Del Municipal a la alcald¨ªa
M¨¢s de 18.000 aficionados celebran la victoria en la calle.
La euforia inund¨® Legan¨¦s. Tanto dentro del Municipal como por todas las arterias de la ciudad s¨®lo hab¨ªa un grito: "Que bote Legan¨¦s, que bote Legan¨¦s". Las celebraciones comenzaron sobre el c¨¦sped, cuando el ¨¢rbitro decret¨® el final del partido.Los aficionados m¨¢s j¨®venes saltaron enseguida al campo para abrazar a los jugadores, pero el m¨¢s solicitado fue Luis ?ngel Duque, el t¨¦cnico pepinero. "Duque, Duque, Duque", gritaban todos. Algunos pretend¨ªan convertirle en cartel electoral: "Duque a la alcald¨ªa". Otros llegaron a m¨¢s: "Duque a La Moncloa". Y es que el entrenador del Lega suscita pasiones entre el p¨²blico. Le manosearon, le trituraron, le besaron.
El c¨¦sped era un mar humano. "Vamos a bailar un rock and roll a la plaza del pueblo", cantaban unos. Los m¨¢s optimistas gritaban: "Barga, Madrid, el Lega ya est¨¢ aqui". Y mientras las gargantas se romp¨ªan, algunos se dedicaban a rescatar un fetiche para el recuerdo: los mecheros y las navajas se usaban para cortar trozos de las redes de las porter¨ªas.
La masa rode¨® el t¨²nel de vestuarios y pidi¨®: "Que salgan los toreros". Y por megafon¨ªa anunciaban que la salida no se producir¨ªa hasta que el p¨²blico se retirara del c¨¦sped. Pero no se le pod¨ªa pedir eso a la gente. Quer¨ªan tocar a sus ¨ªdolos.
As¨ª que los h¨¦roes se decidieron a salir. La polic¨ªa form¨® una barrera pero ¨¦sta no tard¨® en vencer. Dorado, el cap?, a la cabeza, ped¨ªa paso. Le segu¨ªan Luis Ricardo, Antonio y Vivar. No les soltaron un segundo durante la triunfal vuelta al ruedo.
Duque hizo su vuelta de honor por libre. El primer saludo se lo di¨® a la pe?a El Muro, una de las m¨¢s fieles. Y la gente no le dejaba,caminar, se empe?aba en subirle a hombros. A pesar de su brazo en cabestrillo, aguantaba estoico la presi¨®n popular. Era el h¨¦roe. "Ahora a la plaza", animaba a los aficionados.
"El cipote"
Las pe?as pusieron un toque de color en el Estadio. Los carteles conten¨ªan mensajes variopintos en apoyo del equipo. "Un solo grito: Legan¨¦s", dominaba el fondo Sur. Pero algunos se adentraban en el terreno casi pornogr¨¢fico: "El Barca, de rebote, y el Lega con el Zipote (sic) ":La galer¨ªa de personajes que congreg¨® el encuentro tambi¨¦n fue variada. Alg¨²n chulap¨®n decidi¨® cambiar el chotis en honor a San Isidro por un buen meneo en las gradas del Municipal. El blanco vestido de comuni¨®n de una chiquilla no tard¨® en tomar el color del barrillo que formaba en el suelo, donde colillas pisoteadas y bocatas aplastados formaban una curiosa masa.
Tampoco falt¨® el hombre pl¨¢stico. Trajeado, impecable, no quiso perder el lustre y se enfund¨® un pl¨¢stico para recubrir colchones. Una ranurita de no m¨¢s de tres cent¨ªmetros le permit¨ªa respirar y seguir las evoluciones de Vivar y compa?¨ªa. Y otra m¨¢s le permit¨ªa acudir al improvisado urinario que se mont¨® en la parte trasera del estadio.
Desde el principio de la temporada los ultras han proliferado: Boys Legan¨¦s, Escuadra Lega, Secci¨®n Alcohol Boys, Casuals Legan¨¦s... Y la pe?a El Muro, con sus globos de colores.
Una hora despu¨¦s de finalizar el partido, la fiesta se apagaba en el campo de f¨²tbol, pero se trasladaba a las calles de la ciudad. Alrededor de 18.000 personas, seg¨²n cifras facilitadas por la polic¨ªa, celebraron anoche en las calles de Legan¨¦s el triunfo del Lega y su permanencia en Segunda.
En la plaza de Espa?a se congregaron m¨¢s de 7.000 para recibir al equipo despu¨¦s del partido. All¨ª estaban tanto los aficionados que hab¨ªan seguido el encuentro en el campo como los que lo vieron por televisi¨®n. En muchos bares se api?aba la gente para ver Telemadrid, que estaba haciendo un despliegue especial por la victoria del equipo pepinero. Gritos de "Tega, Lega", ba?os en la fuente de la plaza y onolear de banderas se sucedieron ininterrumpidamente durante los tres cuartos de hora que tardaron en llegar los primeros jugadores. El Ayuntamiento abri¨® sus puertas, como ya sucediera hace un a?o al conseguirse la promoci¨®n, y colg¨® de su fachada una gran pancarta blanquiazul de 10 x 7 metros en la que se le¨ªa "Viva el Legan¨¦s".
Bajo la lluvia, los aficionados .aguantaron estoicamente hasta que llegaron sus ¨ªdolos, Luis ?ngel Duque y la plantilla del club. Fueron recibidos con una clamorosa ovaci¨®n. Los aplausos se hicieron rotundos cuando se pronunciaron los nombres del portero Aguilera y el delantero Vivar, considerados los h¨¦roes de la jornada. Precisamente, Vivar fue el ¨²nico que estuvo ausente del balc¨®n de la Casa Consistorial. Tuvo que pasar el control antidopaje y seg¨²n se?al¨® Duque "es un me¨®n retardado". A los gritos de "Duque, alcalde" y "Duque, a la Moncloa" de la multitud, el entrenador contest¨®: "Hombre, no jod¨¢is". Luego a?adir¨ªa que hab¨ªan sido menospreciados por algunas capitales "que pensaban que ¨¦ramos una aldea, pues bien somos una aldea con dos cojones".
Para el alcalde, los aficionados del Lega ten¨ªan una petici¨®n que lanzaron en cuanto comenz¨® a hablar con gritos de "alcalde, taca?o, queremos un estadio". Jos¨¦ Luis P¨¦rez R¨¢ez se compromet¨ªa ante el p¨²blico que abarrotaba la plaza y se?alaba que "el a?o que viene en el estadio y en Primera". El entrenador no se ba?¨® al final en el pil¨®n (referencia de los aficionados a la fuente que ornamenta la plaza de Espa?a) porque se hab¨ªa lesionado la jornada anterior en una mano. Sin embargo, fueron muchos los j¨®venes que desafiaron las bajas temperaturas y la lluvia y se metieron en el agua.
Sobre las diez y media de la noche se apag¨® la fiesta, pero algunos aficionados continuaron la celebraci¨®n en los bares que rodean el casco de Legan¨¦s. El equipo se fue a celebrarlo ya en la intimidad en un local que precisamente lleva el t¨ªtulo de uno de sus rivales esta temporada, el Marbella.
Esta informaci¨®n ha sido elaborada por A. Rold¨¢n, J. Elola y C. Marcos.
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