Magic vuelve como t¨¦cnico de los Lakers

Magic Johnson vuelve. La noticia viaj¨® desde la CNN, que difundi¨® la informaci¨®n con brevedad no exenta de rotundidad, hasta todos los rincones de la NBA. Una de las grandes estrellas del baloncesto mundial dejaba su retiro voluntario como consecuencia de ser portador del virus del sida para incorporarse al club de su vida, Los ?ngeles Lakers. Hab¨ªa un matiz, sin embargo: Magic no pisar¨¢ la cancha porque regresa como entrenador. Los Lakers tratan as¨ª de recuperar parte de lo perdido con su ausencia: imagen, alegr¨ªa y sobre todo victorias.

La gerencia del club trat¨® de desmentir la noticia en un primer momento. Desde hace meses proliferaban los rumores acerca del regreso de Magic, bien como entrenador, bien en alg¨²n puesto ejecutivo del club. El entusiasmo con que fue acogida la noticia difundida por la CNN oblig¨® a una inmediata marcha atr¨¢s: "La decisi¨®n ya ha sido tomada y Johnson ser¨¢ el nuevo entrenador de los Lakers a partir de hoy aunque no se har¨¢ cargo del equipo hasta que no regrese de su gira por el Estado de Texas, donde debe jugar con los Dallas Mavericks y los Houston Rockets", tuvo que confesar John Black, relaciones p¨²blicas del club. Johnson sustituir¨¢ a Randy Pfund, quien debe regresar inmediatamente a Los Angeles para rescindir su contrato. Pfund disfrutaba de un contrato temporal que se le hab¨ªa renovado hace un mes.El comisionado de la NBA, David Stern, aparentemente sorprendido por la noticia mientras presenciaba en Nueva York el partido que los Knicks disputaban ante Chicago Bulls, quiso ser diplom¨¢tico aunque mostr¨® su satisfacci¨®n personal por el hecho: "Si es cierto, le deseo lo mejor. Creo que el era uno de los personajes que le daban m¨¢s cr¨¦dito a la NBA y que, por tanto, ser¨ªa bueno para la Liga".

As¨ª pues, Earvin Magic Johnson vuelve como entrenador del ¨²nico equipo que conoci¨® como jugador y al que elev¨® al nivel de excelencia en la d¨¦cada de los ochenta. Magic, que se hab¨ªa retirado dos veces como jugador, retorna ahora al banquillo de un conjunto que ha perdido su gloria, su tradici¨®n y su p¨²blico.

Los Lakers siempre jugaron un baloncesto de transici¨®n, rico en matices y en espect¨¢culo. Ahora se han convertido en una franquicia en transici¨®n.

La temporada pasada, bajo el mando del joven entrenador Randy Pfund, el equipo lleg¨® a tocar fondo en algunas fases de la temporada. Unicamente su actuaci¨®n en los play-offs, en los que vencieron los dos primeros encuentros a los Phoenix Suns, para despu¨¦s perder tres consecutivos, le permitieron salvar el puesto.

El propietario de los Lakers, el billonario Jerry Buss, estaba decidido a despedir al entrenador al principio de esta temporada. Sin embargo, el manager general del club, el m¨ªtico Jerry West, un ejecutivo nada partidario de cambios dr¨¢sticos, decidi¨® darle otra oportunidad.

Pero el destino de Pfund estaba escrito. El entrenador debutante, largo tiempo ayudante de Pat Riley, es un experto en utilizar el v¨ªdeo y los apuntes minuciosos para diseccionar al rival. Sin embargo, su nivel t¨¦cnico ha sido cuestionado desde el primer d¨ªa en que tom¨® el mando de los Lakers. Para muchos observadores, Pfund "solamente conoce el sistema de Pat Riley, pero ya no tiene los jugadores que tuvo Riley".

El deterioro de los Lakers ha sido progresivo. De la cima del baloncesto mundial han pasado a ser un equipo por debajo de la l¨ªnea de mediocridad. La retirada de Magic, el envejecimiento de sus estrellas y la ausencia de j¨®venes con talento han hecho que los aficionados de los Lakers, siempre bastante superficiales en su relaci¨®n con el equipo, hayan desertado.

"El, equipo est¨¢ gravemente herido", comentaba ayer el manager Jerry West. "Hemos perdido nuestro carisma; parece como , si no tuvi¨¦ramos alma".

Para reemplazar a Randy Pfund, West ha tomado, una vez m¨¢s, una decisi¨®n arriesgada, algo bastante habitual en la antigua estrella de los Lakers. Magic Johnson, que se retir¨® de las canchas de juego en noviembre de 1991 al haber contra¨ªdo el virus VIH del sida, retoma, por tercera vez, al equipo de su vida. Pero esta vez, la visi¨®n que Magic tendr¨¢ de sus compa?eros ser¨¢ distinta a la que siempre tuvo como director de juego. Magic, que no tiene experiencia alguna como entrenador, podr¨¢ aportar esos intangibles a los que se refer¨ªa Jerry West. Johnson ha sido, y todav¨ªa es, el alma de un equipo carente de liderazgo en el campo y y casi sin opci¨®n de acceder a los play-offs.

Los Lakers que se va a encontrar Magic en su retorno al Forum distan mucho de ser aquel equipo que maravill¨® al mundo bajo la batuta de Pat Riley y est¨¢n muy lejos de ser el para¨ªso id¨ªlico en el que todos eran como una gran familia.

La realidad actual de los Lakers est¨¢ m¨¢s cercana a la descripci¨®n de un se¨ªsmo en el sur de California. Son evidentes los problemas de relaci¨®n entre los jugadores m¨¢s veteranos y los m¨¢s j¨®venes. Se hacen acusaciones veladas sobre la falta de combatividad de alguna de sus estrellas consagradas -l¨¦ase Divac y Worthy-, y es palpable la dif¨ªcil relaci¨®n entre t¨¦cnicos y hombres de despacho.

La incorporaci¨®n de Magic al banquillo de los Lakers es, seg¨²n fuentes del club, "una soluci¨®n arriesgada y compleja, pero tambi¨¦n espectacular".