"En cine me gusta todo lo que se mueve"
Guillermo Cabrera Infante re¨²ne todas sus cr¨ªticas de pel¨ªculas finnadas por G. Ca¨ªn
El escritor Guillermo Cabrera Infante, de 64 a?os, volvi¨® ayer a encontrarse con su alter ego G. Ca¨ªn en la presentaci¨®n del libro Un oficio del siglo XX, nueva edici¨®n completa de sus cr¨ªticas de cine publicadas en Cuba en los af¨ªos cincuenta. "En cine me gusta todo lo que se mueve; lo que se mueve es disparable" fue una definici¨®n de su pasi¨®n por el cine, desde las primeras salas de La Habana a la pantalla de televisi¨®n.
En la presentaci¨®n del libro Un Oficio del siglo XX (EL PA?S-Aguilar, con la colaboraci¨®n de Canal +), celebrada en Madrid, el periodista ?ngel S¨¢nchez Harguindey relat¨® que la madre de Cabrera Infante dec¨ªa que su hijo hab¨ªa visto la primera pel¨ªcula a los 29 d¨ªas de edad, pero el autor de Tres tristes tigres y Mea Cuba reconoci¨® ayer que la primera pel¨ªcula extraordinaria que recuerda entre los westerns es Cara cortada, que vio a los seis a?os. Ahora prepara una monograf¨ªa sobre R¨ªo Bravo.
El cine y los comics fueron los alimentos de su infancia. La m¨²sica, "de Mozart a Cachao", tambi¨¦n fue destacada por S¨¢nchez Harguindey, que sigui¨® la trayectoria del escritor "de oscuridad en oscuridad, de las salas a los reg¨ªmenes pol¨ªticos". Se?al¨® el talento y la sensibilidad de las cr¨ªticas, en donde conviven aciertos y errores, entre estos ¨²ltimos su posici¨®n inicial frente a la pel¨ªcula Casablanca.
El actor norteamericano de origen cubano Andy Garc¨ªa, de 37 a?os, particip¨® tambi¨¦n en la presentaci¨®n como amigo de Cabrera Infante, guionista del documental Cachao: como su ritmo no hay dos, dirigido por el actor. A Andy Garc¨ªa le interesa de G. Ca¨ªn su fanatismo de los ambientes habaneros de los a?os cincuenta, por los que ha podido conocer "la historia del vivir en La Habana", cuyos relatos ve como posibles pel¨ªculas.
El cr¨ªtico G. Ca¨ªn muri¨® en 1960. Un juicio por obscenidad, al publicar un cuento "en ingl¨¦s fon¨¦tico", que le impidi¨® aparecer con su nombre en la prensa cubana, fue el origen del seud¨®nimo de G. Ca¨ªn (a partir de su propio nombre y apellidos) con que firm¨® las cr¨ªticas de cine en el semanario Carteles. El libro es una reedici¨®n del publicado en Cuba y por Seix Barral, con la incorporaci¨®n de dos textos que por su humor irreverente no se atrevieron a meter en la primera versi¨®n, una biograf¨ªa de G. Ca¨ªn y un juego entre los dos.
"El cine fue mi gran formaci¨®n, junto con los comics y la radio en los a?os treinta. Sin el cine ser¨ªa una persona incompleta. Ahora veo cinco veces m¨¢s pel¨ªculas que lecturas, aunque la pel¨ªcula es otra forma de escritura y m¨¢s divertida". Cabrera Infante acude a todos los ¨¢ngulos del cine. "El t¨ªtulo del libro-tiene un tono ir¨®nico porque antes del siglo XX no exist¨ªa la cr¨ªtica. La cr¨ªtica es otro g¨¦nero literario. Ante una pel¨ªcula se puede decir: me gusta, no me gusta o me es indiferente; lo dem¨¢s es literatura. El cr¨ªtico no tiene ninguna influencia, ni en el p¨²blico ni en los actores. Una cr¨ªtica no ha cambiado el curso del cine, desviado por pel¨ªculas extraordinarias".
Tuvo elogios para el desaparecido cr¨ªtico Jos¨¦ Luis Guarner; coment¨® la extraordinaria influencia de la televisi¨®n en el cine; hizo una defensa de Parque Jur¨¢sico, "por sus momentos de poes¨ªa por medios de animaci¨®n, como el canto a medianoche de los dinosaurios", y mostr¨® su entusiasmo por Belle Epoque de Trueba ("con juegos dignos de Wilder y Lubitsch") Jam¨®n, jam¨®n, de Bigas Luna ("heredero directo de Bu?uel") y Mujeres... , de Almod¨®var.
Entre los comentarios, imit¨® a Bogart en algunas de sus pel¨ªculas, como un ensayo de sus posibilidades de actor ya solicitado. Sobre Cuba, dijo que el futuro pol¨ªtico va a ser muy indeciso (la castroenteritis es una enfermedad muy seria)", aunque no duda de que Castro va a caer. Andy Garc¨ªa se?al¨® que "tras este tr¨¢gico periodo" espera que venga "una etapa dedicada a la democracia, humanidad y cultura". Cuando habla de Cuba y de su carrera, el actor no admite frivolidades sobre su f¨ªsico. "El ¨²nico sex symbol soy yo", dijo Cabrera Infante, antes G. Ca¨ªn.
Babelia
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