Los editores piden que la compra de libros desgrave en la declaraci¨®n de la renta

Las editoriales espa?olas quieren que los mejores lectores paguen menos impuestos. El Primer Congreso de Editores Espa?oles, clausurado ayer en Granada, elev¨® al Ministerio de Econom¨ªa y Hacienda una petici¨®n para que en la nueva regulaci¨®n del impuesto de la renta se incluya como deducci¨®n, en un porcentaje a determinar, los gastos en libros destinados a la biblioteca familiar. Los congresistas exigieron que la edici¨®n institucional se rija por los principios de utilidad y transparencia para no entorpecer "la leg¨ªtima actividad de los editores privados".

Los editores no ven dificultades para que se aplique la desgravaci¨®n por compra de libros, especialmente sobre los vol¨²menes de inter¨¦s profesional y sobre aquellos de obligatoria adquisici¨®n, como los libros de estudio para escolares o universitarios. El presidente de los editores, Ferm¨ªn Vargas, dijo que se deben eliminar todas las trabas para lograr la difusi¨®n del libro, incluidas las fiscales, y el representante del ministerio de Econom¨ªa que ha intervenido en el congreso prometi¨® estudiar la petici¨®n.Dentro del ¨¢mbito fiscal, los editores pidieron que tanto los derechos de autor como los premios literarios repercutan sobre el impuesto de la renta espaciosamente, en concreto durante cinco a?os. Tambi¨¦n estiman que la reciente ley del Mecenazgo incluya la posibilidad de cancelar deudas impositivas mediante la donaci¨®n de libros destinados a las bibliotecas p¨²blicas.

Ayudas

Respecto a la edici¨®n institucional, los profesionales pretenden que las Administraciones se ci?an a una labor de ayuda a la edici¨®n privada y, en el peor de los casos, copubliquen con las empresas aquellos libros que estimen necesarios. El congreso invit¨® a las editoriales universitarias a mantener una serie de reuniones con las privadas para fomentar programas conjuntos en el campos de la defensa de los derechos de autor, la lucha contra la reprograf¨ªa y la promoci¨®n del libro.Precisamente el problema de la reproducci¨®n indiscriminada de libros mediante fotocopias ha sido incluido entre las conclusiones del congreso. En concreto, los editores quieren reforzar la autoridad del Centro Espa?ol de Reprograf¨ªa para autorizar la apertura de copister¨ªas "como testimonio de su respeto a los derechos de autor y edici¨®n" y que los tribunales judiciales cuiden con rigor el cumplimiento de la ley de Propiedad Intelectual.

Las bibliotecas como centro de formaci¨®n de futuros lectores es objeto de atenci¨®n especial en la resoluci¨®n del congreso. Los editores creen que igual que se ha extendido el uso de las instalaciones deportivas escolares a otros grupos ciudadanos, las bibliotecas escolares funcionen fuera de las horas lectivas. Para facilitar el acceso a todas las bibliotecas p¨²blicas los editores han pedido al Gobierno que elabore un plan nacional de centros de lectura y asigne a cada uno recursos para la adquisici¨®n de fondos bibliogr¨¢ficos.

Los congresistas reiteraron su apoyo al precio fijo de los libros "por razones de pol¨ªtica cultural". Respecto a la distribuci¨®n del libro, el congreso pidi¨® que se reactive una comisi¨®n interministerial ya existente y que se cree una oficina internacional de promoci¨®n del mercado espa?ol.

Tambi¨¦n se mostraron favorables a cualquier iniciativa que estimule la exportaci¨®n y, en concreto, aquellas que reduzcan el precio de los seguros y las tarifas del transporte a¨¦reo. Los editores se mostraron preocupados por la repercusi¨®n negativa que para la libre difusi¨®n del libro pueden tener los recientes acuerdos del GATT.