El candidato de la derecha se, impone por un solo voto en el Senado italiano
Silvio Berlusconi tendr¨¢ muy dificil gobernar. Lo indican los problemas surgidos en las elecciones de los presidentes de las c¨¢maras, que han mostrado la incapacidad del llamado Polo de las Libertades para conseguir los 10 votos que le faltan para la mayor¨ªa absoluta en el Senado. La magia de Berlusconi no funcion¨® bien en el primer choque con la realidad pol¨ªtica. El problema no es de capacidad personal, sino la estructura de una derecha en transici¨®n que, bajo su formulaci¨®n actual, es totalmente inestable.
Poco despu¨¦s de que fueran elegidos los presidentes de la C¨¢mara de Diputados y del Senado, el primer ministro, Carlo Azeglio Ciampi, present¨® la dimisi¨®n de su Gobierno al presidente de la Rep¨²blica, Oscar Luigi Scalfaro.La elecci¨®n de los presidentes parlamentarios concluy¨® pasadas las 17.30 horas de ayer, con el triunfo de Irene Pivetti, de la Liga Norte, en la C¨¢mara baja, donde la derecha tiene una c¨®moda mayor¨ªa absoluta, y de Carlo Scognamiglio, de Forza Italia, en el Senado. ?ste se impuso por un solo voto m¨¢s que los 161 recogidos por el republicano Giovanni Spadolini -tres menos que la mayor¨ªa absoluta-, al t¨¦rmino de un recuento tan cerrado que dos televisiones que lo siguieron en directo dieron, respectivamente, como vencedores a cada uno de los candidatos.
El triunfo de Scognamiglio fue posible gracias al voto d¨¦ una senadora del grupo del radical Marco Pannella, que en votaciones anteriores se hab¨ªa pronunciado por Spadolini. A la vista de esta situaci¨®n, Berlusconi habl¨® ayer de la posibilidad de "ampliar la colaboraci¨®n" al Partido Popular Italiano (PPI), que, junto con el Pacto de Mario Segni, configura el segmento del centro pol¨ªtico. Y prueba de los problemas estructurales que plantea esta derecha biso?a vencedora de las elecciones fue la reacci¨®n inmediata del l¨ªder de Alianza Nacional, Gianfranco Fini. "?Se imaginan un Gobierno con los populares y Forza Italia? Yo no", dijo el aliado generalmente m¨¢s serio de Berlusconi.
Se prev¨¦ que Scalfaro inicie ma?ana las consultas preceptivas con los partidos pol¨ªticos, para encargar, casi con certeza absoluta a Berlusconi, la formaci¨®n del nuevo Gabinete a mediados de esta semana o comienzos de la siguiente.
La Liga Norte, por boca de Roberto Maroni, el segundo de Umberto Bossi, consider¨® "leg¨ªtima" la apertura hacia el centro del presidente de Forza Italia. Este tercer aliado del Polo de las Libertades ha sido, en cambio, el que ha metido a Berlusconi en el atolladero de las elecciones de los presidentes de las c¨¢maras, al vetar cualquier soluci¨®n que no fuera la de su atribuci¨®n completa a los partidos d¨¦ la mayor¨ªa. Berlusconi hubiera aceptado la candidatura de Spadolini, a la que Fin? tampoco planteaba serias, objeciones.
Cambios de la Liga
A esta dificultad en adoptar las decisiones adecuadas para completar los 10 votos pelados que separan al Polo de las Libertades de la mayor¨ªa absoluta en el Senado, se suman los continuos cambios de orientaci¨®n de la Liga y las profundas diferencias de programa que separan a los tres componentes del bloque de los vencedores.Pero la falta de votos senatoriales es en s¨ª misma un problema grave. Mantener el control los 10 famosos votos adicionales puede exigir a la nueva mayor¨ªa un esfuerzo ¨ªmprobo. De ah¨ª que la amenaza de repetir las elecciones se haya planteado ya en estas dos primeros jornadas del Parlamento.
El presidente Scalfaro intervino en la ma?ana de ayer con un duro comunicado, en el que advert¨ªa que no era l¨ªcito condicionar con amenazas las votaciones que se estaban desarrollando en la C¨¢mara y en el Senado, y recordaba, que seg¨²n la Constituci¨®n, el ¨²nico que puede convocar elecciones generales es el jefe el Estado.
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