart¨ªn Pall¨ªn, entregada a todos los grupos parlamentarios, ha sido considerada por el portavoz del PP, Rodrigo Rato, "no descartable", actitud compartida desde el Gobierno. Por su parte, fuentes del Grupo Parlamentario Socialista se han mostrado impresionadas por las adhesiones a Mart¨ªn Pall¨ªn desde numerosas organizaciones humanitarias tanto confesionales como laicas. La idoneidad del candidato, su independencia y la procedencia no partidaria de su candidatura "le acreditan como una excelente opci¨®n", seg¨²n las organizaciones humanitarias que le proponen.

En cambio, fuentes pr¨®ximas al ministro de la Presidencia, Alfredo P¨¦rez Rubalcaba, descartaron ayer tajantemente la candidatura del abogado Gonzalo Casado, considerada como "aceptable" por el PP. Igualmente, desde el Ministerio de Justicia, que dirige Juan Alberto Belloch, estimaron improbable tal elecci¨®n. Casado, vocal y portavoz del Consejo General del Poder Judicial de 1980 a 1985, ha sido directivo del Colegio de Abogados

abogado de los polic¨ªas Jos¨¦ Amedo y Michel Dom¨ªnguez, condenados en el proceso contra los Grupos Antiterroristas de Liberaci¨®n (GAL).

Candidatos 'tapados'

El Gobierno cuenta al menos con otros dos candidatos todav¨ªa no hechos p¨²blicos. Ambos pertenecieron al Tribunal Constitucional y son catedr¨¢ticos: Jes¨²s Leguina, de Derecho Administrativo, y Gloria Begu¨¦, de Hacienda P¨²blica. En caso de que el PSOE proponga a Leguina, no es probable que el PP le apoye, mientras que Begu¨¦, aceptable para el PP, s¨®lo la propondr¨¢ el PSOE como ¨²ltima soluci¨®n.

En todo caso, la elecci¨®n de nuevo Defensor del Pueblo -cargo en situaci¨®n de interinidad desde marzo de 1992- es considerada en medios pol¨ªticos y jur¨ªdicos como la prueba de fuego sobre la autenticidad del impulso democr¨¢tico propiciado por el PSOE y la renovaci¨®n de la vida pol¨ªtica defendida por el PP.

La candidatura socialista de Bandr¨¦s, actual eurodiputado integrado en el Grupo Verde y personaje clave en la fusi¨®n de Euskadiko Ezkerra con el PSOE, fue considerada como una apuesta arriesgada del poder, ya que su trayectoria aseguraba una supervisi¨®n muy exigente de la Administraci¨®n socialista en materia de derechos humanos.

Sin embargo, cuando la candidatura de Bandr¨¦s todav¨ªa no hab¨ªa sido digerida por algunos sectores del PSOE y de la Administraci¨®n, la portavoz adjunta del PP en el Congreso, Loyola de Palacio, rechaz¨® a Bandr¨¦s, no por falta de aptitud para el cargo, sino por su "militancia declarada, p¨²blica y notoria". El presidente del PP en el Pa¨ªs Vasco, Jaime Mayor Oreja, reconoci¨® la "val¨ªa?' de Bandr¨¦s y diputados democristianos manifestaron en privado que dar¨ªan su voto a Bandr¨¦s. Sin embargo, no es probable que el PSOE -que necesita al menos varios votos del PP- mantenga su candidato inicial y se arriesgue a provocar la ruptura de la disciplina de voto del PP y acaso en su propio grupo.

Tanto Bandr¨¦s como cualquier otro candidato propuesto por el PSOE y no aceptado por el PP, a¨²n contando con los votos del resto del Congreso de los Diputados, s¨®lo podr¨ªa obtener un m¨¢ximo de 209 votos, cuando el m¨ªnimo exigido es de 210. Con la misma dificultad contar¨ªa cualquier candidato partidario. De ah¨ª que, por el momento, el mayor consenso entre PSOE y PP es la aceptaci¨®n mutua de la candidatura de Mart¨ªn Pall¨ªn.