La polic¨ªa francesa detiene a la etarra Idoia L¨®pez Ria?o, acusada de 23 asesinatos

La abultada historia de asesinatos de Idoia L¨®pez Ria?o, una mujer alta y atractiva, de grandes ojos verdes y de 30 a?os, se frustr¨® ayer con su detenci¨®n por la polic¨ªa francesa. Idoia, alias Margarita, acusada de 23 asesinatos, conduc¨ªa ayer por la tarde un autom¨®vil cerca de Aix-en-Provence y llevaba encima una pistola Browning, adem¨¢s de unos papeles falsos que la acreditaban como una residente del Pa¨ªs Vasco. A su lado, un hombre franc¨¦s, cuya identidad no ha sido revelada. A Margarita, conocida tambi¨¦n como La Tigresa, le pisaban los talones la Polic¨ªa Judicial francesa y agentes espa?oles.

La cara de Idioa L¨®pez Ria?o, enmarcada en una melena rizada, resultaba familiar en aeropuertos y comisar¨ªas. Era una "peligrosa terrorista". L¨®pez Ria?o ser¨¢ trasladada en las pr¨®ximas horas a Par¨ªs para ser puesta a disposici¨®n de la juez especial encargada de delitos terroristas, Laurence Le Vert, seg¨²n informaron fuentes policiales."Existen ¨®rdenes estrictas", arguy¨® un portavoz del Ministerio franc¨¦s del Interior, "de no hablar con la Prensa hasta ma?ana [por hoy]. De esa forma, el ministerio galo se neg¨® a facilitar detalles m¨¢s concretos sobre la detenci¨®n de la peligrosa terrorista.

Los ¨²nicos datos concretos conocidos se refer¨ªan a que llevaba una pistola y documentaci¨®n falsa de identidad. La Tigresa cumpl¨ªa de esta forma la norma habitual de los etarras que, cuando se mueven por Francia, siempre llevan encima armas de fuego, con el objeto de forzar su juicio por tenencia il¨ªcita de armas en el pa¨ªs vecino y evitar la inmediata extradici¨®n a Espa?a.

Irene Idoia L¨®pez Ria?o naci¨® en San Sebasti¨¢n el 19 de marzo de 1964. Sus padres eran unos emigrantes salmantinos y ella se cri¨® en Renter¨ªa (Guip¨²zcoa) hasta llegar a ser una joven decidida, vinculada a grupos abertzales. Su madre, asistenta, es simpatizante de la organizaci¨®n radical Herri Batasuna (HB).

La hija empu?¨® la pistola y se integr¨® en un comando legal a la edad de 18 a?os. Por entonces gritaba en las manifestaciones consignas contra la polic¨ªa y era amante de un guardia civil que se enter¨® por la Prensa de que su novia estaba en las filas del comando Oker, al que se le atribu¨ªan tres asesinatos: el de un ciudadano franc¨¦s, un marinero al que ETA relacionaba con el narcotr¨¢fico y un agente del Cuerpo Nacional de Polic¨ªa. El comando fue desarticulado en 1985 y operaba en Guip¨²zcoa.

Tan s¨®lo cinco meses m¨¢s tarde, integrada ya en el comando Madrid, se le acus¨® de otros 20 asesinatos, todos ellos cometidos entre abril y septiembre de 1986. La mayor¨ªa de esos cr¨ªmenes los realiz¨® con su participaci¨®n en la colocaci¨®n de dos coches bomba en Madrid. Uno de ellos en la plaza de la Rep¨²blica Dominicana, que acab¨® con la vida de 14 guardias civiles e hiri¨® a 45 personas. El otro, en la calle de Jorge Juan, donde murieron cinco guardias civiles.

Con lanzagranadas

La peligrosa etarra particip¨® tambi¨¦n, seg¨²n la investigaci¨®n, en el lanzamiento de granadas contra el Ministerio de Defensa en Madrid, cuya fachada qued¨® ligeramente da?ada. Uno de los artefactos penetr¨® dentro del edificio oficial, aunque no caus¨® da?os. Otra choc¨® cerca de un autob¨²s urbano, pero no estall¨®.

Se le considera, adem¨¢s, autora material de los asesinatos del teniente coronel Carlos Besteiro, el comandante Ricardo Sa¨¦nz de Ynestrillas y el conductor Francisco Casillas Mart¨ªn, abatidos a tiros en sus veh¨ªculos.

En uno de esos atentados, La Tigresa estaba encargada de cubrir la retirada del comando. Sin embargo, y rompiendo la disciplina de la organizaci¨®n terrorista, se sum¨® espont¨¢neamente al grupo que disparaba, li¨¢ndose a tiros con los militares. Fue la gota que colm¨® el vaso de sus mandos terroristas. En septiembre de 1986, fue apartada del comando Madrid por ¨®rdenes de la c¨²pula etarra. Pese a todo, nunca se someti¨® a la disciplina de la organizaci¨®n terrorista.

Otra versi¨®n sobre la decisi¨®n de la organizaci¨®n terrorista consisti¨® en que la joven era demasiado aficionada a las discotecas y a las compa?¨ªas masculinas.

Con posterioridad a estas fricciones internas, Idoia L¨®pez Ria?o estuvo refugiada en Argelia y en el sur de Francia.

Pelea con Urrusolo

Entre los a?os 1990 y 1992 integr¨® el comando itinerante, que dirigi¨® Jos¨¦ Luis Urrusolo Sistiaga y que fue responsable de numerosos asesinatos entre finales de 1991 y comienzos del 1992. A ra¨ªz de la detenci¨®n de la c¨²pula de ETA, en marzo de 1992, se supo, a trav¨¦s de documentos intervenidos a los etarras, que La Tigresa manten¨ªa informados a los jefes de la organizaci¨®n de los comentarios cr¨ªticos que hac¨ªan sus compa?eros de comando, hecho que acab¨® enfrent¨¢ndolo con Urrusulo, y a ¨¦ste con el entonces n¨²mero uno de ETA, Francisco M¨²gica Garmendia, Pakito.