Los m¨¦dicos incitan a denunciar las dietas que se anuncian como 'milagrosas'
Las dietas adelgazantes r¨¢pidas y definitivas no existen. Las que se anuncian as¨ª tienen un ¨²nico efecto duradero: el desequilibrio del organismo y los riesgos para la salud que ello acarrea, especialmente en periodos de crecimiento, esfuerzo f¨ªsico o ps¨ªquico y embarazo.Los expertos de la Sociedad Espa?ola. de Nutrici¨®n B¨¢sica Aplicada, en su reciente reuni¨®n en Madrid, calificaron a este tipo de dietas milagrosas de 'Traudes", cuya gravedad trasciende lo econ¨®mico porque, seg¨²n Mari¨¢ Alemany, de la Universidad de Barcelona, "se ceban en el desconocimiento y desesperaci¨®n de gente que se agarra a un clavo ardiendo".
Este catedr¨¢tico de bioqu¨ªmica y biolog¨ªa molecular, considerado uno de los principales investigadores espa?oles de la obesidad, asegura que de momento "el ¨²nico camino, largo y laborioso, son las dietas equilibradas bajas en calor¨ªas". Los expertos lamentaron que el Ministerio de Sanidad s¨®lo tenga capacidad de maniobra cuando las dietas son tratadas como actos m¨¦dicos o cuando el da?o ya se ha producido y animan al p¨²blico a "sospechar de todo aquello que se administre irregularmente [por correo, por fax o tel¨¦fono y a denunciarlo".
Alemany distingue entre un ligero sobrepeso, "que se corrige f¨¢cilmente con un r¨¦gimen adecuado" y los rebeldes casos de 11 obesidad masiva", con 50 o 60 kilos de m¨¢s. Tampoco es lo mismo "p¨¦rdida de peso" que de "grasa": lo primero lo logran muy r¨¢pido algunas dietas haciendo s¨®lo perder agua, que se recupera igual de deprisa. "Los primeros cinco kilos los venden gratis", dice este especialista; "el resto, a 23.000 pesetas cada uno".
Para Alemany, las m¨¢s peligrosas de estas dietas son las cetog¨¦nicas, en las que se puede comer gran cantidad de carnes y grasas (prote¨ªnas y l¨ªpidos), pero sin nada de pan, az¨²car, arroz o pasta (gl¨²cidos); as¨ª como las disociadas que no permiten mezclar en una comida estos componentes. Las m¨¢s conocidas son las llamadas Atkinson y Montignac.
"Las dietas cetog¨¦nicas, son incompletas; obligan al organismo a fabricar glucosa (nutriente indispensable) a partir de prote¨ªnas, y esto desencadena una serie de reacciones adversas. En conjunto se producen fuertes descensos de peso achacables sobre todo a la p¨¦rdida de agua y minerales esenciales. Representan, con las disociadas, un serio peligro para la salud", dice Alemany.
En la lista negra de este experto figuran igualmente, las "m¨¢gicas y las ABTT, siglas de al buen tun tun Son, por ejemplo, las dietas que se anuncian como "naturales," porque "todo lo que viene de la naturaleza es bueno"; las de fruta "que disuelven la grasa"; las "purificadoras que liberan al cuerpo de toxinas y sobre todo del pecado de la gula"; y las ex¨®ticas como las "alfab¨¦ticas".
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