El viento frustra el primer asalto de Moser al r¨¦cord de la hora
Francesco Moser, de 42 a?os, se qued¨® ayer a un suspiro de la revoluci¨®n. Los 51,840 kil¨®metros que alcanz¨® en el vel¨®dromo ol¨ªmpico de M¨¦xico se situaron a 430 metros del r¨¦cord de la hora, en poder del ingl¨¦s Christopher Boardman, con 52,270 kil¨®metros, desde julio de 1993. Los innegables avances aerodin¨¢micos de la postura "de huevo", que compensaron la merma de potencia y resistencia del veterano corredor, no pudieron con el principal enemigo de los ciclistas, el viento. Aun as¨ª, Moser, que probar¨¢ de nuevo el martes, consigui¨® la segunda mejor marca de la historia. Su actuaci¨®n, 10 a?os despu¨¦s de su plusmarca de 51,151 kil¨®metros, es un punto de referencia en un objetivo al que, sin prisa, aspira Miguel Indur¨¢in.
El registro del viejo Moser -cuando estableci¨® el r¨¦cord en 1984 ya fue el m¨¢s veterano en hacerlo- deja a Graeme Obree en el papel de Dick Fosbury. El escoc¨¦s se sac¨® de la manga una postura nunca utilizada, conocida como "de huevo", sobre una bicicleta estramb¨®tica. El saltador de altura estadounidense comenz¨® a brincar de espaldas y revolucion¨® su especialidad. Ambos fueron poco despu¨¦s superados por mejores atletas que se valieron de su t¨¦cnica.El gesto de Obree abri¨® una puerta que ayer franque¨® uno de los mejores rodadores de la historia, retirado hace cinco a?os, pero cuyo valor se vio refrendado. Un ciclista en su decadencia biol¨®gica hizo, aprovechando la t¨¦cnica de Obree, una marca superior a la lograda en su plenitud diez a?os atr¨¢s. Y no logr¨® la marca absoluta por culpa del viento.
"Estoy muy satisfecho", dijo Moser, "porque he demostrado que no iba de farol. Al mismo tiempo, estoy enfadado porque creo que pod¨ªa haber superado lo alcanzado por Boardman. En los primeros 20 minutos, todo fue perfecto, pero comenz¨® a levantarse la ventolera y, poco a poco, me fui dando cuenta de que no cubr¨ªa mis objetivos. Adem¨¢s, soplaba en rachas, lo que me supuso inseguridad en las curvas. No pod¨ªa prever por d¨®nde soplar¨ªa en cada vuelta".
La aerodin¨¢mica
El secreto de la posici¨®n Obree est¨¢ en la aerodin¨¢mica. Cuando rueda, un ciclista no tendr¨ªa que hacer ning¨²n esfuerzo para seguir pedaleando si no fuera por la oposici¨®n del viento. Cualquier avance en el coeficiente de penetraci¨®n se traduce directamente en velocidad. La otra resistencia al avance, el rozamiento con la pista, es inapreciable -Moser cubri¨® el cemento del vel¨®dromo de M¨¦xico con una resina especial- .Adem¨¢s, la t¨¦cnica del escoc¨¦s permite utilizar mayores desarrollos -Moser us¨® un 63 x 15, 8,69 metros por pedalada, frente al 57x 15, 8,24, de 1984- sin necesidad de tener m¨¢s potencia y sin romper el ritmo. "Todo se resume en la geometr¨ªa, la de la bicicleta y la del ciclista", dice Francesco Conconi, el m¨¦dico de Moser en sus dos intentos, el de 1984 y el de ayer. "Hace 10 a?os, nuestro enfoque fue revolucionario en cuanto a la concepci¨®n cient¨ªfica: la preparaci¨®n, los estudios de resistencia y de potencia, la alimentaci¨®n... Ahora, con la posibilidad que han abierto los nuevos materiales, se puede cambiar la geometr¨ªa de la bicicleta y dar un nuevo impulso al r¨¦cord".En esta racha ya se han integrado Miguel Indur¨¢in, que probar¨¢ a batir el r¨¦cord en septiembre, y el suizo Alex Z¨¹lle, el l¨ªder del ONCE. El director del Banesto, Jos¨¦ Miguel Ech¨¢varri, presenci¨® ayer en M¨¦xico la tentativa de Moser y declar¨®: "No tenemos prisa. El r¨¦cord espera a Indur¨¢in".
Al final de la temporada se sabr¨¢ ya el valor de la plusmarca y si puede seguir siendo considerada un term¨®metro de la evoluci¨®n de este deporte.
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