Padres separados creen que ingresar en la c¨¢rcel por impago de pensiones traumatiza a sus hijos
Los divorciados se quejan de la impunidad de quienes impiden el contacto con los hijos
Convertidos en pagadores y padres de fin de semana. As¨ª se ven a s¨ª mismos numerosos padres de familia separados, que consideran que los jueces priman la figura de la madre ala hora de conceder la custodia de los hijos. Los casos de tres hombres, uno en Barcelona y dos en Zaragoza, encarcelados por no pagar la pensi¨®n de alimentos han provocado las protestas de colectivos de separados, queconsideran que se trata de casos de prisi¨®n por deudas, eliminados de la legislaci¨®n espa?ola, y piden que se penalice la obstaculizaci¨®n de las visitas, muy frecuente y casi siempre impune, seg¨²n afirman.
Las asociaciones de padres separados, que han proliferado en los ¨²ltimos a?os en Espa?a, han reaccionado con indignaci¨®n ante los casos de Barcelona y Zaragoza. "La prisi¨®n por deudas es algo anacr¨®nico", afirma Ram¨®n Pastor, presidente de la Federaci¨®n Estatal de Padres Separados (FEPS), una de las dos que existen en Espa?a, con unos 1.000 asociados, en su mayor¨ªa hombres. "La c¨¢rcel es una medida traum¨¢tica para los ni?os", argumenta.Esta asociaci¨®n est¨¢ recogiendo firmas para eliminar del C¨®digo Penal el art¨ªculo 487 bis, introducido en 1989, que prev¨¦ penas de un mes y un d¨ªa a seis meses de c¨¢rcel y multas de 100.000 a 500.000 pesetas si no se pagan las pensiones durante al menos tres meses. "Hay otras medidas. Hacienda tiene medios suficientes para investigar las finanzas de alguien que se niega a cumplir con los pagos", concluye Pastor.
La Federaci¨®n Padres de Canaletas, con unos 3.000 asociados, considera necesario castigar a los padres que incumplen sus obligaciones, pero estima que, a la inversa, existe poca sensibilidad social cuando se obstaculiza las visitas del progenitor que no tiene la custodia. En la actualidad, esto se castiga con las mismas penas que el impago de alimentos, por desobediencia a decisi¨®n judicial. Los padres separados reclaman, sin embargo, que se tipifique como delito. "La justicia act¨²a lentamente en estos casos y hace m¨¢s dif¨ªcil recuperar la relaci¨®n con los h?jos", afirma Manel Casas, vicepresidente de la Federaci¨®n de Canaletas. "No queremos c¨¢rcel, lo que pedimos es que se termine con esta impunidad, que se aplique la ley", dice Ram¨®n Pastor.
Jueces y abogados afirman que los incumplimientos, tanto de visitas como de pensiones, rondan el 30% de los casos, aunque especifican que la mayor¨ªa de las quejas por las visitas no llegan al juzgado. "Hay que dejar claro, primero, que las sentencias se cumplen en un 80%", afirma Jes¨²s Gavil¨¢n, juez de familia de Madrid. "Cuando se incumplen, suele ser algo rec¨ªproco: 'yo no te dejo ver a los ni?os si no pagas' y viceversa", explica. Este juzgado, por ejemplo, ha tramitado, en los ¨²ltimos 10 a?os, en torno a 300 incumplimientos sobre unos 10.000 sentencias, el 75% por impago de pensiones.
Custodia materna
"Lo triste es que, a menudo, son los propios separados los que no visitan a sus hijos, porque los tienen en segundo plano", afirma Ana Mar¨ªa P¨¦rez del Campo, presidenta de la Asociaci¨®n de Mujeres Separadas.
Los afectados alegan que el problema es que los jueces conceden sistem¨¢ticamente la custodia de los hijos a la madre, aunque ambos se hayan ocupado de su cuidado, y que los abogados les desaniman a solicitarla. La realidad es que pocos padres la piden: en el 95% de los casos de mutuo acuerdo los c¨®nyuges la pactan para la madre y s¨®lo en un 16% de los contenciosos hubo un enfrentamiento por la custodia, resuelto a favor de la madre en un 63% de los casos y del padre en un 25%, seg¨²n los datos de varios juzgados madrile?os.
"Los jueces no somos sexistas", insiste Jes¨²s Gavil¨¢n. "La realidad es que son casi siempre las madres las que se ocupan de los hijos. Los padres suelen pedir la custodia de forma testimonial aunque reconocen que los ni?os est¨¢n mejor con la madre. A menudo se utiliza a ¨¦stos para negociar las condiciones de la separaci¨®n, porque el piso se lo quedan los ni?os", explica.
Los separados consideran que la soluci¨®n es la custodia compartida, una f¨®rmula no prevista en la ley, aunque se utiliza en casos excepcionales. "Eso del r¨¦gimen de visitas es carcelario", afirma Ram¨®n Pastor. "?C¨®mo es posible que s¨®lo se pueda ver a unos hijos cuatro d¨ªas al mes? Se valora m¨¢s que duerman en la misma cama que que tengan un padre y una madre", razona. Pero, los jueces son reacios a esta f¨®rmula para preservar la estabilidad del menor y cuando se concede es porque los ex-c¨®nyuges tienen una relaci¨®n excelente. "Es obvio que el r¨¦gimen de visitas es s¨®lo un marco de referencia y lo normal es ser flexible", explica la juez Mar¨ªa Jes¨²s Muriel. "Si encima los padres se llevan mal, es ca¨®tico para los cr¨ªos estar de aqu¨ª para all¨¢, un mes con uno y un mes con otro".
Familias abandonadas
La mayor¨ªa de los expertos valoran el art¨ªculo 487 bis como una medida disuasoria eficaz. "No se trata de una prisi¨®n por deudas, sino por abandono de familia, algo muy grave y duramente penado en la mayor¨ªa de las legislaciones", afirma Mar¨ªa Jos¨¦ Varela, abogada."Una gran parte de los demandados accede voluntariamente al pago porque se asustan al recibir la querella", explica Mar¨ªa Luisa Casal, vicepresidenta de la Asociaci¨®n de Mujeres Juristas Themis, que ha tramitado 608 querellas en los ¨²ltimos cuatro anos, por impago de pensiones, por valor de m¨¢s de 500 millones de pesetas. Los alimentos adeudados oscilan alrededor de las 20.000 pesetas mensuales por hijo.
"El problema m¨¢s grave son los profesionales liberaIes, los que trabajan en la econom¨ªa sumergida o los que ponen sus bienes a nombre de terceras personas, algo frecuente cuando hay un segundo matrimonio", afirma el juez Jes¨²s Gavil¨¢n. Muchos jueces absuelven a los querellados porque alegan que no son solventes, aunque el impago sea objetivo. La c¨¢rcel llega en caso de reincidencia, porque la ley permite que no se cumplan las penas inferiores a un a?o, si no hay antecedentes.
En el caso de la obstaculizaci¨®n de las visitas, los profesionales reconocen las dificultades para actuar, aunque pocos son partidarios de convertirla en delito. "La ley prev¨¦ que se retire la custodia a quien incumple una sentencia obstaculizando las visitas, pero es algo muy delicado, porque no es f¨¢cil establecer hasta qu¨¦ punto son los propios ni?os los que no quieren ver al otro o est¨¢n manipulados. Esta soluci¨®n suele ser siempre peor que el mal que intenta evitarse", explica Mar¨ªa Jes¨²s Muriel.
La escasez de asistentes sociales y de psic¨®logos en los juzgados complica la situaci¨®n, seg¨²n los expertos. "Una soluci¨®n ser¨ªa una polic¨ªa judicial especializada que pudiera intervenir, porque ir a buscar a los ni?os con la polic¨ªa es tremendo", dice Muriel.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.