Una ni?a, herida al beber lavavajillas en el comedor de un colegio

Una ni?a de nueve a?os, Katia A. P., sufri¨® el pasado viernes quemaduras en el es¨®fago y en la boca tras ingerir lavavajillas en lugar de agua durante el almuerzo en el colegio p¨²blico Nuestra Se?ora de la Victoria, en Villarejo de Salvan¨¦s (5.100 habitantes).Katia bebi¨® confiada del vaso que acababan de servirle en el comedor. Una empleada de la empresa que prepara las comidas en el colegio, Servicatering, confundi¨® presuntamente las botellas de agua mineral con las del detergente l¨ªquido. Otras dos ni?as, de siete y 10 a?os, sufren quemaduras en la boca. Ninguna de las tres se halla en estado grave.

La empresa Servicatering, contratada por el Ministerio de Educaci¨®n y Ciencia, da de comer a los 32 chavales que permanecen durante el mediod¨ªa en el centro escolar Nuestra Se?ora de la Victoria de Villarejo de Salvan¨¦s. Las otras dos ni?as, de siete y 10 a?os, que tambi¨¦n ingirieron un poco de detergente ¨²nicamente sufren quemaduras en la lengua y en el paladar. El estado de Katia no reviste gravedad, pero la ni?a permanece ingresada en el hospital Gregorio Mara?¨®n.

Botellas parecidas

Las botellas de agua mineral que consumen en el centro docente tienen cierto parecido a las del lavavajillas l¨ªquido que usan en el comedor, seg¨²n cuenta el director del colegio, Alfredo Garc¨ªa. El n¨²mero de heridos pudo haber sido mucho mayor, ya que el l¨ªquido t¨®xico se hallaba servido en los vasos de los 32 ni?os que comen diariamente en el centro escolar.

Inexplicablemente, la empleada de Servicatering confundi¨® las botellas, seg¨²n Garc¨ªa. "Qu¨¦ mal sabe", comenz¨® a gritar la ni?a tan pronto como bebi¨® del vaso, cuyo contenido ten¨ªa el mismo aspecto que el agua. Al tiempo escup¨ªa el l¨ªquido, seg¨²n detalla Garc¨ªa. El director del centro asegura que la ni?a en ning¨²n momento se quej¨® de dolores en el est¨®mago.

Los dem¨¢s vasos conten¨ªan el lavavajillas, altamente venenoso. El conserje del colegio se acerc¨® el vaso de Katia a los labios y advirti¨® el sabor a detergente. R¨¢pidamente orden¨® que nadie bebiera. Demasiado tarde.

Alfredo Garc¨ªa se llev¨® a las accidentadas al ambulatorio de Villarejo, y de all¨ª, a urgencias del hospital Gregorio Mara?¨®n, donde recibieron atenci¨®n. Las dos ni?as que apenas probaron el detergente durmieron esa noche en sus casas sin mayores complicaciones.

En el colegio Nuestra Se?ora de la Victoria aducen: "Fue un error humano", seg¨²n el director del centro. Pero la asociaci¨®n de padres de alumnos estudia llevar a Servicatering a los tribunales, seg¨²n informa Efe. "Es increible", dijo ayer la presidenta de la asociaci¨®n, Mila Alonso, "que se pueda confundir el agua con un lavavajillas".