Vigencia y modernidad de Mar¨ªa Zambrano
M¨¢s de cien intelectuales analizan en V¨¦lez-M¨¢laga la obra de la pensadora espa?ola
La marginalidad y el desconocimiento que hasta hace muy pocos a?os sobrevolaban la figura y la obra de Mar¨ªa Zambrano (V¨¦lez-M¨¢laga, 1904; Madrid, 1991) comienzan a resquebrajarse. La cr¨ªtica radical que realiz¨® a toda la filosof¨ªa occidental desde Descartes para indagar en el "sentir originario" como base de su pensamiento, y su biograf¨ªa dif¨ªcil y heterodoxa (mujer, republicana de izquierdas, liberal y con s¨®lidas convicciones religiosas) han sido elementos que no ayudaron a la difusi¨®n de su obra en un contexto demasiado proclive a los compartimientos estancos.
"Zambrano se adelant¨® a su ¨¦poca, y s¨®lo ahora ¨¦sta comienza a pillarla", afirma el profesor de filosof¨ªa Juan Fernando Ortega, director de la Fundaci¨®n Mar¨ªa Zambrano, que organiza desde ayer, y hasta el pr¨®ximo viernes, el segundo congreso internacional sobre la vida y la obra de la pensadora andaluza en su ciudad natal. El car¨¢cter pionero de su pensamiento y su biograf¨ªa peculiar y modesta se ir¨¢n poniendo de manifiesto durante estas jornadas.Al congreso vele?o, que fue inaugurado en la tarde de ayer por el escritor, Jes¨²s Moreno, con la conferencia La l¨®gica del sentir, asistir¨¢n, durante estos cuatro d¨ªas, m¨¢s de 120 personas, para agruparse en torno a un total de 46 intervenciones, entre comunicados, conferencia! y mesas redondas. Los mejores exegetas de la obra de la autora de Claros del bosque, entre los que destacan nombres como Miguel Morey, Massimo Cacciari, Alan Guy o el mismo Moreno, coincidir¨¢n con participantes que dejar¨¢n testimonios biogr¨¢ficos sobre Mar¨ªa Zambrano, aspecto este, el de la vida de la autora, del que tampoco se ha publicado hasta la fecha en demas¨ªa.
Para Jes¨²s Moreno -profesor de historia de la filosof¨ªa de la UNED, autor de la reciente antolog¨ªa de textos zambranianos publicada en Siruela La raz¨®n y la sombra, y tal vez el amigo m¨¢s constante de Mar¨ªa Zambrano en sus ¨²ltimos a?os de vida, as¨ª como principal responsable de su regreso definitivo a Espa?a en 1984-, "Ia vigencia del pensamiento de Mar¨ªa es absoluta, y su inter¨¦s, creciente, aunque no creo que se convierta en moda, algo que, por otra parte, a ella le hubiese disgustado sobremanera".
"Frente a la claridad y la evidencia de la tradici¨®n filos¨®fica del pensamiento occidental, Zambrano puso sonidos y penumbra", afirma Moreno, para quien la autora de El hombre y lo divino hizo con sus Iibros y sus ensayos la cr¨ªtica "m¨¢s radical que se haya hecho jam¨¢s a la filosof¨ªa, aunque tuvo la virtud de no ser realizada con violencia". Mar¨ªa Zambrano afirm¨® que una de las ra¨ªces de la violencia latente en la sociedad europea descansa en su propio pensamiento: Llevamos la guerra en nuestra inteligencia y nuestra voluntad", escribi¨®.
Para el profesor Moreno, "su obra supuso una alternativa a la filosof¨ªa occidental y a la historia sacrificial de la historia". Desde su pensar relativista, su b¨²squeda del discernimiento del sentir y su arraigo en lo que el profesor Moreno denomina "el roce adivinatorio", Mar¨ªa Zambrano propuso una filosof¨ªa progresiva, cargada de rasgos inici¨¢ticos, "instalada en el env¨¦s de las ideas". "Mar¨ªa Zambrano hac¨ªa filosof¨ªa como m¨²sica atonal, seriada y fragmentadamente", apunta Jes¨²s Moreno.
Sus m¨¦todos de an¨¢lisis "arqueol¨®gicos" de la historia de la filosof¨ªa fueron precursores en muchos a?os a estrellas posmodernas del pensamiento, como
Foucault, y su reivindicaci¨®n de la filosof¨ªa presocr¨¢tica, el car¨¢cter fragmentario y po¨¦tico de su obra y su cr¨ªtica a la soberbia epistemol¨®gica que desde Descartes recorri¨® la filosof¨ªa occidental constituyen, en gran parte, la base del "pensamiento d¨¦bil", tan vigente en la actualidad. "Mar¨ªa sigue siendo una autora de minor¨ªas", dice Juan Fernando Ortega, director de la Fundaci¨®n Mar¨ªa Zambrano, "aunque es muy gratificante, en un primer acercamiento, por la calidad y musicalidad de su prosa; el discurrir de su pensamiento es dif¨ªcil; sin embargo, alienta una transparencia absoluta".
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.