El Senado de EE UU califica de desastre la conducta de la CIA en el 'caso Ames'

"Un desastre sin precedentes en cuanto a sus dimensiones". As¨ª califica el Comit¨¦ de Inteligencia del Senado norteamericano el caso del esp¨ªa Aldrich Ames, el agente de la CIA que filtr¨® a Mosc¨² m¨¢s de 100 operaciones secretas de EE UU o de los pa¨ªses aliados entre 1985 y 1994. El informe condena la "ineptitud" del servicio secreto m¨¢s conocido del mundo para seguir las numerosas pistas que deber¨ªan haber impedido el destructivo trabajo del topo Ames. Los tres ¨²ltimos directores de la Agencia -Casey, Webster y Gates- son criticados.

Estos responsables son censurados por su "incomprensible fracaso" a la hora de investigar seriamente el asunto. El actual director, James Woolsey, recibe otro rapapolvo por las suaves sanciones impuestas a los responsables de Ames en la CIA.El informe, presentado el lunes en una tensa sesi¨®n del Comit¨¦ de Inteligencia, tiene 117 p¨¢ginas, adem¨¢s de la transcripci¨®n de 107 folios de la entrevista entre el presidente del Comit¨¦, el senador Dennis DeConcini, y el esp¨ªa Aldrich Ames, y se basa en las 450 p¨¢ginas, todav¨ªa secretas, resultado de la investigaci¨®n del inspector general de la CIA.

La calificaci¨®n de "desastre sin precedentes" se entiende mejor a la luz de las consecuencias directas o indirectas de la labor de Ames: 10 de los mejores agentes que trabajaban para el espionaje norteamericano en la antigua Uni¨®n Sovi¨¦tica -muchos de ellos rusos- fueron detenidos y ejecutados -con tal celeridad que Ames se quej¨® de que su labor pod¨ªa quedar al descubierto.

En junio de 1985, el esp¨ªa sac¨® del cuartel general de la CIA cientos de documentos secretos en bolsas de pl¨¢stico y los entreg¨® directamente a un funcionario sovi¨¦tico. Despu¨¦s, Ames se entrevist¨® con ¨¦l decenas de veces, y tuvo el aplomo de decir a sus superiores que estaba tratando de ganarle para el contraespionaje. La CIA pas¨® por alto informes del FBI sobre contactos de este tipo de los que Ames no hab¨ªa dicho nada, pic¨® en varios anzuelos puestos por el KGB para proteger a Ames y asegur¨® a diversos comit¨¦s del Congreso, a finales de los ochenta, que los problemas de agentes dobles estaban bajo control.

Problemas con el alcohol

El informe subraya tambi¨¦n las irresponsabilidades cometidas en el principio de la carrera de Ames. Antes de que se le confiara la jefatura del servicio de contrainteligencia para la URSS, se pas¨® por alto un informe sobre una borrachera monumental, con accidente de tr¨¢fico incluido, que hab¨ªa protagonizado durante una misi¨®n en M¨¦xico. Sus continuos problemas con el alcohol y la mediocridad de su curr¨ªculo no fueron obst¨¢culos, para asignarle el importante puesto que desempe?¨®. En 1986, cuando llevaba un a?o filtrando datos a Mosc¨², Ames pas¨® una prueba de un detector de mentiras que reflej¨® respuestas falsas, pero a nadie le pareci¨® extra?o."Este pa¨ªs no puede permitirse semejantes calamidades en el futuro", indica el informe del Senado, que ofrece 23 recomendaciones a los dirigentes de la CIA, entre ellas, que se mejore la estrategia para detectar agentes dobles, que se tomen en serio los -en apariencia- abundantes problemas de alcoholismo entre los funcionarios de la Agencia y que se refuercen las medidas de seguridad internas.

Los 17 miembros del Comit¨¦ de Inteligencia expresaron tambi¨¦n su asombro por la suavidad de las sanciones que Woolsey, director de la CIA, tom¨® hace un mes sobre los responsables de la cadena de desprop¨®sitos y errores. En lugar de despedirles o expedientarles, Woolsey se content¨® con una reprimenda formal a 11 agentes y ex agentes.