Los hermanos Pederneiras traen a Madrid la vanguardia de la danza brasile?a
El realismo m¨¢gico, y los ritmos calientes llegan con la compa?ia Corpo
Sobre las delicadas zapatillas de ballet, los siete hermanos Pederneiras mezclan el realismo m¨¢gico y los ritmos calientes de su tierra, Brasil. Los hermanos -cinco hombres y dos mujeres- forman, junto con 11 bailarines, la compa?¨ªa Corpo, que empez¨® en 1975 a forjar una leyenda que recorre Brasil y Am¨¦rica Latina. De ni?os, los Perdeneiras recibieron como regalo de sus padres una vieja casa familiar para jugar, y all¨ª comenzaron los primeros pasos de esta peculiar agrupaci¨®n, que desde hoy y hasta el d¨ªa 6 de febrero act¨²a por primera vez en Madrid con dos montajes llenos de calor.
Abundan en Minas Gerais (Brasil) las historias fant¨¢sticas. Algunas de ellas han dado pie a jugosa literatura, y ¨¦ste puede ser el caso de la familia Pederneiras. Con un racimo de hijos inquietos e interesados por el arte, el matrimonio Pederneiras no dud¨® un momento en entregarle a la numerosa prole la vieja casona patrimonial en la colina m¨¢s alta de Belo Horizonte. En ese solar se levant¨® despu¨¦s el primer centro de danza de la regi¨®n.Lo progenitores descubrieron pronto que su inversi¨®n era rentable. En 1976 se estren¨® Mar¨ªa, Mar¨ªa, su primer espect¨¢culo, al que sigui¨® El ¨²ltimo tren, con una m¨²sica de Milton Nascimento que pronto se tarare¨® en todo Brasil. Los temas, sugeridos m¨¢s qu¨¦ contados, eran una tierna rama de ese realismo m¨¢s encantado que m¨¢gico que endulza cualquier an¨¦cdota en Latinoam¨¦rica.
Los hermanos Pederneiras hab¨ªan estudiado las m¨¢s diversas carreras, desde arquitectura hasta teatro, y, naturalmente, danza. Poco a poco, el centro de danza creci¨® de una manera ordenada. Primero, fue una espaciosa sala de ensayos, luego se agreg¨® un peque?o teatro con 200 plazas y por fin una galer¨ªa de arte con salas de exposiciones. Era el sue?o dorado de muchos core¨®grafos en todo el mundo, y hasta all¨ª lleg¨® el argentino, ?scar Araiz, un hombre de talento, abierto a las corrientes internacionales, que proced¨ªa del Teatro Municipal San Mart¨ªn de Buenos Aires, otro de los n¨²cleos importantes de creaci¨®n en Am¨¦rica del Sur. Araiz coreografi¨® Mar¨ªa, Mar¨ªa y El ¨²ltimo tren (1980), ayudando a sentar las bases est¨¦ticas que parecen ser la clave del ¨¦xito de este grupo.
La familia Pederneiras fue alternando las funciones m¨¢s variopintas en el escenario y detr¨¢s de ¨¦l: Paulo, Pedro, Jos¨¦, Luis, Miriam, Zoxa y Rodrigo pintaban un tel¨®n, danzaban un solo, coreografiaban o llevaban las cuentas, hasta el punto de que han creado una leyenda en Brasil. Rodrigo Pederneiras, poco a poco, se erigi¨® en el responsable del conjunto. "La danza tiene que ser expresiva y no necesita depender de situaciones teatrales. La clave de la. expresi¨®n est¨¢ en los movimientos", dice Rodrigo, que se ha convertido en el core¨®grafo moderno m¨¢s destacado de Brasil a pesar de ser incapaz de leer m¨²sica. Posee una especie de instinto natural que hace su trabajo fluido y r¨ªtmico.
Juegos ind¨ªgenas
La danza y la est¨¦tica de la obra 21, que se ver¨¢ en La Vaguada, rescata los juegos ind¨ªgenas. La gran novedad del programa es Nazareth. Su nombre proviene del apellido del compositor de principios de siglo Ernesto Nazareth.El m¨²sico Jos¨¦ Miguel Wisnek tom¨® las olvidadas melod¨ªas que un¨ªan lo popular y lo erudito para arropar una danza vital y endiabladamente sensual. Los bailarines de Corpo dan sentido y hacen gala al nombre [corpo, en portugu¨¦s significa cuerpo] del grupo.
La Bienal Internacional de la Danza de Ly¨®n, que se celebrar¨¢ el pr¨®ximo septiembre, estar¨¢ dedicada a la comunicaci¨®n de la cultura negra en el Atl¨¢ntico sur, y tomar¨¢ como punto de partida la costa africana y, del otro lado, la brasile?a.
El grupo Corpo estar¨¢ all¨ª.
Corpo, en el Teatro de Madrid (avenida de. la Ilustraci¨®n, s/n). Metro Barrio del Pilar. Hasta el domingo. 20.30. 2.500 y 1.500 pesetas.
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