"El marat¨®n de Madrid es demasiado duro"

De los tres fue el tercero en llegar, pero se le recibi¨® como a un triunfador. De ¨¦l depend¨ªa hacer historia. Tres espa?oles en el podio del marat¨®n, hecho in¨¦dito en los 98 a?os que esta carrera se lleva disputando, y uno de ellos, Alberto Juzdado (el s¨¢bado cumple 28 a?os), nacido y residente en Boadilla del Monte, "pueblo, pueblo", recalca.Pregunta. Nada como ser de pueblo para ser campe¨®n, ?verdad?

Respuesta. Nada como vivir con tranquilidad, sin los inconvenientes de la gran ciudad. El pueblo te proporciona sosiego y te estira el tiempo. Puedes entrenarte, trabajar, leer, ver la televisi¨®n...

P. Al trabajo, por supuesto, va andando.

R. Antes s¨ª. La empresa de escayola donde trabajo est¨¢ a un kil¨®metro de mi casa, y te vas haciendo c¨®modo. Tienes coche, y si puedes tardar un minuto, mejor que diez.

P. ?Correr, cu¨¢ndo y d¨®nde?

R. Antes o despu¨¦s del trabajo. Generalmente, por los caminos que van al monte desde el pueblo. A veces, tambi¨¦n en la Casa de Campo, que es un lujo que tiene Madrid, y por la sierra, entre Navacerrada y Cotos. Incluso llego hasta Valdesqu¨ª para hacer 30 kil¨®metros. No todas las ciudades tienen tantos parajes para correr como Madrid; perdi¨¦ndote por los caminos se acaban encontrando estupendos lugares donde entrenarse.

P. ?Al hablar de tantas maravillas naturales no se referir¨¢ al casco urbano?

R. No, por supuesto, digo los alrededores. Madrid, ciudad, acaba agobiando. S¨®lo el aire que se respira ahoga. Cuando tengo que ir a la ciudad pongo la radio para ver c¨®mo est¨¢ el tr¨¢fico de entrada y quedo espantado. Se tarda m¨¢s de una hora en llegar, m¨¢s que cuando voy corriendo hasta la Casa de Campo, y eso que no voy en l¨ªnea recta.

P. ?C¨®mo le dio por correr, porque Madrid no es precisamente cuna de buenos corredores?

R. Por las fiestas de Boadilla y los pueblos de alrededor. Se organizaban carreras populares y yo las ganaba todas. Lo de ganar un trofeo en cada una de ellas me hac¨ªa ilusi¨®n hasta que mi actual entrenador me vio y me propuso hacer atletismo en serio.

P. Pero no por ello ha dejado de trabajar.

R. No, porque hasta ahora no he ganado apenas dinero con el atletismo. Ahora parece que me garantizar¨¢n una cierta cantidad con la que podr¨ªa vivir [4,2 millones al a?o], pero s¨®lo hasta 1996, cuando se celebren los Juegos Ol¨ªmpicos. Es demasiado riesgo dejar un puesto fijo de trabajo por dos a?os de dedicaci¨®n plena al deporte. Pero yo creo que, tal y como tengo planteada mi vida, puedo hacer compatible trabajo y entrenamientos.

P. ?Su pr¨®ximo marat¨®n ser¨¢ el de Madrid?

R. Es demasiado duro. No creo. Nunca he corrido en Madrid, pero lo har¨¦ alg¨²n a?o. Ahora tengo que aprovechar para conseguir grandes marcas, y los recorridos de Boston o Londres son m¨¢s propicios para ello. El a?o que viene hay Mundiales y hay que estar en forma.

P. ?Quiere decir que piensa ganar a los africanos o a los japoneses?

R. ?Por qu¨¦ no? Las marcas que hicimos en los Europeos valen para ganar a cualquiera. En ese sentido s¨ª que soy ambicioso.

P. Pues en Helsinki demostr¨® gran timidez al renunciar a asistir a la fiesta en la que estaban los mejores atletas de los campeonatos.

R. Es que era una fiesta para las estrellas. Nosotros somos atletas-obreros.