La proliferaci¨®n de candidatos revive la idea de unas primarias en la derecha francesa
La proliferaci¨®n de candidatos presidenciales en la derecha francesa est¨¢ dando fuerza a la idea de celebrar unas elecciones primarias. La elecci¨®n de un candidato ¨²nico ya se contemplaba en el acuerdo de coalici¨®n firmado en 1991 por gaullistas y giscardianos, pero la dificultad de pactar un mecanismo y el escaso inter¨¦s de los l¨ªderes conservadores impidi¨® la concreci¨®n del proyecto. Los diputados y senadores de la Reagrupaci¨®n para la Rep¨²blica (RPR, gaullistas), encabezados por Jacques Chirac, propusieron ayer que una comisi¨®n estudiara Ia viabilidad de unas elecciones primarias" a la presidencia.
Si de Jacques Chirac dependiera, las primarias ya estar¨ªan en la papelera. Al fundador del RPR no le falta raz¨®n cuando afirma que la Constituci¨®n de la V Rep¨²blica ya prev¨¦ unas primarias: la primera vuelta electoral sirve precisamente para cribar candidatos y dejar solo dos, normalmente uno de la derecha y otro de la izquierda. Por lo dem¨¢s, Chirac ya se ha declarado candidato. Pero las primarias tienen un buen abogado en el ministro del Interior, Charles Pasqua, el m¨¢s influyente bar¨®n en las filas gaullistas. Y el propio primer ministro, Edouard Balladur, afirma que "si es posible celebrar esa elecci¨®n, hay que hacerlo".Pasqua lanz¨® la semana pasada una declaraci¨®n en favor de las primarias, secundada por la mayor¨ªa de los diputados de la gran coalici¨®n RPR-UDF. Seg¨²n Pasqua es "perfectamente posible" efectuar "entre el 15 e enero y el 15 de febrero" la elecci¨®n de un campe¨®n ¨²nico de la derecha. Su argumento tiene tan to peso como el de Chirac: en la primera vuelta de las presiden ciales los candidatos conservadores se despedazan unos a otros, y las dos semanas que se paran una vuelta de otra son insuficientes para resta?ar heridas.
Y ocurre lo que ocurri¨® en 1981, cuando Chirac sugiri¨® a su gente que no votara por Giscard. O lo que ocurri¨® en 1988, cuando la gente de Giscard no se moviliz¨® en favor de Chirac. En ambos casos acab¨® ganando Mitterrand, el candidato de la izquierda.
?Qui¨¦n votar¨ªa en las primarias? Hay opiniones para todos los gustos. Los balladuristas sugieren una votaci¨®n restringida a los parlamentarios conservadores (ganar¨ªa Balladur porque goza de m¨¢s simpat¨ªas que Chirac en la UDF) o, cuando mucho, a los cargos p¨²blicos, desde senadores hasta ediles. El chiraquista Philippe S¨¦guin, presidente de la Asamblea Nacional, afirma que ser¨ªa "intolerable" utilizar el Parlamento para un asunto tan estrictamente partidista. Alternativamente, algunos balladuristas proponen simplemente el uso de una panoplia de sondeos: el m¨¢s popular, gana, y los dem¨¢s abandonan.
Philippe S¨¦guin, junto a Jacques Chirac y el nuevo presidente interino del RPR, el ministro de Exteriores Alain Jupp¨¦, lanz¨® ayer "tres condiciones irrenunciables" para la organizaci¨®n de unas primarias. Las condiciones del bando de Chirac son las siguientes: "Posibilidad de participaci¨®n abierta a cuantos electores lo deseen, aceptaci¨®n del resultado por todos los candidatos declarados o potenciales, y organizaci¨®n [de la campa?a y la votaci¨®n] compatible con el desarrollo del debate p¨²blico esperado por los franceses".
Los parlamentarios del RPR propusieron un comit¨¦ con parlamentarios de la UDF con la misi¨®n de proponer un mecanismo electoral. El grupo de Chirac tiene la esperanza de que la comisi¨®n funcione lentamente y se vea desbordada por el calendario de las aut¨¦nticas elecciones.
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