Linares tiembla ante una segunda crisis

Cuando a principios de 1993 se extendi¨® el rumor de que la empresa Santana Motor de Linares (Ja¨¦n), la ¨²nica de automoci¨®n de Andaluc¨ªa que oferta veh¨ªculos acabados, cerrar¨ªa sus puertas cundi¨® el p¨¢nico en la provincia. El presidente de la Junta de Andaluc¨ªa, Manuel Chaves, se desplaz¨® a Jap¨®n urgentemente para entrevistarse con los responsables de Suzuki, accionista mayoritario de Santana, para tratar de convencerles de que no lo hicieran. No le dieron muchas esperanzas, por lo que la maquinaria administrativa andaluza se puso a trabajar r¨¢pidamente. El resultado fue la emisi¨®n de un laudo arbitral que controlaba las exigencias de los trabajadores y compromet¨ªa a la Administraci¨®n andaluza a aportar 12.000 millones de pesetas, dar cr¨¦ditos sin intereses, ayudas a jubilaciones anticipadas y crear un parque industrial en Linares en torno a la factor¨ªa.Tambi¨¦n el ministro de Industria, Juan Manuel Eguiagaray, y, m¨¢s recientemente, el secretario de Estado de Industria, Juan Ignacio Molt¨®, viajaron a Tokio para amarrar un compromiso de Suzuki; pero s¨®lo trajeron palabras e incertidumbre. Las inc¨®gnitas han saltado al aire con la presentaci¨®n de suspensi¨®n de pagos y la amenaza de cierre de la planta. No parece, sin embargo, que vaya a seguir ese camino la f¨¢brica de motos de Gij¨®n, la que tambi¨¦n tuvieron problemas, de momento solucionados.

Suzuki ni tan siquiera se siente ligada al laudo que pact¨® Santana, ha presentado suspensi¨®n de pagos y su cotizaci¨®n en Bolsa ha sido paralizada. La provincia de Ja¨¦n entera est¨¢ conmocionada y sus habitantes s¨®lo hablan de la posible desaparici¨®n de la factor¨ªa, lo que implicar¨ªa un grave desastre econ¨®mico para una zona que ve como paulatinamente tiene que recurrir al, pasado para subsistir. Lo m¨¢s rentable en Ja¨¦n vuelve a ser el tener olivos.

'Dos Caballos' y Land Rover

La lucha por la permanencia de Santana ha sacado de sus casas a los jienenses. En Linares las concentraciones convocadas por los trabajadores han reunido a miles de personas en las calles. La empresa, fundada en 1955 con el nombre Metal¨²rgica Santa Ana con cinco empleados, vive con la soga al cuello. Entonces fabricaba piezas de tractor y cosechadoras; despu¨¦s produjo cajas de cambio para los Dos Caballos de Citro?n, hasta que lleg¨® la brit¨¢nica Rover Motor para hacer los m¨ªticos Land Rover. La expansi¨®n de Santana llev¨® a que la plantilla llegara a 4.679 trabajadores. Despu¨¦s lleg¨® la crisis de Rover, su venta a Suzuki y la ca¨ªda en picado hasta la fecha.Los trabajadores de Santana reciben en su conjunto en concepto de sueldo unos 8.000 millones de pesetas anuales. La propensi¨®n media al consumo del ciudadano de Ja¨¦n se sit¨²a en un 73,14%, de lo que se deduce que el consumo privado de este sector de la poblaci¨®n supera los 5.500 millones de pesetas, gran parte de los cuales se gastan en la ciudad y la comarca de Linares.

A partir de esta cifra se entiende el inter¨¦s que los comerciantes tienen en que permanezca la factor¨ªa. Un comerciante reconoce que el posible cierre de la factor¨ªa conducir¨ªa al desastre a la mayor parte de los casi 60.000 habitantes que tiene Linares. "Si cierra Santana empezar¨ªa a pasar hambre la mayor parte de la poblaci¨®n. Ser¨ªa otra vez vivir el infierno que supuso la decadencia de la miner¨ªa en esta zona". Todos en Linares saben que dependen de la firma japonesa.

Gran parte de los empleados de Santana lleva trabajando de media en la empresa entre 20 y 30 a?os. Son, fundamentalmente, hombres que tienen a su cargo el mantenimiento de la familia.

Las concesiones de la Administraci¨®n a Santana se justifican en el hecho de que esta empresa representa el 65% del empleo industrial en la ciudad de Linares y el 12% a nivel provincial. Adem¨¢s, Santana factur¨® en 1991 un total de 32.362 millones de pesetas, contando con una plantilla de 3.311 trabajadores, lo que implica una generaci¨®n de renta de 11.500 millones de pesetas, el 20% de la renta de Linares y el 2% de la de Ja¨¦n.

Los sindicatos estuvieron en letargo desde que se firm¨® el laudo arbitral en marzo de 1993, aunque volvieron a la lucha despu¨¦s del nuevo rev¨¦s del expediente de regulaci¨®n de empleo que afectaba a 1.300 trabajadores. "Los sindicatos est¨¢n obligados y dispuestos a negociar con Suzuki y adquirir compromisos mutuos que garanticen realmente la supervivencia de Santana Motor y sus puestos de trabajo, pero no estamos dispuestos a vivir en un continuo chantaje", dice Pedro P¨¦rez, responsable de UGT en la empresa.

Esa sensaci¨®n de que desde la factor¨ªa se est¨¢ chantajeando a la Administraci¨®n y a los ciudadanos se expresa tambi¨¦n en el informe realizado por la firma Eseca y financiado por la Diputaci¨®n Provincial de Ja¨¦n. Los responsables del informe ponen de manifiesto que existe la "sospecha" de que Santana se mantiene a flote gracias a subvenciones "y que vuela cuando la situaci¨®n es desfavorable".

La factor¨ªa ha creado a su alrededor un conglomerado de industrias auxiliares que le suministran componentes. El n¨²mero de proveedores se sit¨²a en 150, de los que 33 est¨¢n ubicados dentro de la comunidad aut¨®noma andaluza, 31 en la provincia de Ja¨¦n y 17 en Linares. En su conjunto suponen un empleo m¨ªnimo de 1.839 trabajadores.

Proveedores

Cuando tiembla Santana tambi¨¦n lo hacen los proveedores. El ?ltimo ajuste realizado tras el laudo oblig¨® a estas empresas a reducir en un 7% el precio de sus productos. La cl¨¢usula se ha cumplido rigurosamente. "Ante esto est¨¢ claro qui¨¦n adquiere compromisos y los cumple, y qui¨¦n s¨®lo usa argumentaciones interesadas para presionar a trabajadores, sindicatos y Administraci¨®n", advierte Pedro P¨¦rez.Por su parte, la empresa, en un comunicado hecho p¨²blico el pasado viernes, advierte que no considera oportuno hacer comentario alguno en relaci¨®n con el cumplimiento de las actuales prestaciones previstas a cargo de las otras partes afectadas.

UGT considera que la direcci¨®n de la empresa no se ha comprometido lo suficiente con la ciudad de Linares y sus trabajadores. P¨¦rez recuerda que se pact¨® la ampliaci¨®n de capital social por parte de Suzuki en 8.000 millones de pesetas. "Se ha realizado una operaci¨®n acorde¨®n, con lo que despu¨¦s de dejar el capital social a cero se vuelve a suscribir el mismo capital teniendo cada accionista la opci¨®n de adquirir el mismo nivel de acciones que ten¨ªa anteriormente". As¨ª, seg¨²n P¨¦rez, Suzuki pondr¨ªa menos dinero del comprometido.

Suzuki respond¨ªa, a trav¨¦s del comunicado, que en la ampliaci¨®n de capital acordada en junio del a?o pasado la entidad japonesa fue pr¨¢cticamente el ¨²nico accionista que acudi¨® a la ampliaci¨®n "ejercitando el derecho de suscripci¨®n preferente que correspond¨ªa a su participaci¨®n accionarial, minoritaria hasta entonces. La mayor parte de los otros accionistas de la empresa no acudieron a la ampliaci¨®n".