Primera sanci¨®n muy grave para un vecino que abandon¨® a su perro

La multa ha sido publicada en el Bolet¨ªn Oficial de la Comunidad de Madrid y aprobada el pasado jueves por el Consejo de Gobierno. El expediente iniciado en el departamento de Protecci¨®n Animal contra Aniceto Amoril, vecino de Los Molinos, por dejar abandonado a su perro, ha llegado a las m¨¢s altas instancias. Es la primera vez que el Gobierno aut¨®nomo aplica la sanci¨®n m¨¢s grave prevista en la ley de protecci¨®n de animales dom¨¦sticos. En esta ocasi¨®n se ha limitado a la cuant¨ªa m¨¢s baja posible: 250.001 pesetas. Pod¨ªa haber alcanzado los cinco millones.Los funcionarios auton¨®micos que se dedican a recoger animales perdidos encontraron al perro de Aniceto el 26 de octubre. Estaba desamparado. Lo trasladaron a la perrera municipal de Cantoblanco, y en ella vivi¨® hasta que fue sacrificado. Nadie lo reclam¨®. El perro estaba identificado con una plaquita en la que figuraba el nombre y la direcci¨®n de su due?o.

Aniceto Amoril fue avisado repetidas veces y acus¨® recibo de los distintos escritos que le enviaron desde la Administraci¨®n aut¨®noma. Despu¨¦s se esper¨® 19 d¨ªas a su respuesta, el plazo que determina la Ley de Protecci¨®n de los Animales Dom¨¦sticos (1/1990), pero no la hubo. A partir de ah¨ª se inici¨® el procedimiento para fijar una sanci¨®n muy grave -pod¨ªa haber sido leve o grave- a la infracci¨®n de abandonar un animal dom¨¦stico, y continu¨® todo el tr¨¢mite obligatorio en estos casos: pliego de cargos, propuesta de resoluci¨®n. Se comunic¨® cada paso a Aniceto Amoril, pero ¨¦ste hizo caso omiso, seg¨²n Isabel Carpio, la responsable de la unidad administrativa creada en la Direcci¨®n Regional de Agricultura para llevar estos asuntos. Este peri¨®dico intent¨® ayer, sin ¨¦xito, localizar telef¨®nicamente al sancionado.

El nuevo negociado auton¨®mico ha preparado, adem¨¢s, un mecanismo que simplifica la forma reglamentaria para cumplimentar estas denuncias, hasta ahora redactadas por un procedimiento muy complejo que facilitaba defectos y errores.

El nuevo sistema, pensado en colaboraci¨®n con las sociedades protectoras de animales, ha dado ya sus frutos. En el primer cuatrimestre de 1994 se han registrado casi las mismas denuncias (200) que las 206 controladas durante todo 1993.