'Oro fundido'

Con este t¨ªtulo, Oro fundido, me vi sorprendido al leer EL PA?S del pasado domingo 27 de febrero. Esta sorpresa se basaba, en primer lugar, al observar las fotograf¨ªas que ilustraban dicho reportaje, sobre todo la del mariscal Vorochilof y la del chato que luce en su tim¨®n de cola el emblema del Rat¨®n P¨¦rez.Con referencia al contenido del reportaje debo manifestar, en primer lugar, mi felicitaci¨®n a quienes han llevado a cabo la correspondiente informaci¨®n, para que personas debidamente documentadas puedan constatar la veracidad de todo cuanto en el mencionado reportaje se recoge.

Me ha tocado vivir muchos a?os escuchando la misma canci¨®n, "el oro de Mosc¨²", en boca de quienes de alguna forma pretend¨ªan descalificar la actitud observada por el Gobierno de la Rep¨²blica al enviar este oro a Rusia, empleando todo tipo de vocabulario, que no merece la pena repetir. Hoy, despu¨¦s de tantos a?os, y a trav¨¦s de reportajes escritos, de documentales en v¨ªdeo, muchos de quienes conocimos aquellos momentos, hoy con edades avanzadas, podamos acreditar que no todo lo hicimos mal, que de expolio nada. Mi circunstancia vivida en aquel entonces me concede autoridad para poder acreditar de una forma real que aquel oro cumpli¨® su cometido legal, y mi persona fue a una de las que afect¨® este pago.

Siguiendo el contenido de este reportaje, s¨ª quiero hacer menci¨®n a algunos datos que en el mismo se recogen, y no porque sean inciertos. Este es su valor.

Se dice, con muy buen criterio, que entre el material que los barcos rusos desembarcaron en puertos de la Rep¨²blica vinieron 648 aviones, cosa que yo no pongo en duda; pero s¨ª quiero hacer una aclaraci¨®n responsable, con total fundamento de causa; la aviaci¨®n de bombardeo que durante toda la guerra civil espa?ola sirvi¨® a la Rep¨²blica, y aqu¨ª me refiero, exclusivamente, al tipo denominado SB-2 Katiuskas, s¨®lo dispuso en los casi tres a?os de contienda de s¨®lo 50 unidades, para finalizar la guerra, y entregados en Barajas, 14. El otro tipo de avi¨®n de bombardeo era el Natacha, que jug¨® un gran servicio a costa del m¨¢s terrible sacrificio de sus tripulaciones.

Con muy buen criterio se dice en el reportaje que publica EL PA?S que ¨²ltimamente la aviaci¨®n de la Rep¨²blica se encontraba muy debilitada. Qu¨¦ se pod¨ªa esperar si desde el mes de mayo de 1938 el Grupo 24 de Katiuskas no hab¨ªa recibido un solo aparato, y s¨ª muchos combates a sus espaldas.

Con honor, respeto y reconocimiento de la verdad a¨²n vivimos unos hombres que s¨®lo queremos la paz para el mundo entero.-