"Se ahorra mucho consumiendo cada cosa en su estaci¨®n"
Tarta de tortuga, tarta gato, espinacas Popeye con huevos de codorniz, caldo de escamas de drag¨®n, ensalada de cabeza de payaso, cestas de Caperucita o Chupa Chups de carne en salsa, es decir, alb¨®ndigas aderezadas de ocurrencia, son platos incluidos en El libro de los men¨²s, escrito por In¨¦s Ortega, que incluye un apartado pensado para abrir el herm¨¦tico apetito de los preadolescentes. Una minuta que huele al inocente juego de las cocinitas, a ni?a pegada a las faldas de mam¨¢, detalle que no tendr¨ªa m¨¢s importancia si In¨¦s Ortega no fuera la hija de Simone, autora de Las mil ochenta recetas, una verdadera biblia para los guisanderos. F¨¢ciles, pr¨¢cticos e imaginativos son, seg¨²n la autora, los platos del recetario. No faltan ex¨®ticos sabores de otras tierras, sukis yakes, sushis, tacos mexicanos y chucruts; delicias que recargan bater¨ªas a la tercera edad, energ¨¦ticas recetas para el estir¨®n del estudiante y, naturalmente, una serie de platillos para estancarse en la talla de los 20 a?os. Si suena bien, mejor sabr¨¢.
Pregunta. Todo dirigido, otra vez, a las amas de casa.
Respuesta. Pues creo que s¨ª, aunque puede serle muy ¨²til a la gente joven, por ejemplo, a una futura esposa que no tiene demasiada experiencia en c¨®mo organizar la comida del d¨ªa a d¨ªa.
P. La rutina sigue siendo para la mujer, mientras el hombre se pone el delantal s¨®lo para lucirse en ocasiones especiales.
R. Afortunadamente, cada d¨ªa entran m¨¢s hombres en la cocina de una forma cotidiana. Suelen ser j¨®venes, casados con mujeres que trabajan tanto como ellos, e incluso llegan mucho m¨¢s tarde a casa. Pero para hablar de una igualdad total creo que falta mucho tiempo.
P. ?Es cierto que la comida entra siempre por los ojos?
R. Absolutamente, por eso hay que buscar la mejor presentaci¨®n, y ah¨ª est¨¢n los diferentes apartados del libro. Digamos que ordena los platos en funci¨®n de las edades de sus destinatarios, incluyendo recetas para guardar la l¨ªnea.
P. El profesor Grande Covi¨¢n asegura que el ¨²nico alimento que no engorda es el que queda en el plato.
R. Sabia apreciaci¨®n que apoyan muchos otros especialistas. Te dir¨¦ que tanto mi madre como yo somos dos personas que cocinamos a diario, comemos de todo y, sin embargo, estamos delgadas sin hacer dietas. El problema es cuando se tiende a tomar siempre lo mismo, prescindiendo de cosas tan b¨¢sicas como la verdura o la fibra. Comiendo bien, la gente est¨¢ m¨¢s contenta.
P. Los gorditos han sido siempre la imagen de la felicidad.
R. Los gorditos pueden ser dichosos; los obesos, no. Son cosas diferentes.
P. Usted recomienda la cocina de temporada.
R. Absolutamente. S¨¦ que en Madrid, cuyos mercados son excelentes, se encuentran fresas en verano y pepinos en invierno, pero hay que pensar en lo mucho que se ahorra consumiendo cada cosa en su estaci¨®n.
P. ?Es realmente relajante meterse en la cocina?
R. Para m¨ª lo es; otras personas prefieren hacer punto. Por eso es importante demostrar que el d¨ªa a d¨ªa no tiene por qu¨¦ ser m¨¢s rutinario.
P. ?Le ha gustado a su madre este libro?
R. S¨ª, le ha gustado much¨ªsimo.
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