Empresa auxiliar pide auxilio
La mala suerte de Faica, una f¨¢brica, cuyos principales clientes eran Santana Motor y Ebro-Kubota
El drama de las peque?as industrias auxiliares en crisis de la regi¨®n tiene cientos de nombres. Uno de ellos es Fabricaci¨®n de Accesorios Industriales (Faica), con 46 trabajadores dedicados a la fabricaci¨®n de componentes de automoci¨®n a quienes febrero les trajo dos malas noticias. La suspensi¨®n de pagos de Santana Motor y el anuncio de cierre de Ebro Kubota. S¨®lo Ebro Kubota puede arrastrar 850 empleos de empresas auxiliares metal¨²rgicas establecidas en Madrid, seg¨²n datos de los sindicatos UGT y CC OO.La mala suerte se ha cebado en la cartera de pedidos de Faica. En 1993, el 68% de su producci¨®n era para Santana Motor -un 22% para el modelo Land Rover y un 46% para Vitara Samurai-, el 20% eran pedidos para la f¨¢brica de tractores de Ebro Kubota de Getafe (Madrid) y el 12% restante se salva de la quema japonesa porque son otros clientes diferentes, entre ellos Renault. Un a?o despu¨¦s, la producci¨®n se ha reducido al 12% desde el pasado mes de febrero. La cartera de pedidos podr¨ªa llegar al 50% cuando Santana Motor reinicie su actividad y encargue nuevas piezas a finales de junio. ?sa es su esperanza.
La direcci¨®n de Faica present¨® el pasado viernes ante la direcci¨®n provincial de Trabajo un expediente de extinci¨®n de 20 empleos, de los actuales 48, al no haber llegado a ning¨²n acuerdo con los representantes de los trabajadores durante el periodo de negociaciones.
Adem¨¢s, los seis contratos temporales que est¨¢n en vigor en la empresa (ubicada en Canillejas) no se van a renovar, seg¨²n informa el administrador de Falca, Fernando Villase?or. Ahora, la direcci¨®n provincial de Trabajo de Madrid debe aprobar o no este expediente que se present¨® sin acuerdo. Por si era poco hoy, uno de junio, acaban los tres meses de regulaci¨®n temporal de plantilla. Este expediente mandaba al desempleo cada mes al 33% de la plantilla. "Nos encontramos con toda la plantilla y no hay trabajo", explica el administrador quien a?ade que han iniciado una campana de captaci¨®n de nuevos clientes.
Faica llora sin fuerza, como todas las peque?as y medianas empresas auxiliares de grandes industrias que echan el cerrojo. Seg¨²n cuentan los trabajadores y la empresa, la crisis no hab¨ªa aparecido en 40 a?os por la f¨¢brica hasta que Santana Motor, en Linares (Ja¨¦n), suspendi¨® pagos el pasado 18 de febrero. Santana Motor les debe 82 millones de pesetas.
"Se junt¨® el hambre con las ganas de comer", cuenta Jes¨²s Garc¨ªa, soldador mec¨¢nico y miembro del comit¨¦ de empresa. Se refiere a otra mala noticia. El otro principal cliente para el que trabajaban decidi¨® hacer mutis por el foro. El anuncio del cierre de la f¨¢brica de tractores japonesa, Ebro Kubota, tambi¨¦n se produjo en febrero, el d¨ªa 25.
Los trabajadores de esta peque?a empresa sienten su desprotecci¨®n frente a las plantillas de grandes empresas. Un curtido sindicalista del metal de CC OO, dedicado a las peque?as y medianas (pymes) de Madrid, explica que el drama en las auxiliares es doble. Primero, porque su angustia no es espectacular en n¨²meros, como la de Santana o de Seat. Segundo, porque las condiciones econ¨®micas en las que despiden a los trabajadores est¨¢n a a?os luz de las grandes. Sin ir m¨¢s lejos, Ebro kubota ha pactado una indemnizaci¨®n de 2.430 millones de pesetas para 300 trabajadores. Y en Faica ofrec¨ªan 900.000 pesetas tras m¨¢s de 20 a?os en la empresa, comentan los afectados.
La Comunidad de Madrid est¨¢ buscando una soluci¨®n a las m¨¢s de 60 peque?as y medianas empresas auxiliares afectadas por el cierre de Ebro Kubota de las que Faica era la quinta proveedora por volumen de facturaci¨®n. A pesar de estos intentos, la direcci¨®n de la empresa tambi¨¦n achaca esta soledad. "Todo el mundo se preocupa de Santana, pero no de los proveedores", comenta el administrador.
El sentimiento es general entre los trabajadores. "Sumando todas las peque?as y medianas empresa somos muchos m¨¢s, pero a nosotros no se nos hace menci¨®n. No se puede ayudar siempre a las grandes".
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.