Aznar re¨²ne en secreto a la c¨²pula de su partido para preparar el pr¨®ximo curso

Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar se marcha de vacaciones, pero antes quiere dejar la casa arreglada. Convocados por el presidente del PP, una decena de dirigentes celebraron ayer y anteayer una cumbre secreta fuera de Madrid para preparar el ¨²ltimo trimestre pol¨ªtico y dise?ar la estrategia hasta las elecciones de mayo. Encuestas en mano, los reunidos estudiaron lo que interpretan como un riesgo de fragmentaci¨®n del PSOE y las consecuencias pol¨ªticas de un aumento de las tensiones territoriales en la familia socialista.

Fuentes del PP explicaron la reuni¨®n como un balance del semestre terminado y una preparaci¨®n del actual. "Aqu¨ª el 1 de septiembre todo el mundo va a estar en campa?a electoral, lo confiese o no", indicaron, "y hay que estar preparados". Aznar convoca este c¨®nclave o sanedr¨ªn con cierta periodicidad y con la pretensi¨®n de confrontar ideas y fijar l¨ªneas y objetivos a medio plazo.De una reuni¨®n similar a la de los dos ¨²ltimos d¨ªas, a finales del a?o pasado, sali¨® la consigna del l¨ªder del PP para suspender desde el 1 de marzo toda negociaci¨®n p¨²blica con el Gobierno. El agotamiento de este plazo dio al traste con las conversaciones sobre el llamado impulso democr¨¢tico.

En esta ocasi¨®n, Aznar intenta conseguir que el partido no se duerma ni se deje emborrachar por la victoria del 12 de junio. "Est¨¢ empe?ado en ponernos las pilas a todos", afirman sus colaboradores.

Tomando como base las ¨²ltimas encuestas, la c¨²pula del PP aprecia una acentuaci¨®n de la tendencia regresiva del PSOE. En algunas comunidades, como Madrid y Galicia, afirman, el partido socialista corre el riesgo de convertirse en tercera fuerza, detr¨¢s de IU y el Bloque Nacionalista Galego, respectivamente.

A esta situaci¨®n poco halag¨¹e?a, seg¨²n la direcci¨®n del PP, se unen las tensiones internas y "riesgos de fragmentaci¨®n". Los populares interpretan en esta clave la reciente guerra del agua y el enfrentamiento entre el presidente de Castilla-La Mancha y sus compa?eros de partido de Murcia y la Comunidad Valencia.

"El problema de Bono no es el agua", declar¨® ayer uno de los asistentes a la cumbre de los populares, "sino que Felipe Gonz¨¢lez y la sigla PSOE han dejado de garantizar el ¨¦xito electoral. Ahora cada uno intenta salvarse solo".

Para el PP, el enfrentamiento entre presidentes auton¨®micos socialistas confirma una preocupaci¨®n expresada por Aznar en los ¨²ltimos meses, sobre el riesgo de divisiones territoriales en el PSOE. Cuando Aznar habla de "fuerzas pol¨ªticas nacionales" est¨¢ pensando, seg¨²n los dirigentes del PP m¨¢s pr¨®ximos, en la necesidad de evitar que los barones socialistas "escojan el camino de Jordi Pujol" cuando llegue el momento de la derrota.

Esta preocupaci¨®n "no es una venganza", aseguran, por los an¨¢lisis que hasta el a?o pasado dudaban de la capacidad del PP para vertebrar Espa?a, dada su precariedad electoral en algunas comunidades aut¨®nomas. Aznar y la c¨²pula del PP creen que el proceso de aparici¨®n de peque?as fuerzas regionalistas o nacionalistas que ha sufrido el centro derecha en los ¨²ltimos a?os puede reproducirse en la izquierda y que "ser¨ªa un riesgo".