"Lo inteligente es no hacer topicos"
Los 175 a?os que cumple el Museo' del Prado se han inmortalizado en acero. Su creador ha sido el escultor valenciano Andreu Alfaro, quien gratuitamente, a petici¨®n del director del Prado, imagin¨® y llev¨® a cabo el anagrama de tal aniversario de la forma m¨¢s sencilla y bella: una estructura geom¨¦trica, el n¨²mero 175 en cascada, en el material que representa el siglo XX: el acero. Pero Alfaro es un hombre, como el mismo dice, "sin definici¨®n, heterodoxo, sin modelo", q ue rompe toda estructura o l¨ªmite. Hijo de un carnicero aficionado a la pintura se?ala haber sido "de los pocos espa?oles que estudi¨® en el Instituto de Libre Ense?anza; de ah¨ª mi admiraci¨®n primordial por los valores culturales y mi amor intr¨ªnseco al arte. Desde peque¨ª?o", contin¨²a, "robaba el papel con el que mi madre deb¨ªa envolver la carne para pintar; recuerdo a¨²n sus cachetes por ello". Nacido en 1929, comenz¨® como dibujante, luego pintor, hasta que "lo que expresaba no cab¨ªa en el lienzo". Se pas¨® a la escultura, "de la que no pude vivir hasta el 72". Ahora, sus obras est¨¢n dispersas por todo el mundo, y de su Valencia natal pasan a Par¨ªs, a Berl¨ªn o a Nueva York.Pregunta. ?En qu¨¦ pens¨® cuando le pidieron que hiciera el anagrama de conmemoraci¨®n de los 175 a?os del Museo del Prado?
Respuesta. Pens¨¦ en la colecci¨®n de pintura que guarda el Prado del siglo XIII al XX, y al respecto sab¨ªa que el resultado ten¨ªa que ser cl¨¢sico. Lo m¨¢s cl¨¢sico es la belleza. Y la primera idea de belleza est¨¢ en Plat¨®n, en las formas geom¨¦tricas. El c¨ªrculo, el cuadrado y el tri¨¢ngulo. La belleza intelectual es la geometr¨ªa; de ah¨ª la representaci¨®n del n¨²mero. Pero, a la vez, deb¨ªa tener la imagen del siglo XX. Los materiales nobles de nuestro siglo son el pl¨¢stico y el acero. La elecci¨®n fue obvia, y por ello utilic¨¦ el acero.
P. El acero ?no le resulta un material fr¨ªo, sin sentimientos?
R. El acero es fr¨ªo, pero hay que dotarle de expresiones. En este sentido soy muy asc¨¦tico: no me gustan los materiales que dramatizan. Es f¨¢cil llorar para hacer llorar al otro. Lo inteligente es no hacer los t¨®picos: la madera retorcida, el hierro oxidado. Lo que me interesa es una obra clara y llegar as¨ª a los otros.
P. Viviendo en Valencia, ?qu¨¦ ha sido el Prado en su vida?
R. El Prado ha sido el santuario de mi vida art¨ªstica. Creo que es uno de los mejores museos del mundo; adem¨¢s del arte espa?ol me sorprende lo bien que los Austrias eleg¨ªan las obras, de los Dureros a los Tizianos o El Bosco. Cuando llegan los Borbones se produce un vac¨ªo total, excepto Goya.
P. ?Es el Prado un museo del siglo XX?
R. Todav¨ªa es un museo decimon¨®nico; sus instalaciones son de verg¨¹enza. Ahora no hay dinero; por ello el 175 es un gancho, un invento con imaginaci¨®n para mostrar lo que no se ha visto e intentar hacer del Prado un museo y no una colecci¨®n de pintura. Un museo del siglo XX con las instalaciones necesarias, desde una sala de espera a un restaurante, a tiendas buenas, para que d¨¦ la impresi¨®n de estar realmente abierto al p¨²blico.
P. ?Qu¨¦ destacar¨ªa de los actos programados para el 94-95?
R. La exposici¨®n de El Bosco, nunca realizada antes, ser¨¢ ¨²nica. Por otra parte, se sacar¨¢n los fondos de escultura con los que el Prado cuenta, nunca mostrados.
P. La escultura ?es el arte discriminado del siglo XX?
R. Hasta la Edad Media fue el arte por excelencia, pero a partir de entonces fue decayendo. Al pensar en arte, la imagen que viene es una pintura, jam¨¢s una escultura. Hoy, la piedra s¨®lo se utiliza como escultura en las calles.
P. ?Con qu¨¦ mira un escultor?
R. Con las manos, los ojos y la inteligencia. Lo que ya no se puede permitir en nuestro siglo es un artista analfabeto.
P. ?Qu¨¦ particularidad art¨ªstica de Madrid ama?
R. El hecho de que en esta ciudad sea donde m¨¢s intesamente se manifieste la crisis que tanto me gusta. Es la ciudad que se est¨¢ haciendo continuamente. Hay un fondo de crisis y pol¨¦mica diaria, sin clara identidad, cosmopolita.
P. ?No existe el casticismo?
R. El casticismo se ha quedado en un invento para turistas o para los que vienen de fuera y se quieren integrar.
P. En La Vaguada se alza una obra gigantesca suya. El arte en la calle ?influye en el ciudadano?
R. Creo que es lo mejor que he hecho nunca, pero ha sido de los vecinos de quien m¨¢s halagos he recibido; el arte en la calle rompe con la vida lineal del ciudadano. Tambi¨¦n. gust¨® a los taxistas; lo llaman Los Arcos. A pesar de su aparente modernidad tiene mucho de clasicismo griego. Me inspir¨¦ en la columnata de Bernini de San Pedro, en Roma, en sus fugas, en el sentido de libertad. En realidad, todo lo que hace un artista es puramente humano.
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