El meteorito ca¨ªdo sobre un coch¨¦ en marcha en Madrid es un caso ¨²nico, seg¨² los cient¨ªficos

El meteorito que el pasado 20 de junio cay¨® en Madrid sobre un coche que circulaba por la carretera de Andaluc¨ªa fue donado ayer al Museo de Ciencias Naturales. Jos¨¦ Luis Mart¨ªn, quien vi¨® "una piedra negra que entraba por el parabrisas" de su BMW, estuvo ayer en el museo con su dedo roto, fruto del roce con el pedrusco, Los expertos se?alan que no se conoce otro caso en que un meteorito haya impactado en un autom¨®vil en marcha. Dentro de unos d¨ªas, los cient¨ªficos confirmar¨¢n el origen extraterrestre del objeto y lo clasficar¨¢n seg¨²n su composici¨®n.

Si se confirma su origen extraterrestre, el meteorito terminar¨¢ definitivamente su largo viaje desde el cintur¨®n de asteroides que rodea el Sol entre los planetas Marte y J¨²piter hasta Madrid (provincia donde el ¨²ltimo meteorito conocido cay¨® hace casi 100 a?os) en una buena colecci¨®n, la del Museo de Ciencias Naturales. A falta de determinar la exacta procedencia del objeto, la f¨®rmula empleada en el acto de ayer fue "donaci¨®n de una roca de presunto origen meteor¨ªtico procedente de Getafe".Jos¨¦ Luis Mart¨ªn, un espa?ol que vive en Estados Unidos, dijo, respecto al objeto estelar: "Ahora es cuando realmente nos produce emoci¨®n", en referencia a ¨¦l y a su esposa, Vicenta, que le acompa?aba. Mart¨ªn luce una escayola en su mano derecha, pues el asteroide le fractur¨® el hueso y los ligamentos del dedo me?ique: "Lo ¨²nico que recuerdo es haber visto la piedra durante d¨¦cimas de segundo encima de mis ojos y el golpe en el cristal", se?ala, y reconoce que es inexplicable que no se estrellaran.

Cristal fundido

El meteorito atraves¨® el parabrisas del autom¨®vil, f¨²ndiendo el cristal, golpe¨® en el salpicadero y el volante, dobl¨¢ndolo, y rebot¨® en el techo antes de quedar alojado en la bandeja trasera donde rompi¨®. el altavoz de la radio, el faro central indicador del uso de los frenos y una c¨¢mara fotogr¨¢fica. "No se nos ocurri¨® que se trataba de un meteorito hasta que alguien lo coment¨® cuando regresamos del hospital", confes¨® Mart¨ªn.

Tras el impacto "tuvimos la intenci¨®n de tirarlo porque lo odi¨¢bamos", apuntaron ambos y aseguraron que no hab¨ªa ning¨²n cami¨®n ni edificio en las cercan¨ªas del suceso. "Ya hab¨ªa visto meteoritos antes pero sin mucho detalle", se?al¨® Mart¨ªn, refiri¨¦ndose a la colecci¨®n de la Smithsonian Institution en Washington, donde vive.

Los cient¨ªficos del Museo Nacional de Ciencias Naturales han fotografiado el supuesto meteorito, que mide unos 13 por 8 por 8,5 cent¨ªmetros y pesa casi kilo y medio, desde todos los ¨¢ngulos. Ahora van a extraerle una peque?a l¨¢mina para estudiar su composici¨®n por varios m¨¦todos. Los elementos qu¨ªmicos que contienen los meteoritos y sus concentraciones son muy importantes el Pueblo , recuerda que Espa?a tiene suscritos varios tratados internacionales que "obligan de una manera especial al Estado a preservar en todo caso la condici¨®n del menor de edad, sea cual sea su raza, condici¨®n u para su clasificaci¨®n Mientras tanto, no se atreven siquiera a asegurar que -es un meteorito, pero est¨¢n encantados de tenerlo entre ellos. Jes¨²s Mart¨ªnez Fr¨ªas, ge¨®logo, explica que el ¨²ltimo meteorito que lleg¨® al museo data de 1947 y proced¨ªa de Le¨®n. La colecci¨®n del museo es conocida por su calidad. Consta de 217 espec¨ªmenes, procedentes de 155 meteoritos, de los cuales 32 son espa?oles. El m¨¢s antiguo de ¨¦stos data de 1773 y cay¨® en Sena (Huesca). Ignacio Mendoza, que accidentalmente se encontraba a al Gobiernos sin protecci¨®n la normativa interna espa?ola" ya que tanto el estatuto del ministerio fiscal como el C¨®digo Civil expresan claramente, "la obligaci¨®n que tienen todas las autoridades de prestar una especial protecci¨®n al menor, m¨¢xime cuando ¨¦ste se encuentra desamparado".

La instituci¨®n firma que ha comprobado que en los ¨²ltimos meses se han producido varios casos en los que la Administraci¨®n ha aplicado la ley de Extranjer¨ªa contra ni?os o contra sus padres, "sin que se hayan observado las necesarias garant¨ªas ayer en el museo para dar una conferencia, fue testigo de la donaci¨®n. Mendoza, que trabaja en la Universidad de Chicago, es un experto en meteoritos y fue uno de los que clasificaron a finales de los ochenta la colecci¨®n del museo en la universidad de Nuevo M¨¦xico. Tambi¨¦n clasific¨® un meteorito que cay¨® hace unos dos a?os encima de un coche parado, en Estados Unidos. El coche y la piedra terminaron en manos de coleccionistas, porque la legislaci¨®n es distinta a la espa?ola, que considera a los meteoritos patrimonio nacional.Ayer, Mendoza se?al¨® que no conoce otro caso de un impacto sobre un veh¨ªculo en marcha y explic¨® que la ca¨ªda de meteoritos -sean grandes o peque?os- es un fen¨®meno ca¨®tico, por lo que no se puede hablar de probabilidades. El personalmente utiliza meteoritos muy antiguos -condritas carbon¨¢ceas, de hace unos 4.600 millones de a?os- para obtener datos sobre c¨®mo se fue, enfriando la nebulosa de la que procede el sistema solar.Tambi¨¦n el cocheEn un plano m¨¢s pragm¨¢tico, el Museo de Ciencias Naturales est¨¢ hablando con la marca BMW sobre la cesi¨®n del autom¨®vil que sufri¨® el impacto. Carmen Prat, vicedirectora y encargada de las exposiciones del museo, ha reconocido "el inter¨¦s de este museo por disponer del meteorito, del coche y montar una exposici¨®n, aunque el museo no se puede gastar un duro en la adquisici¨®n del autorn¨®vil". Por su parte, Martin cree que "ser¨ªa una cosa maravillosa que el coche se quedara aqu¨ª, aunque yo no puedo prescindir de ¨¦l". El seguro del autom¨®vil ha aceptado hacerse cargo de su reparaci¨®n aunque la causa sea extraterrestre.