Abstencionistas en movimiento
La juventud vasca pasa de los pol¨ªticos, pero no de la solidaridad
El bote de pintura casi se le resbala de las manos. Ana, bilba¨ªna de 23 a?os, cree que desde el norte hay que "pringarse m¨¢s" y deshacer la tela de ara?a que ahoga a los pa¨ªses del sur. Ha escrito en un toldo la palabra solidaridad y su compa?era, comprometida tambi¨¦n con la causa internacionalista y el ecologismo, ha terminado la frase: "La solidaridad es la ternura de los pueblos". Las elecciones, como a muchas otras j¨®venes, no les quitan el sue?o. Prefieren el d¨ªa a d¨ªa: traer conferenciantes, hacer campa?as de solidaridad -"que no caridad", remarcan- Se sienten comprometidas con la pol¨ªtica, pero el juego electoral les cae un poco lejos.
Sabino Ayestar¨¢n, catedr¨¢tico de Psicolog¨ªa Social de la Universidad del Pa¨ªs Vasco, coincide con otros expertos en que la juventud vasca rechaza todas las organizaciones en las que no tiene nada que decir. "Creen que no tienen nada que hacer en los partidos pol¨ªticos, porque su ¨²nico inter¨¦s es recoger votos y alcanzar el poder".
El poso de la decepci¨®n ha ido macerando una juventud alejada del concurso electoral. Elecci¨®n tras elecci¨®n, se constata la crisis del sistema de representaci¨®n de partidos para la mayor parte de la juventud. Adem¨¢s, hay grupos socialmente aislados que no se integran en ning¨²n movimiento y que tampoco intentan cambiar nada. "Globalmente", a?ade Ayestar¨¢n, "la juventud vasca es abstencionista. La franja de edad de entre 20 y 30 a?os se est¨¢ quedando en la abstenci¨®n". En cambio, se ha producido un "aumento claro" en la participaci¨®n en grupos pacifistas, ecologistas e insumisos.Javier G¨®mez, vecino de Sestao, de 18 a?os; va a dar dos pasos: el de la insumisi¨®n -m¨¢s de la mitad de los insumisos espa?oles son vascos- y el de la abstenci¨®n. "Creo firmemente en la pol¨ªtica y combato la pasividad y la comodidad todos los d¨ªas. Alguien ha dicho que la resignaci¨®n es un suicidio cotidiano. Claro que la sociedad necesita un cambio, pero no de gobierno, sino de valores. Me he dado cuenta de que tenemos una fuerza muy grande si trabajamos colectivamente". Javier debuta en esto de "no acercarse a las urnas". Cree en el asamblearismo con sus fallos, claro"- y mantiene que el sistema est¨¢ hecho para unos pocos.
De los seis grupos estudiados en el libro El proceso de socializaci¨®n en los / las j¨®venes de Euskadi. J¨®venes vascos 1994, s¨®lo dos est¨¢n comprometidos con el cambio social: los radicales de izquierda o los reformistas de orientaci¨®n social. El perfil que dibuja el estudio sobre el joven vasco se aproxima al reformista individualista que no tiene ninguna preocupaci¨®n por el cambio social. Posee sentimientos altruistas. Es cr¨ªtico con el materialismo, pero ello no le impide caer en el consumismo y se considera esclavo de una sociedad creada por los adultos. "Me preocupa sobremanera que la juventud se est¨¦ colocando fuera de la sociedad de lo que ellos llaman adultos y que se limiten a criticarla como meros espectadores", apunta Ayestar¨¢n.
Mar¨ªa Eugenia Quevedo, 28 a?os, y Eneko Arruabarrena, de 24, van contracorriente. La primera, en paro desde hace un a?o, es presidenta de Nuevas Generaciones, la organizaci¨®n juvenil del PP, en Guip¨²zcoa, y el segundo forma parte de la juventudes del PNV desde que ten¨ªa 17 a?os. Mar¨ªa Eugenia ingres¨® en el PP hace cinco a?os en un momento en el que esta formaci¨®n no ten¨ªa ni militantes ni cuadros en San Sebasti¨¢n. "Tengo ganas de cambiar la sociedad y para ello el partido es el PP. En estas elecciones nuestra candidatura es muy joven y eso es una muestra de que cada vez somos m¨¢s las personas de la franja de entre 20 y 30 a?os que deseamos cambiar las cosas".
Eneko es natural de Leioa (Vizcaya). A falta de una asignatura para terminar la carrera de Derecho Econ¨®mico, quiere cursar estudios de posgrado en Estados Unidos. Habla castellano, euskera e ingl¨¦s. Tiene amigos que han optado por trabajar en ONGS (organizaciones no gubernamentales), pero su apuesta est¨¢ en el partido. "Si hay que echar una mano me apunto, pero creo que uno no puede estar en varias cosas al mismo tiempo".
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