El flautista y la ballena

Inside the San Juan (En el interior del San Juan) podr¨ªa haberse titulado el concierto de Paul Hom en Madrid, parodiando los t¨ªtulos de sus discos grabados en el Taj-Majal o la Gran Pir¨¢mide. Dec¨ªa Horn que, cuando improvisas, la percepci¨®n del lugar, su historia, se convierte en parte de la m¨²sica porque est¨¢s abierto al esp¨ªritu de ese momento.El neoyorquino, que cumplir¨¢ 64 a?os el pr¨®ximo jueves, se present¨® en solitario con tres flautas y un saxo. Pero enseguida qued¨® claro que no iba a estar solo. Se hab¨ªa tra¨ªdo cintas pregrabadas de las cuales iban a surgir violines europeos, percusiones hind¨²es, voces de ni?os, un c¨¢ntico africano o los sonidos de una ballena. Cont¨® la historia de una orca de la ciudad canadiense donde vive, y de c¨®mo aquel macho desconsolado por la muerte de su compa?era, hasta el punto de no comer y permanecer inm¨®vil en un rinc¨®n del acuario, acab¨® por reaccionar a la m¨²sica que Horn le tocaba y sali¨® de su depresi¨®n.

Ex¨®tico

Paul Hom ha incorporado en sus improvisaciones influencias de algunos de los pa¨ªses recorridos: una ti-tze -flauta travesera de bamb¨²- le sirvi¨® para evocar un corte de su ¨¢lbum China, y, sobre un fondo ex¨®tico, interpret¨® Nigeria, de su ¨²ltimo disco ?frica.

Uno de los pioneros musicales del fen¨®meno new age parece decantarse hacia lo que llaman world music o ritmos ¨¦tnicos; tendencia al cambio que est¨¢ cobrando fuerza en los ¨²ltimos tiempos.

En el siempre emotivo Cant dels ocells, de Pau Casals, y sendas piezas de Debussy y Duke Ellington, demostr¨® una t¨¦cnica irreprochable. Y es que quien lleg¨® a ser un cotizado m¨²sico de estudio en Hollywood podr¨ªa estar forr¨¢ndose ahora mismo en m¨²ltiples sesiones de grabaci¨®n. Paul Horn, cuya gira recala en Logro?o (d¨ªa 17), Gerona (d¨ªa 18) y Zaragoza (d¨ªa 19), ha preferido, en cambio, seguir otros derroteros m¨¢s espirituales, desde que permaneci¨® junto al Maharishi a los pies del Himalaya en 1967, y compartir su m¨²sica meditativa por el mundo.