"Presumo de mujer, torera y madrile?a"
Cristina S¨¢nchez es la excepci¨®n que por el momento confirma la regla en el supermachista mundo taurino. Ella ya ha logrado, a sus 20 a?os, hacerse respetar por los hombres que la rodean. Tanto en los ruedos, donde algunos compa?eros le reh¨²yen por si les pega un repaso -lo que ya ha ocurrido con algunos-, como en los despachos, por medio de su apoderado, el franc¨¦s Andr¨¦ Viard. Tambi¨¦n cuenta con su padre, el banderillero Antonio S¨¢nchez, que adem¨¢s de ser su pe¨®n de confianza frente a los novillos se convierte casi en su sombra el resto del tiempo en los d¨ªas en que act¨²an. La torera, formada en la Escuela Taurina de Madrid, acaba de regresar de Cartagena de Indias, donde su habitual mal uso de la espada le ha impedido conquistar tambi¨¦n las Am¨¦ricas taurinas de la misma forma que ya lo ha hecho en Espa?a el pasado a?o. Esta torera, que vive en Parla desde escasos meses despu¨¦s de nacer en la capital, actu¨® con ¨¦xito en 40 novilladas con picadores en 1993, varias de ellas en plazas de la categor¨ªa de Zaragoza, Logro?o y Toledo, donde pas¨® a la historia por ser la primera mujer que lidia en solitario seis novillos.Pregunta. ?C¨®mo va el enfado tras el fracaso de Cartagena de Indias?
Respuesta. Lo llevo fatal, porque tengo mucho amor propio y a pesar de que el estoque y el verduguillo no son mi especialidad, tampoco suelo pegar estos m¨ªtines. Aunque por lo que m¨¢s me duele es por las eternas voces de los que no creen en las mujeres toreras, que lo aprovechar¨¢n para sus falsos argumentos.
P. Pero usted ya les ha dado argumentos contrarios con su racha de triunfos en 1993, ?no?
R. Desde luego, por eso me molesta tanto. Fue cuesti¨®n de mala suerte, como de hecho tambi¨¦n les ocurre a los novilleros. En cualquier caso, es simplemente una batalla perdida en una guerra que estoy ganando festejo a festejo y de la que presumo much¨ªsimo.
P. ?De qu¨¦ presume m¨¢s, de su profesi¨®n o de mujer?
R. De ambas cosas a la vez, ya que en mi caso es lo que llama la atenci¨®n y no se pueden separar. Tambi¨¦n de madrile?a, porque precisamente en esta profesi¨®n es muy importante nacer en una comunidad tradicionalmente taurina, y con una afici¨®n nada regionalista y sin prejuicios. Juzga a todo el mundo por lo que realiza delante del toro y no por su sexo o lugar de nacimiento.
P. ?Nunca se han metido con su condici¨®n de mujer y torera los p¨²blicos madrile?os?
R. La verdades que mucho menos que en otros lugares, aunque he de reconocer que en todas partes ya se van acostumbrando y cada vez escucho menos tonter¨ªas semejantes.
P. ?Cu¨¢l ha sido la m¨¢s dura y ofensiva?
R. Hay una que es com¨²n, aquella de: "Las mujeres, a fregar, o a la cocina". Me rebelo tanto que si no fuera por el respeto subir¨ªa a que me lo soltaran en la cara. No obstante, mi venganza es triunfar cortando las orejas para acallarlos.
P. Vamos a cambiar el tercio, y nunca mejor dicho, ?c¨®mo se puede presumir de una ciudad con tantos problemas como Madrid?
R. S¨ª, es cierto, pero esta cruz tambi¨¦n tiene su cara: las enormes
posibilidades formativas, culturales y de espect¨¢culos que te ofrece. No obstante, y por desgracia, la cruz va creciendo d¨ªa a d¨ªa, sobre todo en aspectos como la droga, la pobreza, la inseguridad y la insolidaridad.
P. Por cierto, ?para cu¨¢ndo su presentaci¨®n en Las Ventas?
R. ?Uff!, es un trago, pero estoy preparada de sobra para cuando me lo pidan.
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