Banesto reconoci¨® que la ampliaci¨®n buscaba cubrir el d¨¦ficit de recursos propios
La Comisi¨®n Nacional del Mercado de Valores (CNMV) oblig¨® a Banesto a incluir en el folleto informativo de la ampliaci¨®n de capital del pasado a?o que, entre otras cosas, el destino de los fondos conseguidos por dicha ampliaci¨®n se destinar¨ªa a cubrir el d¨¦ficit de recursos Propios que ten¨ªa la entidad. El resto de las cuestiones que se incluyeron en el folleto por indicaci¨®n de la comisi¨®n ten¨ªa como objetivo explicar el alcance del plan de saneamiento aprobado por el banco con el visto bueno del Banco de Espa?a.
Banesto present¨® en los primeros meses de 1993 ante la CNMV un borrador de folleto informativo para que se aprobara la ampliaci¨®n de capital preparada por Banesto con J. P. Morgan. La ampliaci¨®n persegu¨ªa conseguir 140.000 millones de pesetas de nuevos recursos propios mediante dos tramos de emisi¨®n de acciones, y un tercero de bonos convertibles a medio plazo. El borrador incorporaba, por la fecha en que se empez¨® a preparar, la auditor¨ªa independiente de 1992 realizada por Price Waterhouse.Los expertos de la Comisi¨®n consideraron que la informaci¨®n presentada en el borrador de folleto era insuficiente y obligaron a introducir modificaciones, todas ellas encaminadas a proporcionar datos adicionales que perm¨ªtir¨ªan una decisi¨®n m¨¢s fundada a los potenciales inversores de Banesto.
La primera exigencia fue declarar taxativamente cu¨¢l era el destino de los nuevos recursos captados por la entidad, ya que en alg¨²n momento se se?alaba que se destinar¨ªan a consolidar la presencia internacional de Banesto y a facilitar la expansi¨®n en Espa?a. En el folleto final se se?ala que el destino de la ampliaci¨®n de capital en sus tres tramos es cubrir el d¨¦ficit negativo de recursos propios que tiene Banesto y que, por lo menos, se cifraba en 140.000 millones de pesetas. ?sta era la cifra m¨¢xima de dinero que se buscaba con la nueva ampliaci¨®n.
Para dar una imagen m¨¢s inmediata de la situaci¨®n real de Banesto -la auditor¨ªa de Price certificaba las cuentas del ejercicio de 1992- la Comisi¨®n exige que Banesto declare sus resultados al t¨¦rmino del primer trimestre de 1993, en los que se recogen ya unas p¨¦rdidas de 8.000 millones de pesetas como consecuencia del plan de saneamiento dise?ado con el acuerdo del Banco de Espa?a y que contemplaba que todos los recursos generados en 1993 y previsiblemente en 1994 se destinar¨ªan a provisiones para insolvencias.
En este mismo sentido, y dado que la auditor¨ªa de Price explicaba muy gen¨¦ricamente en una nota que exist¨ªa un plan de actuaciones en materia de provisiones que abarcaba varios a?os y que contaba con el respaldo del Banco de Espa?a, la CNMV obliga a detallar algo m¨¢s estos acuerdos. Por eso, en el folleto se se?ala que, como consecuencia de la inspecci¨®n del Banco de Espa?a, Banesto reclasific¨® cr¨¦ditos como morosos por valor de 52.000 millones de pesetas "a pesar de que el 85% de los mismos no hab¨ªan vencido" y que hab¨ªa un plazo hasta diciembre de 1994 para aflorar todos los morosos existentes y constituir el fondo de provisiones para insolvencias exigido por la normativa.
Las plusval¨ªas generadas por la venta de activos formaban parte de las obligaciones contra¨ªdas para completar el fondo de insolvencias. Por ello se exigi¨® que se concretara cu¨¢l era la plusval¨ªa obentida en la venta del Banco de Madrid y, en folleto, apareci¨® la cifra de 17.400 millones de pesetas.
As¨ª mismo, se dice que los resultados extraordinarios han sido una parte muy importante de los resultados globales obtenidos en a?os anteriores y que van a seguir teniendo importancia en los pr¨®ximos a?os ya que Banesto se ha comprometido a enajenar su cartera de valores, no s¨®lo por imperativo legal, al superar el grado de concentraci¨®n de riesgo, sino tambi¨¦n para generar recursos con los que hacer provisiones.
La cartera de valores de Banesto constitu¨ªa una de las principales preocupaciones tanto del Banco de Espa?a como de la Comisi¨®n de Valores por entender que su rendimiento medio era muy inferior al rendimiento medio global de los activos del banco y por ello se introduce en el folleto, a petici¨®n de la CNMV, que "el coste medio de mantenimiento de la cartera de valores es al menos del 10% sobre el saldo en libros de la misma". El valor en libros era entonces de 250.000 millones de pesetas, lo que representaba un coste, anual de 25.000 millones de pesetas.
Las contradictorias informaciones sobre la participaci¨®n de Banesto en el banco portugu¨¦s Totta & Agores (en algunas zonas del banco se afirmaba que hab¨ªa una participaci¨®n mayor a la declarada oficialmente) exigieron una mayor clarificaci¨®n.
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