Preparados para, resistir
El hombrecillo de pelo cano no logra hacerse con el "?Presenten armas!" que ordena a voz en cuello un sargento de gran barriga. Su escasa habilidad con el fusil exaspera al militar, que a¨²lla y se hincha hasta casi hacer saltar los botones de su camisa. Unas 2.000 personas se re¨²nen cada d¨ªa en Oxyde Jeanty, un parque en el centro de la capital haitiana, para recibir entrenamiento. Son los "grupos de resistencia patri¨®tica" civiles que acuden, por vocaci¨®n. o por aburrimiento, a la llamada de las organizaciones paramilitares para luchar contra los marines estadounidenses.En el parque se dividen en grupos y durante unas cuatro horas desfilan con mayor o menor ¨¦xito, se ponen a cuatro patas y se retuercen por los suelos. Hay j¨®venes y ancianos, hombres y mujeres. Los vendedores de bebidas acuden tambi¨¦n a la cita, que se ha convertido ya en un espect¨¢culo matutino.
Desde el lunes, los entrenamientos se hacen con armas: fusiles M-1 norteamericanos, s¨ªmbolo del apoyo prestado desde hace 80 a?os por Estados Unidos al Ej¨¦rcito haitiano. Apoyo que, seg¨²n algunas fuentes cercanas al Gobierno, se mantiene intacto hasta hoy.
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