"Madrid est¨¢ un poco guarrindongo'
Hablar del rock and roll en este pa¨ªs es trazar una aureola alrededor de Miguel ?ngel Carre?o, popularmente conocido por varias generaciones como Micky. A este mundo arrib¨® hace ya la friolera de 50 a?os, y a juzgar por su modo nervioso de hablar, cantar y bailar este artista tira por tierra, con su trabajo de todos los d¨ªas, la absurda y adulta creencia de que el rock es s¨®lo para ni?atos o perdedores profesionales.Pregunta. ?Qu¨¦ diferencias encuentra entre el Madrid de ahora y el que conoci¨® en los sesenta?
Respuesta. De entonces recuerdo con cari?o los tranv¨ªas, los bulevares, los pocos mendigos que hab¨ªa por la calle. Ahora, sin embargo, veo much¨ªsimo cemento, pintadas y, sobre todo, pobres. Yo, que soy buen andador y me encanta cruzar el Retiro -el pulm¨®n de la ciudad-, encuentro que la ciudad est¨¢ un poco guarrindonga. Como descuidada. En cuanto a mendicidad, pienso que Madrid podr¨ªa ser hoy, perfectamente, una ciudad portuguesa.
P. ?C¨®mo fueron sus inicios musicales en Madrid?
R. Al proceder de familia diplom¨¢tica, llegu¨¦ a la ciudad para quedarme definitivamente cuando cumpl¨ª 16 a?os, y en la terraza de la que fue mi casa durante muchos a?os -calle de Jorge Juan, casi al lado del cine Alcal¨¢- tuve mi primer local de ensayo. All¨ª nos familiarizamos con el incipiente rock and roll de los sesenta.
P. Usted lleva por toda Espa?a un espect¨¢culo llamado Los entra?ables sesenta. ?Tan entra?able fue esa d¨¦cada?
R. A m¨ª no me gustan demasiado las etiquetas. Sin embargo, eso de entra?able no me chirr¨ªa demasiado. Supongo que ser¨¢ porque todo lo que hac¨ªamos ven¨ªa de las entra?as.
P. ?Se ha convertido Madrid en una ciudad m¨¢s aburrida?
R. Creo que la ciudad se est¨¢ acercando peligrosamente a los niveles europeos de aburrimiento. Yo he vivido en el extranjero y s¨¦ lo que es tener que irse a casa a las seis, para cenar y meterse en la cama, por no tener absolutamente nada que hacer. Espa?a -y tambi¨¦n Madrid- siempre ha tenido una idiosincrasia m¨¢s alegre y abierta.
P. ?C¨®mo se lo monta un rockero de 50 a?os?
R. Hombre, al envejecer se pierde fuelle. El hombre de goma ya no se estira y encoge como antes. Pero, aunque me haya hecho mayorcito, sigo vibrando cuando escucho un buen rock and roll. Sigo grabando discos. Sigo tocando en directo -incluso en peque?os bares-, y es muy probable que d¨¦ la tercera vuelta a Espa?a.
P. ?Vender¨ªa su alma al diablo por volver a aquellos entra?ables sesenta?
R. No, porque a m¨ª no me gusta nada la nostalgia. Prefiero la memoria, a secas.
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