La ONU insta a los Gobiernos a fomentar la cualificaci¨®n del empleo para atraer inversiones de multinacionales

S¨®lo la capacitaci¨®n de los trabajadores de un pa¨ªs podr¨¢ persuadir a las grandes empresas transnacionales para invertir all¨ª en actividades con alto valor a?adido. As¨ª lo afirm¨® ayer el catedr¨¢tico de Econom¨ªa y consejero del Banco de Espa?a, Julio Segura, en la presentaci¨®n de un informe de La Conferencia para el Comercio y el Desarrollo de las Naciones Unidas (UNCTAD) sobre la influencia en el empleo de la globalizaci¨®n de la econom¨ªa."Si la cualificaci¨®n de la mano de obra se convierte en la clave para atraer las inversiones mundiales", dijo Segura, "las transnacionales habr¨¢n hecho un servicio al mercado de trabajo". El consejero se declar¨® opuesto a la desregulaci¨®n de la econom¨ªa. "Liberalizar", asegur¨®, "es regular m¨¢s y mejor". La libre competencia, seg¨²n ¨¦l, es incompatible con la gran acumulaci¨®n de poder de las transnacionales.

La facultad de estas empresas para desplazar a voluntad sus inversiones ejerce sobre los pa¨ªses destinatarios una presi¨®n que, seg¨²n Segura, est¨¢ cambiando de car¨¢cter. El dumping social -oferta de mano de obra barata- est¨¢ cediendo terreno a factores como la calidad de los transportes y comunicaciones y la disponibilidad y capacitaci¨®n de la mano de obra. Para Segura, ello implica que "los sindicatos de un pa¨ªs no podr¨¢n hacer cosas muy diferentes a los del pa¨ªs vecino".

Las ventas de las, empresas transnacionales superan los 4,8 billones de d¨®lares (m¨¢s de 600 billones de pesetas). Existen unas 37.000 empresas de este tipo, con 200.000 filiales extranjeras, que emplean a 73 millones de personas, el 10% del empleo en actividades no agr¨ªcolas en todo el mundo. S¨®lo las 100 mayores -y ello excluyendo las de servicios financieros- pose¨ªan 3,4 billones de d¨®lares en activos globales en 1992, de los que el 40% se encontraban fuera de su pa¨ªs de origen. La inversi¨®n pas¨® de 171.000 millones de d¨®lares en 1992 a 195.000 en 1993, de los que el 40% fue atra¨ªdo por los pa¨ªses, en desarrollo.