Gonz¨¢lez reitera su apoyo al primer ministro holand¨¦s para presidir la Comisi¨®n

Ser¨¢ dif¨ªcil que haya fumata blanca con la que los Doce anunciar¨ªan el nuevo presidente de la Comisi¨®n Europea. Los jefes de Estado y de Gobierno de la Uni¨®n Europea (UE) que asisten a la cumbre que comienza hoy en la isla griega de Corf¨² est¨¢n a¨²n muy divididos sobre el sustituto de Jacques Delors, que dejar¨¢ el cargo el 5 de enero. El presidente del Gobierno espa?ol, Felipt,- Gonz¨¢lez, reiter¨® su apoyo a su hom¨®logo democristiano holand¨¦s, Ruud. Lubbeni, pero la mayor¨ªa propone al primer ministro belga, Jean-Luc Dehaene.

El primer ministro griego, Andreas Papendreu, puso ayer toda la carne en el asador para intentar concluir su ¨²ltima presidencia de la UE con ¨¦xito, es decir con la designaci¨®n por la cumbre de un presidente del ¨®rgano ejecutivo de la Uni¨®n. En los contactos previos Papandreu presion¨® a sus socios, secundado por el canciller alem¨¢n, Helmut Kohl, quien no desea que su etapa al frente de la UE, a partir de julio, resulte enturbiada por una reuni¨®n extraordinaria para adoptax la decisi¨®n que no pudo ser tomada en Corf¨²."Supondr¨¢ para m¨ª un fracaso si no conseguimos ponernos de acuerdo durante esta cumbre sobre una cuesti¨®n tan importante", admiti¨® Papandreu en la conferencia de prensa que dieron los dirigentes del Partido de los Socialistas Europeos (PSE) al t¨¦rmino de su tradicional encuentro semestral. Quiso compartir de antemano la responsabilidad de un posible fiasco: "Este asunto no es s¨®lo competencia de la presidencia".

Para facilitar un compromiso Grecia no ha propuesto a ning¨²n candidato y se limita a buscar un consenso partiendo de la base que Dehaene cuenta con un respaldo m¨¢s amplio que su rival holand¨¦s, y que el comisario conservador brit¨¢nico Leon Brittan s¨®lo es secundado por el Reino Unido e Italia.

Lo importante no son tanto los apoyos sino los vetos. Resentido por su actitud ante la unificaci¨®n alemana, Kohl parece dispuesto a impedir el acceso de Lubbers a la presidencia, mientras el italiano Silvio Berlusconi y el brit¨¢nico John Major se oponen a Dehaene. El primero lo hace, acaso, para subrayar que su pa¨ªs ha dejado de someterse a las decisiones de los dem¨¢s, en tanto que el segundo padece la presi¨®n del sector euroesc¨¦ptico de los conservadores que considera al l¨ªder belga demasiado europe¨ªsta.

Al abordar este tema, Gonz¨¢lez volvi¨® ayer al punto de partida pero con matices. Confirm¨® su apoyo al primer ministro holand¨¦s, pero se mostr¨® tambi¨¦n dispuesto a aceptar para el cargo a su adversario belga cuya candidatura apadrinan su amigo Kohl y el presidente franc¨¦s, Fran?ois Mitterrand. "Tengo un compromiso con Lubbers, pero creo que Dehaene podr¨ªa hacerlo perfectarnente", declar¨® el presidente espa?ol.

Hace cinco meses Gonz¨¢lez fue el primer jefe de Gobierno europeo en tomar partido en la carrera por la presidencia al pronunciarse a favor de Lubbers, que ni siquiera era entonces candidato. Desde entonces la diplomacia espa?ola ha enviado mensajes ambiguos sobre las preferencias, del presidente del Ejecutivo de los que se deduce, sin embargo, que, a pesar de sus simpat¨ªas por su hom¨®logo holand¨¦s, Gonz¨¢lez no pondr¨¢ pegas a Dehaene y s¨®lo rechaza a Brittan.

Los responsables del PSE eligieron a la brit¨¢nica Pauline Green presidenta del grupo parlamentario socialista, el m¨¢s numeroso en la Euroc¨¢rnara, en lugar del franc¨¦s Jean Pierre Cot, y al espa?ol Juan Cornet, secretario general del grupo.