La b¨²squeda de pastos caus¨® un apu?alamiento en Guadalix
El apu?alamiento el pasado viernes, en Guadalix de la Sierra (2.100 habitantes), del pastor Pablo Rubio, El Maqui, de 40 a?os, a manos del tambi¨¦n ganadero Igancio Herranz, El Escarchao, se debi¨® a la b¨²squeda de pastos.Seg¨²n las versiones recogidas por este peri¨®dico, a las siete de la tarde del viernes, El Maqui y El Escarchao guiaban sus reba?os hacia las afueras del pueblo. Ambos buscaban los pastizales que crecen en las tierras que el cercano embalse no pueden cubrir. Sin embargo, surgi¨® un problema: s¨®lo hay un camino para pasar a los terrenos que circundan el pantano. Los dos pastores apretaron la marcha. Los reba?os se mezclaron. Comenz¨® una fort¨ªsima discusi¨®n.
Seg¨²n la mayor¨ªa de los testimonios [varios jugadores del equipo de f¨²tbol de Guadalix entrenaban en un lugar cercano], "El Maqui arremeti¨® con un palo contra El Escarchao. Le golpe¨® con dureza. El Escarchao se defendi¨® como pudo. Sac¨® una navaja cabritera y le asest¨® tres pu?aladas". Rubio tuvo que ser trasladado de urgencia al Hospital la Paz, en donde se recupera de sus heridas.
"Se ve¨ªa venir. Muchos se meten con las ovejas en lugares de otros. Nunca se han tomado medidas dr¨¢sticas contra los pastores que dejan que su ganado se introduzca en fincas privadas", mantiene uno de los escasos pastores de Guadalix.
La mayor parte de los pastos de este pueblo est¨¢n en manos privadas, aunque el municipio cuenta con algunas fincas. Su arrendamiento se consigue mediante subasta. Los pastores, en puja p¨²blica, arrendan los terrenos. "Se pagan hasta dos millones de pesetas por un par de hect¨¢reas de pastos", dicen. "As¨ª es la econom¨ªa de mercado", bromean.
Los pastores y vaqueros no pueden superar los cuotas de leche y carne que marca la Uni¨®n Europea. "Tenemos que matar el ganado a la fuerza. Yo creo que eso no tiene mucho sentido". Los ganadores afirman que una de los negocios m¨¢s rentables, la lana, se ha derrumbado.
Los ganaderos tambi¨¦n est¨¢n abandonando la cr¨ªa de vacas. "La leche de oveja vale tres veces m¨¢s y los europeos no ponen tantos impedimentos. As¨ª que muchos cambiaron el negocio. Pero, tenemos un problema: hay pocos pastos porque no llueve y en las tierras del pantano no nos podemos meter porque el Canal nos multa. Esto es la vaca que se muerde la cola", r¨ªen.
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