Inocente por partida doble
Paul Hill, uno de los'cuatro de Guildford', absuelto del asesinato de un polic¨ªa en 1974
Paul Hill, de 39 a?os, uno de los cuatro implicados en el esc¨¢ndalo judicial conocido como el caso de los cuatro de Guildford, gan¨® ayer su ¨²ltima batalla contra la justicia brit¨¢nica cuando el juez Brian Hutton, del Tribunal de Apelaci¨®n de Belfast, declar¨® solemnemente que el juicio celebrado en 1975, en el que fue hallado culpable del asesinato de un ex polic¨ªa en Irlanda del Norte, fue "insatisfactorio y sin las debidas garant¨ªas legales". Adem¨¢s de la incuantificable satisfacci¨®n moral, Hill recibir¨¢ la nada desde?able cantidad de medio mill¨®n de libras (100 millones de pesetas) como indemnizaci¨®n por los a?os pasados en la c¨¢rcel. El caso de los cuatro de Guildford, directamente conectado con el de los siete Maguire, ha sido recreado con un ¨¦xito comercial sin precedentes en la pel¨ªcula de Jim Sheridan En el nombre del padre.
Vestido con un elegante abrigo negro y flanqueado por su actual esposa, Courtney Kennedy -hija del asesinado fiscal general de EE UU Robert Kennedy-, y su hija Kara, Paul Hill recibi¨® sin sonrisas el veredicto del juez Hutton. "No necesitaba que nadie me dijera que soy inocente. Siempre lo he sabido. S¨®lo quer¨ªa o¨ªr esas palabras: 'El juicio fue insatisfactorio y sin las debidas garant¨ªas legales". En un sutil estilo judicial, el magistrado reconoci¨® tambi¨¦n como "una razonable posibilidad" el hecho de que el trato inhumano recibido por parte de la polic¨ªa "indujera al acusado a firmar una confesi¨®n inculpatoria en el invierno de 1974". Su propia confesi¨®n fue la ¨²nica prueba contra ¨¦l y la que decidi¨® a los jueces a sentenciarle a cadena perpetua.
La acusaci¨®n de rapto y asesinato del ex polic¨ªa Brian Shaw se produjo cuando ya Hill se enfrentaba a la justicia por un delito de terrorismo m¨¢s grave: la colocaci¨®n de varias bombas en pubs de Guildford y Woolwich, en 1974, con un saldo de seis muertos y decenas de heridos.
Una fecha siniestra el a?o 1974 para la capital brit¨¢nica, donde el IRA golpe¨® con tremenda dureza en atentados que se cobraron m¨¢s de 30 vidas. El caso de los cuatro de Guildford se sald¨® tambi¨¦n con la libertad en 1989 de todos los implicados, ycon el reconocimiento por parte de los magistrados brit¨¢nicos del error cometido, o, mejor dicho, del error al que presuntamente fueron inducidos por la incorrecta actuaci¨®n policial. Ese mismo error les cost¨® a cada uno de los cuatro irlandeses 15 a?os de sus vidas.
Nacido en Belfast en el seno de una humilde familia cat¨®lica, Paul Hill ten¨ªa 20 a?os y ninguna ocupaci¨®n conocida cuando fue detenido por la polic¨ªa brit¨¢nica en noviembre de 1974 bajo la acusaci¨®n de haber colocado varias bombas en pubs de las localidades de Guildford y Woolwich, a las afueras de Londres.
La misma noche de su detenci¨®n, el 28 de noviembre de 1974, Hill, presionado por la brutal intimidaci¨®n policial, admiti¨® los hechos y denunci¨® a otro compa?ero de colegio, Gerry Conlon. A partir de ah¨ª fueron cayendo m¨¢s nombres. El de Paddy Arrnstrong y su novia, la jovenc¨ªsima Carole Richardson. Y, finalmente, los t¨ªos de Gerry ConIon, los Maguire, y su propio padre, que falleci¨® -en prisi¨®n en 1980.
Paul Hill, que ha rehecho su vida en EE UU, se felicit¨® por el veredicto y asegur¨® ante decenas de periodistas que la justicia, la verdadera justicia, es uno de los pasos esenciales en la conquista de la paz en el Ulster.
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