"La Ertzaintza tiene verdaderas ganas de responder a HB"
El nacionalismo democr¨¢tico vasco a¨²n no se ha recuperado del impacto del asesinato de Joseba Goikoetxea. Jos¨¦ Manuel Martiarena, 47 a?os, director de la Ertzaintza, avisa a los terroristas y a sus apoyos que la polic¨ªa vasca y ETA "van a encontrarse cada vez con mayor frecuencia".
Pregunta. ?C¨®mo definir¨ªa el estado an¨ªmico de la Ertzaintza en estos momentos, tras el asesinato de Joseba Goikoetxea?
Respuesta. Por primera vez en su historia, el conjunto de la polic¨ªa vasca siente la necesidad de hablar con voz propia, tiene verdaderas ganas de responder a Herri Batasuna, de desmontarles ese discurso falaz de que la Ertzaintza es un elemento represor del pueblo vasco. Tiene ganas de decirles que velar por la integridad de las personas, de sus libertades y de sus bienes, y perseguir a quienes queman autobuses, amenazan, extorsionan y practican el tiro en la nuca no es ser represor del pueblo vasco, sino, en todo caso, represor de los delincuentes de KAS. ?sta es la reacci¨®n general, aunque es cierto que han aparecido tambi¨¦n respuestas individualizadas, sobre todo de la gente que se siente m¨¢s pr¨®xima a la v¨ªctima.
P. ?No hay inquietud ante la posibilidad de que estos hechos abran una din¨¢mica de enfrentamientos m¨¢s directos y enconados?
R. El atentado ha sido la culminaci¨®n de un proceso de hostigamiento y provocaciones dise?ado y ejecutado por el conjunto KAS-HB y sus medios de comunicaci¨®n. La gente estaba preparada, aunque, ciertamente, esto ha sido un verdadero salto.
P. ?A d¨®nde conduce ese salto?
R. Ellos han pasado de las agresiones al asesinato directo. La evoluci¨®n futura de la situaci¨®n depende sobre todo de ellos. HB puede acabar con esto diciendo p¨²blicamente: "Ya basta".
P. ?Qu¨¦ significado tiene la frase "van a tener una Ertzaintza a su medida", repetida estos d¨ªas por los burukides [dirigentes] de su partido?
R. Significa que cuanto mayor sea su agresi¨®n, mas prioritarios van a ser para la Ertzaintza. Significa que dentro de a?o y medio estaremos desplegados en las tres capitales y que no va a quedarles un rinc¨®n libre de la presencia de la polic¨ªa vasca. Que la Ertzaintza y ETA van a encontrarse cada vez con mayor frecuencia.
P. ?Qu¨¦ ha llevado a ETA a dar ese paso?
R. En sus an¨¢lisis, KAS llega a la conclusi¨®n de que la Ertzaintza va a ser el elemento policial m¨¢s importante en la lucha contra ETA, nos consideran sus inmediatos enemigos. El atentado pretende llevar el terror y provocar contradicciones, pero, a su vez, ellos se han colocado en una situaci¨®n dificil, porque s¨®lo les deja la alternativa de la marcha atr¨¢s o la huida hacia adelante. Y claro, cuanto m¨¢s adelante vayan, m¨¢s les costar¨¢ luego dar marcha atr¨¢s.
P. ?Por qu¨¦ tanta sorpresa por el atentado, si hab¨ªa en marcha una campa?a y unos an¨¢lisis de KAS en esa misma l¨ªnea?
R. La primera vez siempre produce una gran sorpresa. Hasta ahora no se hab¨ªan atrevido a ir contra un elemento formado en la propia Ertzaintza y sus propios documentos dec¨ªan que antes de entrar ah¨ª hab¨ªa que hacer un trabajo previo. Ahora han considerado que ese trabajo previo estaba hecho y se han lanzado adelante. Despu¨¦s de atentar una vez hay que pensar que la segunda vez les resultar¨¢ m¨¢s f¨¢cil.
P. ?Cree que ETA se siente fuerte en estos momentos?.
R. Est¨¢n perdiendo posiciones en todos los terrenos, aunque, gracias al apoyo de Herri Batasuna, no a la velocidad que todos quisi¨¦ramos. Ya se sabe que los ¨²ltimos coletazos son los m¨¢s duros. Yo soy optimista.
P. A lo largo del ¨²ltimo a?o y medio se han depositado muchas esperanzas en la denominada v¨ªa Azkoiti, un posible di¨¢logo a trav¨¦s del hist¨®rico dirigente etarra Jos¨¦ Luis Arrieta Zubimendi. En el debate interno en ETA y HB se ha dicho, incluso, que hay una ejecutiva de consenso en la organizaci¨®n terrorista. ?No se han sobrevalorado mucho esas discrepacias internas? ?No se ha vivido un espejismo?
R. Est¨¢ claro que existen dos sectores, pero, de la misma manera, est¨¢ tambi¨¦n muy claro que el miedo atenaza los comportamientos y que los cr¨ªticos son muy tibios y, desde luego, s¨®lo expresan sus reticencias por los conductos internos. Lo cierto es que la realidad de sus supuestas voluntades est¨¢ absolutamente por demostrar.
P. ?Se puede dar por agotada la v¨ªa Azkoiti?
R. Creo que no hay que descartar nada, ni tampoco devaluar excesivamente las expectativas. La potencialidad de la v¨ªa de Azkoiti habr¨¢ que verla en el momento en que hagan un debate abierto ante la sociedad. Mientras tanto, no ser¨¢n m¨¢s que meras posibilidades. No, la v¨ªa Azkoiti no est¨¢ liquidada, pero s¨ª en v¨ªa muerta. A nosotros nos llaman alcaldes de HB pidiendo que intervengamos en sus municipios por asuntos de drogas y cosas as¨ª, pero ninguno de ellos se atreve a hacer p¨²blica esa solicitud. Ellos mismos son los principales rehenes del miedo.
P. Si hay tantos rehenes del miedo, ?qui¨¦nes administran el miedo en ese mundo?
R. El miedo se llama KAS, fundamentalmente. KAS ha pasado a controlar todo el conjunto de las organizaciones pol¨ªticas, sindicales y de informaci¨®n y propaganda. Adem¨¢s de marcar la estrategia a seguir, se reserva la aplicaci¨®n de la justicia interna y la posibilidad de intervenir sobre las haciendas y vidas de quienes componen KAS. La opini¨®n p¨²blica ignora estas cosas por el oscurantismo y el miedo que impera en ese mundo, pero, mire usted, de KAS s¨®lo se puede salir con permiso de KAS.
P. ?Ha dicho usted justicia interna e intervenci¨®n sobre las haciendas y las vidas?
R. S¨ª, eso he dicho. Digo tambi¨¦n que nadie de ese mundo puede expresar sus opiniones sin pasar por los comisarios pol¨ªticos impuestos por KAS y que las consecuencias de incumplir esas instrucciones pueden ser nefastas para las haciendas y las vidas. Son comportamientos y estructuras similares a las de la Mafia, que tienen una parte de actividad legal y otra ilegal. Conocen bien las leyes y saben utilizarlas a su favor. Ah¨ª tiene usted a Egin, que es una bomba diaria contra la democracia.
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