Matapi?oneras mim¨® al hu¨¦sped del "derby"

Mam¨¢ Matapi?oneras, el campo de arena del Sanse, dio la espalda a su hijo. Lleg¨® un hu¨¦sped de lujo, el Getafe, y esta vez la hospitalidad acab¨® el mimo. El Getafe se acopl¨® mejor a la tierra que el Sanse y se llev¨® los dos puntos. El derby de la arena se volvi¨® en contra del equipo que m¨¢s acostumbrado est¨¢ a este elemento. Este resultado arroja espinas al equipo norte?o. Ya son seis negativos los que muestra el Sanse y la sombra del descenso vuelve a pisarle los talones. El Getafe confirma su posici¨®n para jugar la liguilla de ascenso.Mal comenz¨® el Sanse. La tablilla de alineaciones exhib¨ªa una l¨ªnea en el apartado correspondiente al entrenador local. El Sanse se presentaba desgobernado. Sito est¨¢ expedientado por sentarse en el banquillo sin el t¨ªtulo nacional, y P¨¦rez Garc¨ªa, el nuevo entrenador, no puede dirigir al equipo porque el Sanse no ha finiquitado el contrato del anterior t¨¦cnico, Joaqu¨ªn Salmer¨®n. Sito se coloc¨® detr¨¢s del banquillo y transmiti¨® unas ¨®rdenes que no resultaron muy positivas para su equipo.

El Getafe sali¨® como si hubiese jugado en tierra toda la vida. El t¨¦cnico getafense, Luis S¨¢nchez Duque, oblig¨® a sus jugadores a entrenar durante la semana en un campo de tierra. Aprendieron la lecci¨®n muy r¨¢pido. Antes, se sobrepusieron del susto de ver rematar de cabeza al defensa local Mart¨ªn. El bal¨®n no entr¨® por cent¨ªmetros. Era el minuto dos y la ¨²nica oportunidad del Sanse en el primer periodo. Desde entonces, el Getafe impuso su mejor juego.

. Pronto el choque se torn¨® subterr¨¢neo. La arena de Matapi?¨®neras acogio en sus brazos a los jugadores. Los que m¨¢s ca¨ªan eran los locales, no por la dureza de los getafenses, sino por la diferencia de envergadura. Los pitufines Arellano, Soriano y Luisito, acud¨ªan al choque, valientes, con los f¨®rnidos defensores visitantes, pero sal¨ªan despedidos a la ¨¢spera alfombra.

El delantero getafense Juli¨¢n pronto empez¨® a probar su velocidad. El duelo que protagoniz¨® con su tocayo, el portero local, le trajo de cabeza. En el minuto 10, al misil del delantero respond¨ªa con una excelente parada el portero; en el 20, el meta local asust¨® con la mirada al delantero visitante, que dio una patada al aire cuando estaba en buena posici¨®n; en el 63, el bal¨®n colocado de Juli¨¢n se encontr¨® con el guante del guardameta. El duelo Juli¨¢n-Juli¨¢n fue para el jugador del Sanse. Entonces, entr¨® en escena un nuevo actor cuando parec¨ªa que aquello iba a quedar en tablas. El delantero getafense Juan se present¨® ante Juli¨¢n y fue mucho m¨¢s certero que su compa?ero. Su gol supone que los dos positivos del derby de la tierra vuelen a Las Margaritas.