Hallado un anciano atado a una silla y con la cara rota a golpes

Los vecinos oyeron gritos pidiendo auxilio. Avisaron a la polic¨ªa y ¨¦sta se encontr¨® a Manuel Moa Fern¨¢ndez, el se?or Moa, de 85 a?os, atado con cables a una silla y con el rostro lleno de golpes y ensangrentado. El anciano fue ingresado en estado grave en el hospital Gregorio Mara?¨®n, donde contin¨²a internado. Se le apreciaron politraumatismos faciales. El asalto ocurri¨® hacia las 10.30 horas de ayer en su domicilio, una casa antigua, en el n¨²mero 10 de la calle de San Jos¨¦, en Centro.Algunos vecinos de este edificio, construido en 1885, y cercano a la zona de Huertas, mantienen sus propias hip¨®tesis sobre el m¨®vil de la agresi¨®n. Cifran sus sospechas en una valiosa vajilla que, seg¨²n ellos, el anciano anuncia para vender en la revista Segunda Mano."En la tarde del jueves lleg¨® un hombre a su casa y el mismo se?or Moa me cont¨® que vend¨ªa su vajilla y que el visitante estaba interesado en ella", explica una vecina. "Era un hombre de unos cuarenta a?os, medio calvo, ni gordo ni delgado y con buen porte, nada de pinta de chorizo, para m¨ª que volvi¨® a quedar con ¨¦l para fijar la venta al d¨ªa siguiente", a?ade.

Esta misma mujer explica que al oir gritos pidiendo ayuda sali¨® al patio y pregunt¨® a los dem¨¢s vecinos. Al final se dieron cuenta que los lamentos proced¨ªan del piso del anciano. Avisaron a la polic¨ªa. Los bomberos tuvieron que entrar al domicilio por una ventana. "Un chico de la escalera vi¨® salir a un hombre con un paquete grande en la mano", relatan.

La vecindad describe al asaltado como una persona culta y bastante suya. "Vive s¨®lo, porque se qued¨® viudo y no tiene hijos, trabaj¨® como maestro y a veces viene una asistenta municipal a atenderle", comentan. "Todos los d¨ªas va a misa y, para como est¨¢ el barrio, sale mucho" a?aden.

Hace meses fue asaltado en la escalera por un hombre que le amenaz¨® con una jeringuilla. "No es la primera vez, quiz¨¢ es que se empe?a en andar por estas calles a cualquier hora", estiman, indignados por lo sucedido, los residentes de esta casa.